Texto Ôureo: Numeros 4-6
Lecturas para adultos en la semana
DĆa 1: NĆŗmeros 4
DĆa 2: Ā NĆŗmeros 5-6
DĆa 3: Jueces 3
DĆa 4: 2ĀŖReyes 20
DĆa 5: Hechos 21:1-36
DĆa 6: 1ĀŖTesalonicenses 3
I- La mujer en el pueblo de Dios.
En esta porción hay un tema muy interesante que en muchas ocasiones es muy mal interpretado. Cuando se seƱala a la mujer en cuanto a temas de recato o de rebeldĆa familiar no es por un problema de machismo, sino mĆ”s bien porque la mujer en la cultura bĆblica es la base de la familia y de la sociedad. Ella representa el modelo de limpieza, orden y cordura para la familia, que es la cĆ©lula principal de toda sociedad.
La mujer que era sospechosa de adulterio era llevada al tabernĆ”culo y se le daba la posibilidad de reconocer su pecado; si se confesaba no culpable se le daba a beber un agua amarga que era milagrosa y si era real su traición, morĆa al instante. Seguido a su muerte, el hombre con que habĆa pecado tambiĆ©n morĆa.
II- Dios nunca recomendó el enclaustramiento.
Dios seƱala que para alcanzar la santidad y la consagración no es necesario aislarse del mundo, sino que se debĆa vivir la santidad entre los demĆ”s. En realidad, una persona que se aĆsla para consagrarse estĆ” siguiendo el camino mĆ”s sencillo, porque lo difĆcil es vivir en consagración en medio de las situaciones normales de la vida, de la familia, de los vecinos, en el trabajo, etc.
III- El matrimonio.
Hoy en dĆa, el mundo ha querido convencer a la iglesia de que el matrimonio es algo personal, o sea que incumbe solamente a un hombre y una mujer. Sin embargo, la Biblia presenta leyes matrimoniales en medio de otras leyes que tienen que ver con la nación, con el tabernĆ”culo y los levitas. Con esto se muestra que el matrimonio es parte indisoluble y, a la vez, lo mĆ”s influyente de una sociedad. En realidad, ese concepto reduccionista del matrimonio como exclusivo de dos personas es egoĆsta; tal vez por eso sea tan defendido en la sociedad de hoy. Es triste ver actualmente cómo los cónyuges alegan que rompen sus matrimonios porque ya no sienten nada o porque estĆ”n incómodos con su pareja. Cada uno se ve como el centro de todo donde sus deseos y emociones precisan un bienestar. Ellos ven muy poco de la repercusión que tienen a su alrededor. Cuando un matrimonio se rompe o funciona mal eso trasciende no solamente a los hijos, que pudieran ser los mĆ”s cercanos, sino tambiĆ©n a su familia, vecindario, trabajo y hasta toda la nación. Esta gravedad del asunto es lo que precisamente Dios quiere mostrar a travĆ©s del conjunto de estas leyes.
IV- La consagración no es libre.
La palabra nazir (nazareo) en hebreo viene de la palabra ācoronaā, o sea que en relación con esto encontramos mandamientos, no para hacerlo todo el pueblo, sino para aquellos que se consagraban de forma especial a Dios, quienes se constituĆan asĆ en coronas del pueblo, mientras estaban en este voto. La persona que se consagraba no tenĆa que abstenerse de todo, sino de tres cosas que Dios exigĆa especĆficamente: (1) Ingerir cualquier derivado de la uva, (2) Cortarse el cabello, (3) El contacto con cadĆ”veres. El tiempo de nazareo podĆa finalizar al cabo de varios dĆas o meses, siempre y cuando la persona dejara claro previamente a la consagración cuĆ”nto durarĆa. Si no lo hacĆa, debĆa permanecer un mes solamente.
Al terminar la consagración debĆa traer dos ofrendas y una de ellas era por el pecado. ĀæPor quĆ©? Pudieran existir dos opciones: (1) Es ilógico y hasta pudiera ser pecaminoso salir de un nivel elevado de espiritualidad para disfrutar de las cotidianidades de la vida, (2) Apartarse de lo que Dios ha creado pudiendo parecer como que lo estĆ” desechando. Aunque las respuestas pudieran ser otras, lo que sĆ queda claro es que se precisaba perdón, aun cuando se viviera en consagración. Hoy en dĆa a travĆ©s del continuo perdón ofrecido por JesĆŗs en la cruz somos renovados a travĆ©s de los altos y bajos de la vida espiritual. Hay quien piensa que, por ser salvados no precisan de un perdón continuo; pero la realidad es que gracias a ese perdón continuo es que podemos extendernos a la santidad que tenemos delante, pidiendo sinceramente perdón a Dios y luego olvidando lo que pudimos hacer incorrectamente.Ā
En esta porción tambiĆ©n se aprende que la consagración no puede ser como uno estime conveniente, como improvisaron los monjes y ermitaƱos de la antigüedad, porque si uno se consagra para agradar a Dios debe hacerlo en la medida de lo que Ćl demanda y establece. Si la consagración es como el hombre dispone segĆŗn su antojo o lógica, queda descalificada instantĆ”neamente como una consagración a Dios. El SeƱor a lo largo de la Escritura expone cómo ha de ser la consagración a Ćl; con la vida de su Hijo la ejemplifica y a travĆ©s del EspĆritu Santo capacita para poder experimentarla.
Preguntas:
1.- ¿En qué sentido cree usted que el movimiento feminista actual extremo contradice lo exigido por Dios aqu�
2.- ¿En qué sentido el machismo tradicional también contradice lo exigido por Dios aqu�
3.- ¿Qué beneficio pudiera traer hoy a la iglesia que alguno de sus miembros haga el voto de consagración?
NĆŗmeros 4 – 6
Censo de los levitas
1 Habló YHVH a MoisĆ©s y a Aarón, diciendo: 2 Levanta un censo de los hijos de Coat entre los hijos de LevĆ, segĆŗn sus familias y sus casas paternas. 3 De edad de treinta aƱos arriba, hasta cincuenta aƱos, todo el que entra en la milicia para servir en la tienda de reunión.
4 El servicio de los hijos de Coat en la tienda de reunión serÔ este: Las cosas mÔs sagradas. 5 Cuando el campamento se traslade, entrarÔ Aarón y sus hijos y descolgarÔn el velo de separación, con que cubrirÔn el arca del testimonio. 6 Sobre ella pondrÔn la cubierta de piel de tejón, y extendiendo encima un paño todo de azul, le colocarÔn sus varas.
7 Y sobre la mesa de proposición serÔ extendido un paño de azul, y sobre ella: los platos, las cazoletas, las tazas y las copas de libación. El pan perpetuo quedarÔ encima. 8 Sobre estas cosas extenderÔn un paño carmesà y lo taparÔn con una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas.
9 Después tomarÔn un paño de azul y cubrirÔn el candelabro del alumbrado y sus lÔmparas, sus despabiladeras, sus platillos y todos los recipientes del aceite con los que se da servicio. 10 Y lo envolverÔn con todos sus utensilios en una cubierta de piel de tejón, poniéndolo sobre las parihuelas.
11 ExtenderÔn asimismo sobre el altar de oro un paño de azul, lo cubrirÔn con una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas. 12 Y tomarÔn todos los utensilios del servicio con los cuales ofician en el santuario y los envolverÔn en un paño de azul, cubriéndolos con una cubierta de piel de tejón, y los pondrÔn sobre unas parihuelas. 13 Después quitarÔn la ceniza del altar, y extenderÔn sobre él un paño de púrpura, 14 y pondrÔn sobre él todos sus utensilios con los cuales ofician: braseros, garfios, paletas y tazones, todos los instrumentos del altar, y extenderÔn sobre él una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas.
15 Cuando Aarón y sus hijos hayan terminado de cubrir los objetos sagrados con todos los utensilios del santuario, al moverse el campamento, entonces vendrĆ”n los hijos de Coat para transportarlos, pero no tocarĆ”n el santuario, pues morirĆan. Estas son las cosas de la tienda de reunión que transportarĆ”n los hijos de Coat.
16 Y Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, estarÔ encargado del aceite del alumbrado, del incienso aromÔtico, de la ofrenda vegetal permanente y del aceite de la unción. EstarÔ encargado de todo el tabernÔculo y de todo lo que hay en él, del santuario y sus utensilios.
