Texto áureo: Números 31
Lecturas para adultos en la semana
Día 1 Números 31
Día 2 Jueces 6
Día 3 Jueces 7
Día 4 Mateo 12:22-37
Día 5 Marcos 8:27-9:1
Día 6 Hechos 24
I. Un líder siempre muestra gratitud.
Dios dijo a Moisés: «Haz venganza… en contra de los madianitas», pero en lugar de hacerlo él mismo, le delegó a Finees que lidereara al pueblo en la batalla. A simple vista es difícil entender por qué alguien tan fiel a Dios como Moisés hace esto. Sin embargo, hay una preciosa lección de vida aquí.
Años atrás, cuando Moisés fue descubierto como israelita en Egipto, huyó para salvar su vida y encontró refugio en Madián, de allí era su esposa y su amado suegro, pero ahora la escena mundial había cambiado. Los madianitas eran malvados e inmorales que deseaban seducir y poner tropiezo a Israel. Moisés no podía luchar directamente contra ellos porque de alguna manera sentía gratitud. El hombre no debe darse el lujo de olvidar un acto de bondad o un favor recibido (como le sucedió a Balaam con su mula o a Judas con Jesús).
Este mensaje es especialmente importante para la generación presente, cuando la ingratitud es tan común. Nunca debemos perder de vista la bondad que se hizo con nosotros, debemos ser esforzados para desarrollar nuestro sentido de gratitud.
II. Un líder se pone siempre en segundo plano.
Dios informó a Moisés que luego de cumplir con esta orden de luchar contra los madianitas moriría. Con esto a sabiendas, cualquiera podría haberse tomado su tiempo en comenzar la batalla, especialmente cuando Dios no le dio un tiempo específico para que cumpliera con esa orden. ¿Quién se atrevería a reprocharle que demorase la acción para prolongar su vida? Sin embargo, Moisés la hizo con prontitud y dejó de lado sus deseos personales. Esto distingue, como vimos en otra porción la característica distintiva del verdadero liderazgo: Tener la capacidad de pensar en el bien mayor de la iglesia en vez de limitarse a los egoístas intereses personales.
Esto desafía a cualquiera que está en una posición de liderazgo en el pueblo de Dios a examinar todas sus acciones y prioridades. ¿Estamos motivados por intereses egoístas? ¿Nos preocupamos ante todo por nosotros mismos? ¿El llamado de Dios ocupa el primer lugar? ¿Qué es más importante yo y mi agenda o el bienestar espiritual del pueblo que Dios ha puesto bajo nuestra influencia?
III. La intensión determina la acción
Cuando se le ordena al pueblo atacar a los madianitas, no se menciona a los moabitas, quienes eran sus socios en el crimen de maldecir a Israel para destruirlo. Si ambas naciones estuvieron involucradas en esto, ¿por qué Dios ordenó a Moisés atacar sólo a los madianitas? El asunto es que hay una diferencia en el actuar de ambos pueblos.
Los moabitas por su parte atacaron al pueblo de Israel por miedo a que este fuese una amenaza militar para ellos; sin embargo, la tierra de Madián no estaba ni siquiera en el trayecto de los viajes que realizó el pueblo de Israel, ellos se involucraron contra la nación de Dios solamente por odio, y éste sin razón alguna. Lo que el rey de Moab hizo, a pesar de ser errado, era entendible en alguna medida, pero la acción de los madianitas era simplemente malvada.
Bíblicamente podemos entender que la motivación es la base de todo, por eso Jesús aclara esto en su enseñanza. Por ejemplo, hay pocas cosas peores que matar a alguien por odio, pero si matas a alguien porque él iba a matar a otro, ¡se te atribuye el hecho de haber salvado una vida! Si alguien hace un bien porque le importa profundamente la otra persona, entonces es una buena persona. Pero si lo hace porque quiere el honor correspondiente por la acción, entonces se convierte en un daño para sí mismo mayor que el bien hecho. E inclusive, si a través de una acción se quiere controlar y manipular a la persona a la cual se le hace el “bien”, tal persona es malvada. ¡Así de duro es el asunto! La acción es exactamente la misma, pero la motivación hace toda la diferencia.