17 Y habló YHVH a MoisĆ©s y a Aarón, diciendo: 18 No permitĆ”is que la tribu de las familias de los coatitas sea exterminada de entre los levitas. 19 Esto habĆ©is de hacer con ellos para que vivan y no mueran cuando se acerquen a los objetos santĆsimos: Aarón y sus hijos entrarĆ”n y asignarĆ”n a cada uno su transporte, 20 pero no entrarĆ”n, ni por un momento, para mirar los objetos sagrados, para que no mueran.
21 Y habló YHVH a Moisés, diciendo: 22 Haz también el censo de los hijos de Gersón por sus casas de familias paternas. 23 Los alistarÔs de treinta años en adelante, hasta cincuenta, todos ellos entrarÔn para el servicio de la tienda de reunión. 24 Este serÔ el trabajo de las familias de Gersón, respecto al servicio y al transporte:
25 TransportarÔn las cortinas del tabernÔculo y la tienda de reunión, su cubierta y la cubierta de tejón que estÔ encima de él, y la cortina de la entrada a la tienda de reunión, 26 y las cortinas del atrio alrededor del tabernÔculo y del altar, sus cuerdas, todos los utensilios de su servicio y todo lo que se debe hacer con ellos. Asà servirÔn.
27 Según palabra de Aarón y de sus hijos se harÔ el servicio de los hijos del gersonita, en todos sus cargos y en todo su servicio, y les asignarÔs la custodia de toda su carga. 28 Tal es el servicio de los hijos del gersonita en la tienda de reunión. Sus deberes estarÔn en mano de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
29 ContarÔs también a los hijos de Merari, por sus casas de familias paternas. 30 Los alistarÔs desde los treinta hasta los cincuenta años de edad, todos ellos entrarÔn en la milicia para el servicio de la tienda de reunión. 31 Los cometidos de su carga en todo su servicio en la tienda de reunión serÔn: Los tablones del tabernÔculo, sus travesaños, sus columnas y sus basas, 32 las columnas del atrio que lo rodea, sus basas, sus estacas y sus cuerdas, todos sus utensilios y todo su servicio. Y asignaréis por nombre todos los utensilios que estÔn siendo transportados. 33 Tal es el servicio de las familias meraritas en todo su trabajo en la tienda de reunión, por mano de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
34 AsĆ, pues, MoisĆ©s, Aarón y los jefes de la asamblea, pasaron lista a los hijos de Coat por sus casas de familias paternas, 35 de treinta aƱos en adelante, hasta cincuenta aƱos, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión. 36 Y los contados por sus familias fueron dos mil setecientos cincuenta.
37 Estos fueron los contados de las familias de Coat, todos los que sirven en la tienda de reunión, a los cuales censó Moisés con Aarón conforme al dicho de YHVH, por medio de Moisés. 38 Y los contados de los hijos de Gersón, por sus casas de familias paternas, 39 de treinta años en adelante, hasta cincuenta, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión, 40 resultó por sus casas de familias paternas: dos mil seiscientos treinta. 41 Estos fueron los contados de las familias de los hijos de Gersón, todo el que sirve en la tienda de reunión, los cuales Moisés y Aarón contaron conforme al dicho de YHVH. 42 Y los contados de las familias de los hijos de Merari, por sus casas de familias paternas, 43 desde la edad de treinta años en adelante hasta los cincuenta, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión, 44 los contados por sus familias, fueron tres mil doscientos.
45 Tales fueron los contados de las familias de los hijos de Merari, que contaron Moisés y Aarón, conforme al dicho de YHVH por medio de Moisés. 46 Todos los levitas enumerados a los que Moisés y Aarón y los jefes de Israel pasaron lista por
sus casas de familias paternas, 47 de treinta años en adelante hasta los cincuenta, todo el que entraba para hacer la obra del servicio y la obra de llevar cargas, en lo relativo a la tienda de reunión, 48 fueron ocho mil quinientos ochenta empadronados.
49 AsĆ, conforme al dicho de YHVH, fueron alistados por mano de MoisĆ©s, cada uno segĆŗn su obra y segĆŗn su cargo. El alistamiento se hizo tal como YHVH habĆa ordenado a MoisĆ©s.
āŗ4.3 la milicia… Esto es, la milicia sagrada. Los levitas no podĆan formar parte del ejĆ©rcito de Israel, pero eran tratados como soldados en el servicio del tabernĆ”culo.
āŗ4.7 azul, y… TM aƱade pondrĆ”n. Se sigue LXX ā§194; el pan perpetuo… Lit. el pan de siempre. Esto es, la ofrenda permanente representada por los panes de la mesa, que anticipa en tipo la Cena consagrada al SeƱor.
āŗ4.8 carmesĆ… TM: escarlata. Se sigue LXX.
āŗ4.9 se da… TM aƱade a ella. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.19 Se inserta bjetos para suplir elipsis del original; cada uno… TM aƱade hombre… su servicio. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.23 entrarĆ”n… TM aƱade en la milicia. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.26 TM registra distintas aƱadiduras. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.27 se harĆ”… TM aƱade todo. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.28 el servicio de… TM aƱade familias. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.30 milicia… TM aƱade para servir. Se sigue LXX ā§194.
NĆŗmeros 5
De la impureza
1 Habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 2 Ordena a los hijos de Israel que despidan del campamento a todo leproso, a todo afectado de gonorrea, y a cualquier contaminado por cuerpo muerto, 3 sea varón o mujer, los expulsarĆ©is fuera del campamento para que no se contamine el campamento en medio del cual Yo habito. 4 Y los hijos de Israel hicieron asĆ. Los expulsaron fuera del campamento tal como YHVH habĆa hablado a MoisĆ©s. AsĆ hicieron los hijos de Israel.
De la restitución
5 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 6 Habla a los hijos de Israel: Cualquier hombre o mujer que cometa cualquier pecado en perjuicio del prójimo, ciertamente prevarica. Tal persona serÔ culpable. 7 ConfesarÔ, pues, el pecado cometido, y restituirÔ el objeto del delito en su pleno valor, añadiendo a ello un quinto, y lo entregarÔ al perjudicado. 8 Y si la persona no tiene pariente a quien le sea restituido el daño, el objeto del delito serÔ para YHVH, para el sacerdote, ademÔs del carnero de las expiaciones, con el cual harÔ expiación por el culpable. 9 Toda ofrenda alzada de todas las cosas santificadas que los hijos de Israel presenten al sacerdote, serÔ suya, 10 y lo santificado por cualquiera serÔ suyo, asimismo lo que cualquiera dé al sacerdote, serÔ suyo.
De los celos
11 Y habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 12 Habla a los hijos de Israel, y diles: Respecto a cualquier hombre: Si su mujer se descarrĆa y mira a un lado despreciĆ”ndolo, 13 y alguien yace con ella con emisión de semen, y escapa a ojos de su marido y ella lo esconde (y queda mancillada sin haber testigos contra ella y sin ser descubierta), 14 y cae sobre Ć©l un espĆritu de celo, y recela de su mujer que estĆ” mancillada, o cae sobre Ć©l un espĆritu de celo y recela de su mujer, pero ella no estĆ” mancillada, 15 aquel hombre llevarĆ” su mujer ante el sacerdote y ofrecerĆ” una ofrenda por ella: una dĆ©cima de un efa de harina de cebada, pero no derramarĆ” sobre ella aceite ni pondrĆ” sobre ella incienso, porque es ofrenda de celo, ofrenda del recuerdo que rememora el pecado. 16 Entonces el sacerdote harĆ” que se acerque y se mantenga de pie delante de YHVH. 17 Luego el sacerdote tomarĆ” agua consagrada en una vasija de barro, y el sacerdote tomarĆ” del polvo que hay en el suelo del tabernĆ”culo y lo echarĆ” en el agua. 18 El sacerdote harĆ”, pues, que la mujer se mantenga de pie delante de YHVH, soltarĆ” el cabello de la mujer y pondrĆ” en sus palmas la ofrenda vegetal de recordación, que es la ofrenda vegetal de celos, y en mano del sacerdote estarĆ”n las aguas amargas que traen maldición. 19 Y el sacerdote la conjurarĆ” y dirĆ” a la mujer: Si no ha yacido contigo varón y no te has descarriado de tu marido para ser mancillada, sĆ© inocente de estas aguas amargas que acarrean maldición.
20 Pero si te has descarriado de tu marido y has sido mancillada, y alguno ha tenido su copulación contigo, aparte de tu marido, 21 (el sacerdote conjurarÔ a la mujer con juramento de maldición) el sacerdote dirÔ a la mujer: ”YHVH te entregue a execración y a maldición en medio de tu pueblo! ”Haga YHVH que tu muslo caiga y tu vientre sea inflamado! 22 ”Entre esta agua que maldice en tus entrañas e inflame tu vientre y decaiga tu muslo! Y la mujer dirÔ: ”Amén, amén! 23 Entonces el sacerdote escribirÔ estas maldiciones en un rollo, las borrarÔ con las aguas amargas, 24 y darÔ a beber a la mujer las aguas amargas portadoras de maldición, y las aguas de maldición penetrarÔn en ella haciéndose amargas. 25 Después el sacerdote tomarÔ de mano de la mujer la ofrenda de los celos, y mecerÔ la ofrenda en presencia de YHVH, y la aproximarÔ ante el altar.
26 Y el sacerdote tomarĆ” una pizca de la ofrenda, en memoria de ella, la dejarĆ” consumir sobre el altar, tras lo cual darĆ” a beber las aguas a la mujer.
27 Y ocurrirĆ” que si ella estaba mancillada y habĆa sido infiel a su marido, las aguas de maldición penetrarĆ”n en ella haciĆ©ndose amargas, y su vientre serĆ” inflamado y se caerĆ” su muslo, y la mujer serĆ” maldición entre su pueblo.
28 Pero si la mujer no fue mancillada y es pura, quedarĆ” ilesa y tendrĆ” descendencia. 29 Tal es la ley de los celos, tocante a una mujer que se ha descarriado de su marido y haya sido mancillada, 30 o cuando sobre un hombre sobrevenga espĆritu de celos, y recele de su mujer: HarĆ” que la mujer estĆ© de pie en presencia de YHVH, y el sacerdote le aplicarĆ” toda esta ley. 31 Y aquel varón serĆ” inocente de iniquidad, pero la mujer cargarĆ” con su iniquidad.
āŗ5.2 gonorrea… Heb. zab. Gr. gonorrue. La gonorrea es una infección de transmisión sexual. Algunas versiones traducen flujo de semen.
āŗ5.3 sea… TM aƱade expulsarĆ©is. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.5-8 cualquier pecado… āLv 6.1-7.
āŗ5.6 prevarica… TM aƱade contra YHVH. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.12-15 Se sigue LXX.
āŗ5.14 cae sobre el… Esto es, sobre el marido.
āŗ5.16 que se acerque… Esto es, a la mujer.
āŗ5.18 soltarĆ” el cabello… Esto es, sĆmbolo de vergüenza āLv 10.6; sus palmas… TM: palmas de ella. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.19 la conjurarĆ”… Es decir, harĆ” que jure.
āŗ5.27 Y… TM aƱade la harĆ” beber el agua. Se sigue LXX ā§194.
NĆŗmeros 6
Nazareos
1 Habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 2 Habla a los hijos de Israel, y les dirĆ”s: Cuando algĆŗn hombre o mujer haga voto especial de nazareo para dedicarse a YHVH, 3 estarĆ” purificado lejos del vino y del licor. No beberĆ” vinagres de vino ni de licor, no beberĆ” ningĆŗn licor de uvas ni comerĆ” uvas frescas o secas. 4 No comerĆ” nada de cuanto proviene de la cepa vinĆcola, desde las semillas hasta los pĆ”mpanos, en todos los dĆas de su nazareato. 5 No pasarĆ” navaja sobre su cabeza durante los dĆas del voto de su nazareato. Hasta que sean cumplidos los dĆas por los que se consagró a YHVH serĆ” santo, dejando crecer libremente el cabello de su cabeza. 6 No estarĆ” junto a cuerpo muerto durante los dĆas de su consagración a YHVH. 7 No se contaminarĆ” por su padre o su madre, ni por su hermano o hermana cuando mueran, porque la consagración a su Elohim estĆ” sobre su cabeza. 8 Todos los dĆas de su nazareato serĆ” santo a YHVH. 9 Y si alguien, repentinamente, muere junto a Ć©l, de modo que la cabeza de su nazareato es contaminada, su cabeza se rasurarĆ” el dĆa en que sea purificado. El dĆa sĆ©ptimo serĆ” rasurado. 10 Al octavo dĆa llevarĆ” dos tórtolas o dos palominos al sacerdote, a la entrada de la tienda de reunión, 11 y el sacerdote presentarĆ” uno en ofrenda por el pecado y el otro en holocausto. Y harĆ” expiación a favor de Ć©l por lo que pecó en relación con el cuerpo muerto, y volverĆ” a consagrar su cabeza el dĆa 12 en que sea santificado a YHVH, los dĆas de su voto, llevando un cordero aƱal como ofrenda por la culpa, y los primeros dĆas se anularĆ”n, por cuanto contaminó su nazareato.
13 Esta es la ley para el nazareo: El dĆa en que se cumpla el tiempo de su nazareato, serĆ” llevado a la entrada de la tienda de reunión, 14 y aproximarĆ” su vĆctima ante YHVH: un cordero sin defecto de un aƱo en holocausto, una cordera sin defecto de un aƱo para la ofrenda por el pecado, y un carnero sin defecto para las ofrendas de paz. 15 TambiĆ©n un canastillo de panes sin levadura, tortas de flor de harina amasadas con aceite, y galletas sin levadura untadas con aceite, con su ofrenda vegetal y sus libaciones. 16 Y el sacerdote lo harĆ” acercar en presencia de YHVH, y realizarĆ” su sacrificio por el pecado y su holocausto. 17 OfrecerĆ” el carnero en sacrificio por ofrendas de paz a YHVH con el canastillo de los panes sin levadura, y el sacerdote ofrecerĆ” su ofrenda vegetal y sus libaciones. 18 Y el nazareo raparĆ” su cabeza de nazareo a la entrada de la tienda de reunión, y tirarĆ” los cabellos al fuego debajo del sacrificio de las ofrendas de paz. 19 DespuĆ©s tomarĆ” el sacerdote la espaldilla cocida del carnero, y del canastillo una torta sin levadura y una galleta sin levadura, y las pondrĆ” en las palmas del nazareo, despuĆ©s que se haya rapado el cabello de su nazareato. 20 Luego el sacerdote los mecerĆ” como ofrenda mecida en presencia de YHVH. Es cosa santa para el sacerdote, ademĆ”s del pecho mecido y la espaldilla de la ofrenda alzada; despuĆ©s el nazareo podrĆ” beber vino.
21 Tal es la ley del nazareo que hace voto de ofrenda suya a YHVH con motivo de su nazareato, ademÔs de aquello que le permita su mano, según el voto que haya echo conforme a la ley de su nazareato.
La bendición sacerdotal
22 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 23 Habla a Aarón y a sus hijos, diciendo: Asà bendeciréis a los hijos de Israel. Diles: 24 YHVH te bendiga y te guarde, 25 YHVH haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia. 26 YHVH alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. 27 Asà pondrÔn mi Nombre sobre los hijos de Israel, y Yo los bendeciré.
āŗ6.7 su cabeza… Esto es, su cabellera, sĆmbolo y seƱal de su separación para Dios āJue 16.16-17.
āŗ6.9 Se sigue LXX.
āŗ6.17 ofrecerĆ”… Esto es, el nazareo.
āŗ6.18 y… TM aƱade tomando… de su cabeza de nazareo. Se sigue LXX ā§194.
āŗ6.21 haya hecho… TM aƱade asĆ harĆ”. Se sigue LXX ā§194; Nazareato… āHch 21.23- 24.
āŗ6.24-26 YHVH… YHVH… YHVH… ā§170 (n.° 3).
NĆŗmeros 4 – 6
Censo de los levitas
1 Habló YHVH a MoisĆ©s y a Aarón, diciendo: 2 Levanta un censo de los hijos de Coat entre los hijos de LevĆ, segĆŗn sus familias y sus casas paternas. 3 De edad de treinta aƱos arriba, hasta cincuenta aƱos, todo el que entra en la milicia para servir en la tienda de reunión.