Bíblicamente es el camino al cielo y no el camino al infierno el que está pavimentado con buenas intenciones, ―siempre y cuando esa intención y esfuerzo sean responsablemente puras.
IV. Un líder reprende en privado
A pesar de Moisés estar visiblemente molesto con aquellos que estaban a cargo de la batalla, hizo algo de vital importancia en el liderazgo: «salió a encontrarse con ellos fuera del campamento». Él puso en práctica uno de los conceptos más importantes en el trato con la gente: ¡Reprende a las personas en privado!
De aquí pueden aprender no solo los líderes, sino también los padres, pues ellos representan un liderazgo familiar que es el más importante del mundo, porque lleva implícito la formación de los futuros líderes. Dios les confía la responsabilidad de criar a Sus hijos y Él ciertamente no quiere que Sus hijos sean públicamente ridiculizados. Es verdad que hay momentos en que los padres sienten frustración con ciertas acciones de sus hijos y el deseo de gritarles para que todos oigan es fuerte y les domina. Pero hay que entender que esta no es la forma adecuada de disciplinar o educar a un hijo.
Moisés en vez de estar enojado con sus comandantes no les reprochó públicamente, sino que prefirió salir del campamento para no avergonzarlos delante de sus tropas. Esto no sólo hizo que ellos escuchasen atentamente lo que estaba diciendo, sino que además les ayudó a desarrollar la autoestima que necesitarían para lograr cumplir con la misión de conquistar la tierra prometida.
Preguntas:
1.- ¿Por qué cree usted que Balaam es matado en esa batalla contra los madianitas?
2.- Si Dios prohíbe en la ley “matar”, ¿por qué cree usted que aquí da la orden de cometer este “pecado”?
3.- ¿Por qué considera usted que las ofrendas traídas por los jefes del ejército fueron tan bien recibidas por Moisés y Eleazar?
4.- ¿Qué encuentra de especial Hch 24 a la luz de lo visto en esta porción?
Números. 31
Derrota de los madianitas
1 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 2 Toma venganza completa de los hijos de Israel contra los madianitas. Después serás reunido a tu pueblo. 3 Entonces Moisés habló al pueblo, diciendo: Armad a algunos hombres de entre vosotros para la guerra, y vayan contra Madián para ejecutar la venganza de YHVH sobre Madián. 4 Enviaréis a la guerra mil de cada tribu, de todas las tribus de los hijos de Israel. 5 Así fueron dados de los millares de Israel: mil por cada tribu, doce mil en pie de guerra. 6 Y Moisés los envió a la guerra: mil por cada tribu, y con ellos a Finees, hijo del sacerdote Eleazar, con los objetos sagrados y con las trompetas para la alarma en su mano. 7 Y tal como YHVH había ordenado a Moisés, hicieron guerra contra Madián, y mataron a todos los varones. 8 Entre las víctimas, mataron también a los reyes de Madián: Evi, y Requem, y Zur, y Hur y Reba, cinco reyes de Madián. También mataron a espada a Balaam hijo de Beor. 9 Y tomaron cautivas a las mujeres de los madianitas,a sus pequeños, todo su ganado y todos sus rebaños. Y arrebataron su riqueza 10 e incendiaron todas sus ciudades en sus asentamientos y campamentos, 11 y tomaron todo el despojo y todo el botín, de hombres y animales. 12 Y llevaron a los cautivos, el botín y el despojo a Moisés, al sacerdote Eleazar y a los hijos de Israel, al campamento en las llanuras de Moab junto al Jordán, frente a Jericó.
13 Entonces Moisés, el sacerdote Eleazar y todos los jefes de la asamblea, salieron a recibirlos en las afueras del campamento. 14 Y Moisés estalló en indignación contra los oficiales del ejército, los jefes de miles y jefes de cientos que volvían de la guerra.