4 El servicio de los hijos de Coat en la tienda de reunión serÔ este: Las cosas mÔs sagradas. 5 Cuando el campamento se traslade, entrarÔ Aarón y sus hijos y descolgarÔn el velo de separación, con que cubrirÔn el arca del testimonio. 6 Sobre ella pondrÔn la cubierta de piel de tejón, y extendiendo encima un paño todo de azul, le colocarÔn sus varas.
7 Y sobre la mesa de proposición serÔ extendido un paño de azul, y sobre ella: los platos, las cazoletas, las tazas y las copas de libación. El pan perpetuo quedarÔ encima. 8 Sobre estas cosas extenderÔn un paño carmesà y lo taparÔn con una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas.
9 Después tomarÔn un paño de azul y cubrirÔn el candelabro del alumbrado y sus lÔmparas, sus despabiladeras, sus platillos y todos los recipientes del aceite con los que se da servicio. 10 Y lo envolverÔn con todos sus utensilios en una cubierta de piel de tejón, poniéndolo sobre las parihuelas.
11 ExtenderÔn asimismo sobre el altar de oro un paño de azul, lo cubrirÔn con una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas. 12 Y tomarÔn todos los utensilios del servicio con los cuales ofician en el santuario y los envolverÔn en un paño de azul, cubriéndolos con una cubierta de piel de tejón, y los pondrÔn sobre unas parihuelas. 13 Después quitarÔn la ceniza del altar, y extenderÔn sobre él un paño de púrpura, 14 y pondrÔn sobre él todos sus utensilios con los cuales ofician: braseros, garfios, paletas y tazones, todos los instrumentos del altar, y extenderÔn sobre él una cubierta de piel de tejón, y le colocarÔn sus varas.
15 Cuando Aarón y sus hijos hayan terminado de cubrir los objetos sagrados con todos los utensilios del santuario, al moverse el campamento, entonces vendrĆ”n los hijos de Coat para transportarlos, pero no tocarĆ”n el santuario, pues morirĆan. Estas son las cosas de la tienda de reunión que transportarĆ”n los hijos de Coat.
16 Y Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, estarÔ encargado del aceite del alumbrado, del incienso aromÔtico, de la ofrenda vegetal permanente y del aceite de la unción. EstarÔ encargado de todo el tabernÔculo y de todo lo que hay en él, del santuario y sus utensilios.
17 Y habló YHVH a MoisĆ©s y a Aarón, diciendo: 18 No permitĆ”is que la tribu de las familias de los coatitas sea exterminada de entre los levitas. 19 Esto habĆ©is de hacer con ellos para que vivan y no mueran cuando se acerquen a los objetos santĆsimos: Aarón y sus hijos entrarĆ”n y asignarĆ”n a cada uno su transporte, 20 pero no entrarĆ”n, ni por un momento, para mirar los objetos sagrados, para que no mueran.
21 Y habló YHVH a Moisés, diciendo: 22 Haz también el censo de los hijos de Gersón por sus casas de familias paternas. 23 Los alistarÔs de treinta años en adelante, hasta cincuenta, todos ellos entrarÔn para el servicio de la tienda de reunión. 24 Este serÔ el trabajo de las familias de Gersón, respecto al servicio y al transporte:
25 TransportarÔn las cortinas del tabernÔculo y la tienda de reunión, su cubierta y la cubierta de tejón que estÔ encima de él, y la cortina de la entrada a la tienda de reunión, 26 y las cortinas del atrio alrededor del tabernÔculo y del altar, sus cuerdas, todos los utensilios de su servicio y todo lo que se debe hacer con ellos. Asà servirÔn.
27 Según palabra de Aarón y de sus hijos se harÔ el servicio de los hijos del gersonita, en todos sus cargos y en todo su servicio, y les asignarÔs la custodia de toda su carga. 28 Tal es el servicio de los hijos del gersonita en la tienda de reunión. Sus deberes estarÔn en mano de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
29 ContarÔs también a los hijos de Merari, por sus casas de familias paternas. 30 Los alistarÔs desde los treinta hasta los cincuenta años de edad, todos ellos entrarÔn en la milicia para el servicio de la tienda de reunión. 31 Los cometidos de su carga en todo su servicio en la tienda de reunión serÔn: Los tablones del tabernÔculo, sus travesaños, sus columnas y sus basas, 32 las columnas del atrio que lo rodea, sus basas, sus estacas y sus cuerdas, todos sus utensilios y todo su servicio. Y asignaréis por nombre todos los utensilios que estÔn siendo transportados. 33 Tal es el servicio de las familias meraritas en todo su trabajo en la tienda de reunión, por mano de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
34 AsĆ, pues, MoisĆ©s, Aarón y los jefes de la asamblea, pasaron lista a los hijos de Coat por sus casas de familias paternas, 35 de treinta aƱos en adelante, hasta cincuenta aƱos, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión. 36 Y los contados por sus familias fueron dos mil setecientos cincuenta.
37 Estos fueron los contados de las familias de Coat, todos los que sirven en la tienda de reunión, a los cuales censó Moisés con Aarón conforme al dicho de YHVH, por medio de Moisés. 38 Y los contados de los hijos de Gersón, por sus casas de familias paternas, 39 de treinta años en adelante, hasta cincuenta, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión, 40 resultó por sus casas de familias paternas: dos mil seiscientos treinta. 41 Estos fueron los contados de las familias de los hijos de Gersón, todo el que sirve en la tienda de reunión, los cuales Moisés y Aarón contaron conforme al dicho de YHVH. 42 Y los contados de las familias de los hijos de Merari, por sus casas de familias paternas, 43 desde la edad de treinta años en adelante hasta los cincuenta, todo el que entraba en la milicia para servir en la tienda de reunión, 44 los contados por sus familias, fueron tres mil doscientos.
45 Tales fueron los contados de las familias de los hijos de Merari, que contaron Moisés y Aarón, conforme al dicho de YHVH por medio de Moisés. 46 Todos los levitas enumerados a los que Moisés y Aarón y los jefes de Israel pasaron lista por
sus casas de familias paternas, 47 de treinta años en adelante hasta los cincuenta, todo el que entraba para hacer la obra del servicio y la obra de llevar cargas, en lo relativo a la tienda de reunión, 48 fueron ocho mil quinientos ochenta empadronados.
49 AsĆ, conforme al dicho de YHVH, fueron alistados por mano de MoisĆ©s, cada uno segĆŗn su obra y segĆŗn su cargo. El alistamiento se hizo tal como YHVH habĆa ordenado a MoisĆ©s.
āŗ4.3 la milicia… Esto es, la milicia sagrada. Los levitas no podĆan formar parte del ejĆ©rcito de Israel, pero eran tratados como soldados en el servicio del tabernĆ”culo.
āŗ4.7 azul, y… TM aƱade pondrĆ”n. Se sigue LXX ā§194; el pan perpetuo… Lit. el pan de siempre. Esto es, la ofrenda permanente representada por los panes de la mesa, que anticipa en tipo la Cena consagrada al SeƱor.
āŗ4.8 carmesĆ… TM: escarlata. Se sigue LXX.
āŗ4.9 se da… TM aƱade a ella. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.19 Se inserta bjetos para suplir elipsis del original; cada uno… TM aƱade hombre… su servicio. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.23 entrarĆ”n… TM aƱade en la milicia. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.26 TM registra distintas aƱadiduras. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.27 se harĆ”… TM aƱade todo. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.28 el servicio de… TM aƱade familias. Se sigue LXX ā§194.
āŗ4.30 milicia… TM aƱade para servir. Se sigue LXX ā§194.
NĆŗmeros 5 – 6
De la impureza
1 Habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 2 Ordena a los hijos de Israel que despidan del campamento a todo leproso, a todo afectado de gonorrea, y a cualquier contaminado por cuerpo muerto, 3 sea varón o mujer, los expulsarĆ©is fuera del campamento para que no se contamine el campamento en medio del cual Yo habito. 4 Y los hijos de Israel hicieron asĆ. Los expulsaron fuera del campamento tal como YHVH habĆa hablado a MoisĆ©s. AsĆ hicieron los hijos de Israel.
De la restitución
5 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 6 Habla a los hijos de Israel: Cualquier hombre o mujer que cometa cualquier pecado en perjuicio del prójimo, ciertamente prevarica. Tal persona serÔ culpable. 7 ConfesarÔ, pues, el pecado cometido, y restituirÔ el objeto del delito en su pleno valor, añadiendo a ello un quinto, y lo entregarÔ al perjudicado. 8 Y si la persona no tiene pariente a quien le sea restituido el daño, el objeto del delito serÔ para YHVH, para el sacerdote, ademÔs del carnero de las expiaciones, con el cual harÔ expiación por el culpable. 9 Toda ofrenda alzada de todas las cosas santificadas que los hijos de Israel presenten al sacerdote, serÔ suya, 10 y lo santificado por cualquiera serÔ suyo, asimismo lo que cualquiera dé al sacerdote, serÔ suyo.
De los celos
11 Y habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 12 Habla a los hijos de Israel, y diles: Respecto a cualquier hombre: Si su mujer se descarrĆa y mira a un lado despreciĆ”ndolo, 13 y alguien yace con ella con emisión de semen, y escapa a ojos de su marido y ella lo esconde (y queda mancillada sin haber testigos contra ella y sin ser descubierta), 14 y cae sobre Ć©l un espĆritu de celo, y recela de su mujer que estĆ” mancillada, o cae sobre Ć©l un espĆritu de celo y recela de su mujer, pero ella no estĆ” mancillada, 15 aquel hombre llevarĆ” su mujer ante el sacerdote y ofrecerĆ” una ofrenda por ella: una dĆ©cima de un efa de harina de cebada, pero no derramarĆ” sobre ella aceite ni pondrĆ” sobre ella incienso, porque es ofrenda de celo, ofrenda del recuerdo que rememora el pecado. 16 Entonces el sacerdote harĆ” que se acerque y se mantenga de pie delante de YHVH. 17 Luego el sacerdote tomarĆ” agua consagrada en una vasija de barro, y el sacerdote tomarĆ” del polvo que hay en el suelo del tabernĆ”culo y lo echarĆ” en el agua. 18 El sacerdote harĆ”, pues, que la mujer se mantenga de pie delante de YHVH, soltarĆ” el cabello de la mujer y pondrĆ” en sus palmas la ofrenda vegetal de recordación, que es la ofrenda vegetal de celos, y en mano del sacerdote estarĆ”n las aguas amargas que traen maldición. 19 Y el sacerdote la conjurarĆ” y dirĆ” a la mujer: Si no ha yacido contigo varón y no te has descarriado de tu marido para ser mancillada, sĆ© inocente de estas aguas amargas que acarrean maldición.
20 Pero si te has descarriado de tu marido y has sido mancillada, y alguno ha tenido su copulación contigo, aparte de tu marido, 21 (el sacerdote conjurarÔ a la mujer con juramento de maldición) el sacerdote dirÔ a la mujer: ”YHVH te entregue a execración y a maldición en medio de tu pueblo! ”Haga YHVH que tu muslo caiga y tu vientre sea inflamado! 22 ”Entre esta agua que maldice en tus entrañas e inflame tu vientre y decaiga tu muslo! Y la mujer dirÔ: ”Amén, amén! 23 Entonces el sacerdote escribirÔ estas maldiciones en un rollo, las borrarÔ con las aguas amargas, 24 y darÔ a beber a la mujer las aguas amargas portadoras de maldición, y las aguas de maldición penetrarÔn en ella haciéndose amargas. 25 Después el sacerdote tomarÔ de mano de la mujer la ofrenda de los celos, y mecerÔ la ofrenda en presencia de YHVH, y la aproximarÔ ante el altar.
26 Y el sacerdote tomarĆ” una pizca de la ofrenda, en memoria de ella, la dejarĆ” consumir sobre el altar, tras lo cual darĆ” a beber las aguas a la mujer.
27 Y ocurrirĆ” que si ella estaba mancillada y habĆa sido infiel a su marido, las aguas de maldición penetrarĆ”n en ella haciĆ©ndose amargas, y su vientre serĆ” inflamado y se caerĆ” su muslo, y la mujer serĆ” maldición entre su pueblo.
28 Pero si la mujer no fue mancillada y es pura, quedarĆ” ilesa y tendrĆ” descendencia. 29 Tal es la ley de los celos, tocante a una mujer que se ha descarriado de su marido y haya sido mancillada, 30 o cuando sobre un hombre sobrevenga espĆritu de celos, y recele de su mujer: HarĆ” que la mujer estĆ© de pie en presencia de YHVH, y el sacerdote le aplicarĆ” toda esta ley. 31 Y aquel varón serĆ” inocente de iniquidad, pero la mujer cargarĆ” con su iniquidad.
āŗ5.2 gonorrea… Heb. zab. Gr. gonorrue. La gonorrea es una infección de transmisión sexual. Algunas versiones traducen flujo de semen.
āŗ5.3 sea… TM aƱade expulsarĆ©is. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.5-8 cualquier pecado… āLv 6.1-7.
āŗ5.6 prevarica… TM aƱade contra YHVH. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.12-15 Se sigue LXX.
āŗ5.14 cae sobre el… Esto es, sobre el marido.
āŗ5.16 que se acerque… Esto es, a la mujer.
āŗ5.18 soltarĆ” el cabello… Esto es, sĆmbolo de vergüenza āLv 10.6; sus palmas… TM: palmas de ella. Se sigue LXX ā§194.
āŗ5.19 la conjurarĆ”… Es decir, harĆ” que jure.
āŗ5.27 Y… TM aƱade la harĆ” beber el agua. Se sigue LXX ā§194.
NĆŗmeros 6
Nazareos
1 Habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 2 Habla a los hijos de Israel, y les dirĆ”s: Cuando algĆŗn hombre o mujer haga voto especial de nazareo para dedicarse a YHVH, 3 estarĆ” purificado lejos del vino y del licor. No beberĆ” vinagres de vino ni de licor, no beberĆ” ningĆŗn licor de uvas ni comerĆ” uvas frescas o secas. 4 No comerĆ” nada de cuanto proviene de la cepa vinĆcola, desde las semillas hasta los pĆ”mpanos, en todos los dĆas de su nazareato. 5 No pasarĆ” navaja sobre su cabeza durante los dĆas del voto de su nazareato. Hasta que sean cumplidos los dĆas por los que se consagró a YHVH serĆ” santo, dejando crecer libremente el cabello de su cabeza. 6 No estarĆ” junto a cuerpo muerto durante los dĆas de su consagración a YHVH. 7 No se contaminarĆ” por su padre o su madre, ni por su hermano o hermana cuando mueran, porque la consagración a su Elohim estĆ” sobre su cabeza. 8 Todos los dĆas de su nazareato serĆ” santo a YHVH. 9 Y si alguien, repentinamente, muere junto a Ć©l, de modo que la cabeza de su nazareato es contaminada, su cabeza se rasurarĆ” el dĆa en que sea purificado. El dĆa sĆ©ptimo serĆ” rasurado. 10 Al octavo dĆa llevarĆ” dos tórtolas o dos palominos al sacerdote, a la entrada de la tienda de reunión, 11 y el sacerdote presentarĆ” uno en ofrenda por el pecado y el otro en holocausto. Y harĆ” expiación a favor de Ć©l por lo que pecó en relación con el cuerpo muerto, y volverĆ” a consagrar su cabeza el dĆa 12 en que sea santificado a YHVH, los dĆas de su voto, llevando un cordero aƱal como ofrenda por la culpa, y los primeros dĆas se anularĆ”n, por cuanto contaminó su nazareato.