15 Y les dijo Moisés: ¿Por qué dejasteis vivas a todas las que tienen hoyo? 16 He aquí ellas son quienes, por consejo de Balaam, indujeron a los hijos de Israel a apostatar de YHVH en lo tocante a Peor, por lo que hubo plaga en la congregación de YHVH.
17 Ahora, pues, matad a todo varón entre los párvulos, y matad a toda mujer que haya conocido el acostarse con varón. 18 Pero dejad con vida entre las mujeres a todas las jóvenes que no hayan conocido lecho de varón. 19 En cuanto a vosotros, acampad fuera del campamento durante siete días. Quien haya matado, y cuantos hayan tocado un cadáver, seréis purificados en el tercero y el séptimo día, así vosotros como vuestros cautivos. 20 Purificad también todo vestido, todo objeto de piel, toda obra de pelo de cabra y todo utensilio de madera. 21 Y el sacerdote Eleazar dijo a los hombres del ejército que venían de la guerra: Este es el estatuto de la ley que YHVH ha ordenado a Moisés: 22 Solo el oro y la plata, el bronce, el hierro, el estaño y el plomo, 23 todo lo que pase por fuego, así será puro, pero habrá de ser purificado con las aguas de santificación. Y todo lo que no resista al fuego, lo haréis
pasar por el agua. 24 El día séptimo lavaréis vuestros vestidos y seréis purificados. Ya después podréis entrar en el campamento. Sobre el botín
25 También habló YHVH a Moisés, diciendo: 26 Tú, el sacerdote Eleazar, y los jefes de las casas paternas de la asamblea, haced el recuento del botín que se ha capturado, tanto de personas como de animales. 27 Dividirás por mitad el botín entre los combatientes que han ido a la guerra y toda la asamblea. 28 Y como tributo de los guerreros salidos a la batalla, apartarás para YHVH un alma de cada quinientas, así de hombres como del ganado vacuno, de asnos, y de ganado menor. 29 De la mitad de ellos tomarás y lo darás al sacerdote Eleazar como ofrenda alzada para YHVH. 30 Y de la mitad correspondiente a los hijos de Israel tomarás uno de cincuenta, así de
hombres como del ganado mayor, de los asnos, y del ganado menor, de todo animal, y los entregarás a los levitas encargados del servicio del tabernáculo de YHVH.
31 Y Moisés y el sacerdote Eleazar hicieron tal como YHVH había ordenado a Moisés. 32 Y fue el resto del botín capturado por la gente de guerra: seiscientas setenta y cinco mil ovejas, 33 setenta y dos mil reses vacunas, 34 y setenta y un mil asnos. 35 En cuanto a personas, de mujeres que no habían conocido ayuntamiento de varón, el total de almas fue de treinta y dos mil. 36 La mitad o porción de los que habían salido a la guerra, fue: trescientas treinta y siete mil quinientas ovejas, 37 y el tributo de ovejas para YHVH fue de seiscientas setenta y cinco. 38 Ganado vacuno: treinta y seis mil, y su tributo para YHVH, setenta y dos. 39 Asnos: treinta mil quinientos, y su
tributo para YHVH, sesenta y uno. 40 Personas: dieciséis mil, y su tributo para YHVH, treinta y dos almas. 41 Entonces Moisés entregó el tributo al sacerdote Eleazar como ofrenda alzada a YHVH, tal como YHVH había ordenado a Moisés. 42 En cuanto a la mitad correspondiente a los hijos de Israel, que Moisés había separado de la de los guerreros, 43 esa mitad de la asamblea fue: trescientas treinta y siete mil quinientas ovejas, 44 ganado vacuno: treinta y seis mil, 45 asnos: treinta mil quinientos, 46 y personas: dieciséis mil.
47 De la mitad que correspondía a los hijos de Israel, Moisés tomó uno de cada cincuenta, así de las personas como de los animales, y los entregó a los levitas que tenían la custodia del tabernáculo de YHVH, tal como YHVH había ordenado a Moisés.