13 Esta es la ley para el nazareo: El dĆa en que se cumpla el tiempo de su nazareato, serĆ” llevado a la entrada de la tienda de reunión, 14 y aproximarĆ” su vĆctima ante YHVH: un cordero sin defecto de un aƱo en holocausto, una cordera sin defecto de un aƱo para la ofrenda por el pecado, y un carnero sin defecto para las ofrendas de paz. 15 TambiĆ©n un canastillo de panes sin levadura, tortas de flor de harina amasadas con aceite, y galletas sin levadura untadas con aceite, con su ofrenda vegetal y sus libaciones. 16 Y el sacerdote lo harĆ” acercar en presencia de YHVH, y realizarĆ” su sacrificio por el pecado y su holocausto. 17 OfrecerĆ” el carnero en sacrificio por ofrendas de paz a YHVH con el canastillo de los panes sin levadura, y el sacerdote ofrecerĆ” su ofrenda vegetal y sus libaciones. 18 Y el nazareo raparĆ” su cabeza de nazareo a la entrada de la tienda de reunión, y tirarĆ” los cabellos al fuego debajo del sacrificio de las ofrendas de paz. 19 DespuĆ©s tomarĆ” el sacerdote la espaldilla cocida del carnero, y del canastillo una torta sin levadura y una galleta sin levadura, y las pondrĆ” en las palmas del nazareo, despuĆ©s que se haya rapado el cabello de su nazareato. 20 Luego el sacerdote los mecerĆ” como ofrenda mecida en presencia de YHVH. Es cosa santa para el sacerdote, ademĆ”s del pecho mecido y la espaldilla de la ofrenda alzada; despuĆ©s el nazareo podrĆ” beber vino.
21 Tal es la ley del nazareo que hace voto de ofrenda suya a YHVH con motivo de su nazareato, ademÔs de aquello que le permita su mano, según el voto que haya echo conforme a la ley de su nazareato.
La bendición sacerdotal
22 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 23 Habla a Aarón y a sus hijos, diciendo: Asà bendeciréis a los hijos de Israel. Diles: 24 YHVH te bendiga y te guarde, 25 YHVH haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia. 26 YHVH alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. 27 Asà pondrÔn mi Nombre sobre los hijos de Israel, y Yo los bendeciré.
āŗ6.7 su cabeza… Esto es, su cabellera, sĆmbolo y seƱal de su separación para Dios āJue 16.16-17.
āŗ6.9 Se sigue LXX.
āŗ6.17 ofrecerĆ”… Esto es, el nazareo.
āŗ6.18 y… TM aƱade tomando… de su cabeza de nazareo. Se sigue LXX ā§194.
āŗ6.21 haya hecho… TM aƱade asĆ harĆ”. Se sigue LXX ā§194; Nazareato… āHch 21.23- 24.
āŗ6.24-26 YHVH… YHVH… YHVH… ā§170 (n.° 3).
JuecesĀ 3
El pacto quebrantado (continuación)
2 para que las generaciones de los hijos de Israel conocieran la guerra y la enseƱaran a los que antes no la habĆan experimentado.
Desobediencia y consecuencias
1 Estas son, pues, las naciones que YHVH dejó para probar con ellas a los israelitas que no habĆan conocido todas las guerras de CanaĆ”n: 3 Los cinco sĆ”trapas filisteos, todos los cananeos, los sidonios, y los heveos, los cuales habitaban en la serranĆa del LĆbano, desde el monte Baal-Hermón hasta el paso de Hamat. 4 Quedaron, pues, para probar a Israel, a fin de saber si obedecerĆan los mandamientos que YHVH habĆa ordenado a sus padres por medio de MoisĆ©s.
5 AsĆ, los hijos de Israel habitaron en medio del cananeo, el heteo, el amorreo, el ferezeo, el heveo y el jebuseo, 6 y tomaron sus hijas por mujeres, y entregaron sus propias hijas a los hijos de ellos, y sirvieron a sus dioses.
7 Y los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de YHVH, olvidando a YHVH su DIOS y sirviendo a los Baales y a las Aseras. 8 Y la ira de YHVH fue encendida contra Israel y los entregó en mano de CusÔn-Risataim, rey de Aram-Naharayim, y los hijos de Israel sirvieron a CusÔn-Risataim ocho años.
Otoniel
9 Y los hijos de Israel clamaron a YHVH, y YHVH levantó un libertador para los hijos
de Israel: a Otoniel ben Cenez, hermano menor de Caleb. Y los libertó. 10 Y el
EspĆritu de YHVH estuvo sobre Ć©l, y gobernó a Israel. Y salió a la guerra, y YHVH entregó en su mano a CusĆ”n-Risataim, rey de Aram, y su mano fue fortalecida contra CusĆ”n-Risataim. 11 Y reposó la tierra cuarenta aƱos, y murió Otoniel ben Cenez.]
Aod y Samgar
12 Pero los hijos de Israel volvieron a hacer lo malo ante los ojos de YHVH, y YHVH fortaleció a Eglón, rey de Moab, contra Israel, por cuanto habĆan hecho lo malo ante los ojos de YHVH. 13 Y reunió consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y fue encaminado para atacar a Israel, y conquistaron la ciudad de las Palmeras. 14 Y los hijos de Israel sirvieron a Eglón, rey de Moab, durante dieciocho aƱos. 15 Pero cuando los hijos de Israel clamaron a YHVH, YHVH les levantó un libertador: Aod ben Gera, benjamita, hombre zurdo, por medio del cual los hijos de Israel enviaron un presente a Eglón, rey de Moab. 16 Y Aod se habĆa hecho un puƱal de doble filo, de un codo de largo, y lo habĆa ceƱido debajo de sus vestidos sobre el muslo derecho. 17 Encaminado, pues, llevó el presente a Eglón, rey de Moab, y Eglón era un hombre muy grueso.
18 Y aconteció que, cuando hubo terminado de ofrecer el presente, despidió a la gente que lo habĆa llevado. 19 Pero Ć©l se volvió desde Pesilim en Gilgal, y dijo: Oh rey, tengo un asunto secreto para ti. Y Ć©l respondió: Ā”Guarda silencio! Y todos los que estaban delante de Ć©l salieron. 20 Entonces Aod fue a Ć©l cuando estaba sentado solo en su sala de verano. Y Aod dijo: Tengo palabra de DIOS para ti. Y Ć©l se levantó del trono. 21 Entonces Aod alargó su mano izquierda y tomando el puƱal de su muslo derecho, se lo hundió en el vientre. 22 Y la empuƱadura entró tras la hoja, y la grasa se cerró tras ella, y no pudo arrancarse el puƱal de su vientre. Y salió Aod al porche 23 y habiendo cerrado detrĆ”s de sĆ las puertas de la sala, eludió a los encargados.
24 Cuando Ć©l salĆa, llegaron los siervos, pero al ver las puertas de la sala cerradas, dijeron: Sin duda Ć©l estĆ” cubriendo sus pies en la cĆ”mara de verano. 25 Y esperaron impacientemente, hasta quedar desconcertados, y como Ć©l no abrĆa las puertas de la sala, tomaron la llave y abrieron, y Ā”he aquĆ su seƱor caĆdo en tierra, muerto! 26 Pero Aod fue puesto a salvo mientras ellos se alborotaban, y habiendo pasado mĆ”s allĆ” de Pesilim, fue puesto a salvo en Seirat.
27 Y aconteció que a su llegada, resonó el shofar en la serranĆa de EfraĆn, y los hijos de Israel bajaron con Ć©l de la serranĆa, e iba Ć©l al frente de ellos. 28 Y les dijo:
”Seguidme, que YHVH ha entregado a vuestros enemigos, los moabitas, en vuestra mano! Y bajaron en pos de él, y tomaron los vados del JordÔn hacia Moab, y no dejaron pasar a ninguno.
29 Y en aquel tiempo mataron como diez mil hombres de los moabitas, todos robustos y todos hombres esforzados. Nadie fue preservado vivo. 30 AsĆ fue humillado Moab en aquel dĆa bajo la mano de Israel. Y la tierra reposó ochenta aƱos. 31 DespuĆ©s de este fue Samgar ben Anat, el cual hirió a seiscientos hombres de los filisteos con una aguijada para los bueyes; y Ć©l tambiĆ©n libró a Israel.
āŗ3.3 cinco… ā§170 (n.° 5); sĆ”trapas… TM prĆncipes. Se refiere a los dirigentes filisteos.
āŗ3.7 Aseras… Heb. asheroth, plural de āasherah. Los Ćdolos de Asera podĆan ser Ć”rboles plantados o troncos levantados junto a altares paganos a modo de estacas votivas para ser adorados como objeto de culto. El registro de la LXX es significativo: alsesin = arboledas.
āŗ3.8 CusĆ”n-Risataim… Esto es: CusĆ”n de la doble maldad; Aram Naharayim… Esto es, Siria mesopotĆ”mica.
āŗ3.9 libertador… Heb. yasha = ayudar, asistir y tambiĆ©n salvar.
āŗ3.11 Composición JosuĆ© – Jueces [1.1 – 3.11] ā§187.
āŗ3.13 reunió consigo… Esto es, Eglón.
āŗ3.15 un presente… Heb. minjah. Prob. una ofrenda de alimentos vegetales.
āŗ3.19 Pesilim… Prob. cantera para fabricar Ćdolos.
āŗ3.22-23 Se sigue LXX.
āŗ3.24 estĆ” cubriendo sus pies… HebraĆsmo. Se refiere a la acción de defecar.
2 ReyesĀ 20
SeƱal prodigiosa
1 En aquellos dĆas EzequĆas cayó enfermo de muerte, y fue a Ć©l IsaĆas ben Amoz, el profeta, y le dijo: AsĆ dice YHVH: Ordena tu casa, porque morirĆ”s y no vivirĆ”s. 2 Y Ć©l volvió su rostro hacia el muro y oró a YHVH, diciendo: 3 Te ruego, oh YHVH, te ruego que recuerdes que he andado delante de ti con verdad y con un corazón Ćntegro, y que he hecho lo bueno ante tus ojos. Y EzequĆas lloraba amargamente. 4 Y cuando IsaĆas estaba en medio del patio, llegó a Ć©l palabra de YHVH, diciendo: 5 Vuelve y di a EzequĆas, prĆncipe de mi pueblo: AsĆ dice YHVH, el Elohim de David tu padre: He escuchado tu oración y he visto tus lĆ”grimas; he aquĆ Yo te sano; al tercer dĆa subirĆ”s a la Casa de YHVH. 6 Y aƱado a tus dĆas quince aƱos, y te librarĆ© a ti y a esta ciudad de mano del rey de Asiria, y ampararĆ© a esta ciudad por mĆ y por mi esclavo David. [[7]]
8 Y EzequĆas dijo a IsaĆas: ĀæQuĆ© seƱal tendrĆ© de que YHVH me sanarĆ”, y al tercer dĆa subirĆ© a la Casa de YHVH? 9 Y dijo IsaĆas: Esto te serĆ” seƱal de parte de YHVH, que YHVH harĆ” lo que ha dicho: ĀæAvanzarĆ” la sombra diez gradas, o retrocederĆ” diez gradas? 10 Y EzequĆas respondió: FĆ”cil cosa es que la sombra avance diez gradas, pero no que la sombra vuelva atrĆ”s diez gradas. 11 Y el profeta IsaĆas invocó a YHVH, y retrocedió la sombra por las gradas, diez gradas hacia atrĆ”s.
Imprudencia
12 En aquel tiempo Merodac-BaladĆ”n, hijo de BaladĆ”n, rey de Babilonia, envió una carta y un presente a EzequĆas, porque habĆa escuchado que EzequĆas estaba enfermo. 13 Y EzequĆas los recibió y les mostró toda la casa de su tesorerĆa, la plata y el oro, las especias y el mejor aceite, su armerĆa, y todo lo que se encontraba en sus tesoros. No hubo nada que EzequĆas no les mostrara, ni en su casa ni en todos sus dominios. 14 Entonces el profeta IsaĆas fue al rey EzequĆas, y le dijo: ĀæQuĆ© dijeron esos hombres y de dónde han venido? Y EzequĆas le dijo: Han venido de una tierra lejana, de Babilonia. 15 Y preguntó: ĀæQuĆ© han visto en tu casa? Y respondió: Han visto todo lo que hay en mi casa, no hay nada entre mis tesoros que no les haya mostrado. 16 E IsaĆas dijo a EzequĆas: Oye palabra de YHVH: 17 He aquĆ que vienen dĆas en que todo lo que estĆ” en tu casa, y todo lo que tus padres han atesorado hasta hoy, serĆ” llevado a Babilonia: Nada quedarĆ”, dice YHVH. 18 Y de tus hijos que saldrĆ”n de ti, que habrĆ”s engendrado, serĆ”n tomados para que sean eunucos en el palacio del rey de Babilonia. 19 Y EzequĆas dijo a IsaĆas: Buena es la palabra de YHVH que has dicho. Haya paz y justicia en mis dĆas.
20 El resto de los hechos de EzequĆas, todo su valor, y cómo hizo el estanque y el acueducto para llevar las aguas a la ciudad, Āæno estĆ”n escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de JudĆ”?
21 Y durmió EzequĆas con sus padres, y reinó en su lugar ManasĆ©s su hijo.
āŗ20.2 hacia el muro… ā1R 8.22-53.
āŗ20.4 medio del patio… TM registra ciudad interior. Se sigue LXX.
āŗ20.7 TM aƱade v. ā§215.
āŗ20.9 lo… Lit. la cosa; gradas… Esto es, el uso de escalones como reloj solar (en Egipto se ha descubierto un reloj similar a la graderĆa de Acaz āv. 11, cuyos escalones, con una proyección apropiada de sombra, sirven para medir las horas del dĆa).
āŗ20.11 gradas… TM aƱade que habĆa descendido en la graderĆa de Acaz. Se sigue LXX ā§194.
āŗ20.13 los recibió… Esto es, a los embajadores del rey de Babilonia.
āŗ20.15 respondió… TM aƱade EzequĆas. Se sigue LXX ā§194.
āŗ20.19 TM registra distintas adiciones. Se sigue LXX ā§194.
Hechos 21:1-36
Hacia JerusalƩn
1 AsĆ, despuĆ©s de separarnos de ellos, zarpamos con rumbo directo a Cos, y al dĆa siguiente a Rodas, y de allĆ a PĆ”tara. 2 Y encontrando un barco que cruzaba hacia Fenicia, nos embarcamos y zarpamos. 3 Al avistar Chipre, dejĆ”ndola a babor, navegĆ”bamos hacia Siria, y arribamos a Tiro, porque el barco tenĆa que descargar allĆ la mercancĆa.
4 Habiendo hallado a los discĆpulos, permanecimos allĆ siete dĆas, y ellos decĆan a Pablo por el EspĆritu que no subiera a JerusalĆ©n. 5 Pero cumplidos aquellos dĆas, salimos hasta las afueras de la ciudad acompaƱados por todos, con sus mujeres e hijos, y despuĆ©s de orar puestos de rodillas en la playa, 6 nos despedimos unos de otros y subimos al barco, y ellos regresaron a sus hogares.
7 Nosotros, completando la navegación desde Tiro, arribamos a Tolemaida; y luego de saludar a los hermanos, nos quedamos con ellos un dĆa. 8 Al dĆa siguiente salimos y fuimos a Cesarea, y entrando en la casa de Felipe, el evangelista, el cual era uno de los siete, posamos con Ć©l. 9 Y este tenĆa cuatro hijas doncellas que profetizaban.
10 Al permanecer nosotros allĆ varios dĆas, bajó de Judea un profeta de nombre Agabo, 11 el cual vino a nosotros, y tomando el cinto de Pablo, se ató los pies y las manos, y dijo: Esto dice el EspĆritu Santo: AsĆ atarĆ”n los judĆos en JerusalĆ©n al varón de quien es este cinto, y lo entregarĆ”n en manos de los gentiles. 12 Cuando oĆmos estas cosas, tanto nosotros como los de aquel lugar, le rogamos que no subiera a JerusalĆ©n. 13 Pero Pablo respondió: ĀæQuĆ© hacĆ©is llorando y quebrantĆ”ndome el corazón? Porque no solo estoy dispuesto a ser atado, sino tambiĆ©n a morir en JerusalĆ©n por el nombre del SeƱor JESĆS. 14 Y como no se dejaba persuadir, desistimos, diciendo: Ā”HĆ”gase la voluntad del SeƱor!
15 Y despuĆ©s de estos dĆas, hechos los preparativos, subĆamos a JerusalĆ©n, 16 y vinieron con nosotros algunos de los discĆpulos de Cesarea, llevando a un tal Mnasón, chipriota, antiguo discĆpulo, con quien fuĆ©ramos hospedados.
Pablo con Jacobo
17 Cuando llegamos a JerusalĆ©n, los hermanos nos recibieron favorablemente con gozo. 18 Y al dĆa siguiente, Pablo entró con nosotros a ver a Jacobo, y se reunieron todos los ancianos. 19 Y despuĆ©s de saludarlos, les fue refiriendo, una por una, las cosas que DIOS hizo entre los gentiles por medio de su servicio. 20 Pero ellos, al oĆrlo, glorificaron a DIOS y le dijeron: Ves, hermano, cuĆ”ntos millares hay entre los judĆos de los que han creĆdo, pero todos son celosos de la ley; 21 y les han informado acerca de ti, que enseƱas a todos los judĆos que estĆ”n entre los gentiles a apostatar de MoisĆ©s, diciĆ©ndoles no circuncidar a los hijos, ni practicar las costumbres. 22 ĀæQuĆ© hacer, pues? Sin duda oirĆ”n que has venido. 23 Haz, pues, esto que te decimos: Tenemos cuatro varones ligados con voto. 24 Tómalos contigo, purifĆcate con ellos, y paga sus gastos para que se rasuren la cabeza, asĆ todos entenderĆ”n que no hay nada de lo que se les informó acerca de ti, sino que tĆŗ mismo tambiĆ©n sigues guardando la ley. 25 Pero en cuanto a los gentiles que han creĆdo, les hemos escrito que, segĆŗn lo acordado, se abstengan de lo sacrificado a los Ćdolos, de sangre, de lo estrangulado y de fornicación.
26 Entonces Pablo, tomando consigo a los varones, al dĆa siguiente se purificó con ellos y entraba en el templo para informar del cumplimiento de los dĆas de la purificación, hasta que fue ofrecida la ofrenda por cada uno de ellos.
Arrestado en el templo
27 Pero cuando iban a cumplirse los siete dĆas, los judĆos de Asia, viĆ©ndolo en el templo, alborotaron a todo el pueblo; y echĆ”ndole mano, 28 gritaron: Ā”Varones israelitas, ayudad! Ā”Este es el hombre que por todas partes enseƱa a todos contra el pueblo, la ley y este lugar! AdemĆ”s, introdujo unos griegos en el templo y ha profanado este santo lugar. 29 (Porque habĆan visto con Ć©l en la ciudad a Trófimo, el efesio, y pensaban que Pablo lo habĆa introducido en el templo).
30 Entonces toda la ciudad se alborotó, y se agolpó el pueblo; y prendiendo a Pablo, lo arrastraron fuera del templo, y cerraron inmediatamente las puertas. 31 Pero mientras procuraban matarlo, llegó un informe al tribuno de la cohorte: Ā”Toda JerusalĆ©n estĆ” alborotada! 32 Este, tomando inmediatamente soldados y enturiones, bajó corriendo hacia ellos. Y cuando ellos vieron al tribuno y a los soldados, dejaron de golpear a Pablo. 33 Llegando el tribuno, lo arrestó y mandó atarlo con dos cadenas, y preguntó quiĆ©n era y quĆ© habĆa hecho. 34 Pero entre la multitud, unos gritaban una cosa y otros otra, y no pudiendo saber la razón del alboroto, ordenó que lo llevaran a la fortaleza, 35 pero cuando llegó a las gradas, tuvo que ser llevado en vilo por los soldados a causa de la violencia de la turba, 36 porque la uchedumbreĀ del pueblo lo seguĆa, gritando: Ā”QuĆtalo!
āŗ21.2 cruzaba… Lit. cruza; embarcamos y zarpamos… Lit. embarcĆ”ndonos, zarpamos.
āŗ21.6 a sus hogares… Es decir, a su diario vivir.
āŗ21.8 salimos… TR inserta Pablo y los que con Ć©l estĆ”bamos; Felipe… ā6.5; 8.5.
āŗ21.9 profetizaban… Lit. profetizan.
āŗ21.10 Agabo… ā11.28.
āŗ21.14 persuadir… Lit. no ser persuadido Ć©l.
āŗ21.16 hospedados… Nótese: el subjuntivo fuĆ©ramos hospedados expresa la idea retrospectiva del autor.
āŗ21.18 entró… Lit. entraba;
āŗ21.19 servicio… Gr. diakonĆa ā§314.
āŗ21.21 apostatar… Lit. apostasĆa.
āŗ21.22 pues?… TR expande: la multitud se reunirĆ” de cierto.
āŗ21.24 rasuren… āNm 6.13-20.
āŗ21.25 estrangulado… Esto es, animal muerto sin haber derramado su sangre;
fornicación… ā15.29.
āŗ21.29 Trófimo… ā20.4.
āŗ21.31 llegó un informe… Lit. subió un informe. Es prob. que el tribuno de la cohorte estuviera en una de las torres de La Fortaleza Antonia construida por Herodes el Grande.
āŗ21.32 golpear… Lit. golpeando.
āŗ21.33 habĆa hecho… Lit. ha estado haciendo.
āŗ21.36 Ā”QuĆtalo!… Es decir, Ā”MĆ”talo! āIs 53.8; Lc 23.18
1 TesalonicensesĀ 3
El viaje de Timoteo
1 Por lo cual, no soportando ya mĆ”s, decidimos quedarnos solos en Atenas, 2 y enviamos a Timoteo, nuestro hermano y colaborador de DIOS en el Evangelio de CRISTO, para fortaleceros y exhortaros respecto a vuestra fe, 3 para que nadie se turbe por estas tribulaciones, porque vosotros sabĆ©is que para esto estamos destinados. 4 Porque cuando aĆŗn estĆ”bamos con vosotros, os predecĆamos: āvamos a ser afligidosā , como en efecto llegó a acontecer, y sabĆ©is. 5 Por esto, yo tambiĆ©n, no soportando ya mĆ”s, enviĆ© a reconocer vuestra fe, no fuera que, de algĆŗn modo, os hubiera tentado el tentador, y que nuestro trabajo hubiera sido en vano.
6 Pero volviendo a nosotros ahora Timoteo, de regreso de vosotros, y trayĆ©ndonos buenas noticias de vuestra fe y amor, y que siempre tenĆ©is buena memoria de nosotros, anhelando vernos, como tambiĆ©n nosotros a vosotros, 7 por esto, hermanos, en medio de toda nuestra necesidad y aflicción, fuimos consolados por medio de vuestra fe, 8 porque ahora vivimos si vosotros estĆ”is firmes en el SeƱor. 9 Pues, ĀæquĆ© acción de gracias podemos dar en retorno a DIOS por vosotros, por todo el gozo con que nos regocijamos delante de nuestro DIOS a causa de vosotros, 10 noche y dĆa implorando intensamente que veamos vuestro rostro, y completemos lo que falta a vuestra fe? 11 Y el mismo DIOS y Padre nuestro, y JESĆS, SeƱor nuestro, dirija nuestro camino a vosotros.
12 Y el SeƱor os haga crecer y abundar en el amor unos a otros, y para con todos, asĆ como tambiĆ©n nosotros para vosotros, 13 para que afirme vuestros corazones, irreprensibles en santidad delante de nuestro DIOS y Padre, en la venida de nuestro SeƱor JESĆS con todos sus santos.
āŗ3.1 Atenas… āHch 17.15.
āŗ3.2 colaborador… Entre la variedad de lecturas, las principales interrogantes textuales son: ĀæLa lectura colaborador o servidor deben ser leĆdas? y Āædebe mantenerse u omitirse la lectura DIOS? A pesar de que en base a la evidencia externa, pudiera parecer que la lectura y servidor de DIOS deberĆa ser la adoptada, la lectura que mejor explica el origen de las otras variantes es y colaborador de DIOS. A fin de remover el carĆ”cter objetable que la audaz designación colaborador de DIOS parecĆa contener, algunos copistas omitieron las palabras de DIOS, o las transfirieron para calificar del evangelio, mientras otros sustituyeron una palabra por otra; respecto… Lit. a favor de.
āŗ3.3 destinados… O designados.
āŗ3.4 llegó a acontecer… Lit. aconteció.
āŗ3.5 reconocer… Es decir, probar el carĆ”cter genuino de la fe de los tesalonicenses; tentado… Lit. tentó; hubiera sido… Lit. fuera.
āŗ3.6 a nosotros… āHch 18.5.
āŗ3.10 completemos… Es decir, corrijamos.
āŗ3.11 JESĆS… El TR aƱade CRISTO despuĆ©s de JESĆS; dirija… Nótese la unidad de DIOS el Padre y el SeƱor JESĆS.
āŗ3.13 venida… Es decir, segunda venida; santos… El TR aƱade amĆ©n.