48 Y se acercaron a Moisés los jefes de las unidades del ejército, comandantes de miles y comandantes de cientos, 49 y dijeron a Moisés: Tus siervos han contado los hombres de combate que están bajo nuestro mando, y ninguno ha faltado de nosotros. 50 Así, pues, presentamos una ofrenda ante YHVH, cada uno lo que ha ganado en objetos de oro: brazaletes, pulseras, anillos, pendientes y collares, para hacer expiación por nosotros delante de YHVH. 51 Y Moisés y el sacerdote Eleazar recibieron de ellos el oro, y toda clase de objetos labrados. 52 Y el total de oro de la ofrenda alzada que los jefes de miles y los jefes de cientos hicieron elevar ante YHVH,
fue de dieciséis mil setecientos cincuenta siclos, 53 que los hombres del ejército habían saqueado, cada uno para sí. 54 Y Moisés y el sacerdote Eleazar tomaron el oro de los jefes de miles y de los jefes de cientos, y lo llevaron a la tienda de reunión como memorial de los hijos de Israel delante de YHVH.
►31.6 Eleazar… TM añade para la guerra. Se sigue LXX →§194.
► 31.9 Y tomaron… arrebataron… TM añade los hijos de Israel… toda. Se sigue LXX →§194.
►31.10 en… TM añade todos. Se sigue LXX →§194.
►31.12 Eleazar… TM añade la asamblea de. Se sigue LXX →§194.
►31.15 las que tienen hoyo… Heb. nequebáh →§222.
►31.16 Peor… →Nm. 25.1-9.
►31.17 Se sigue LXX.
►31.19 matado… TM añade a una persona. Se sigue LXX →§194.
►31.23 por fuego… TM añade pasaréis por fuego. Se sigue LXX →§194.
►31.30 uno de… TM añade cada. Se sigue LXX →§194.
►31.32 Y fue… TM añade el despojo… mil. Se sigue LXX →§194.
►31.48 Y… TM añade que. Se sigue LXX →§194.
Jueces 6
Gedeón
1 Pero los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de YHVH, y los entregó YHVH en mano de Madián siete años. 2 Y la mano de Madián prevaleció sobre Israel; y a causa de Madián los hijos de Israel tuvieron que hacerse guaridas y cavernas en los montes y en las cumbres.
3 Y sucedía que cuando los de Israel terminaban de sembrar, los de Madián y Amalec subían con los hijos del oriente 4 y acampaban contra ellos, y destruían sus frutos hasta llegar a Gaza. Y no dejaban sustento alguno en la tierra de Israel, ni cordero, ni buey, ni asno. 5 Subían, ellos con su ganado, y sus tiendas se extendían innumerables, como multitud de langostas. Y entraban con sus camellos en la tierra de Israel y la devastaban.
6 Y empobreció Israel en gran manera a causa de Madián. Y los hijos de Israel clamaron a YHVH. [[7-10]] 11 Y el Ángel de YHVH vino y se sentó bajo la encina en Efrata, en tierra de Joás ben Abiezer. Y Gedeón su hijo apaleaba trigo en el lagar para esconderlo de los madianitas. 12 Y el Ángel de YHVH se le apareció y le dijo: ¡YHVH Sebaot es contigo! 13 Gedeón respondió: ¡Ay de mí, Señor mío! Si YHVH está con nosotros, ¿por qué nos han alcanzado estos males? ¿Dónde están todas sus maravillas que nos contaron nuestros padres, diciendo: YHVH nos hizo subir de Egipto? Pero, he aquí, nos desechó y entregó en mano de Madián.
14 Entonces YHVH se volvió hacia él y le dijo: Ve en esta tu fuerza, y librarás a Israel de mano de Madián. ¿No te envío Yo? 15 Y él le dijo: ¡Ay de mí, Señor mío! ¿Con qué libraré a Israel? He aquí mi clan es el más pobre de Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. 16 Y YHVH le dijo: Porque Yo estaré contigo derrotarás a Madián como a un solo hombre. 17 Y él le respondió: Si he hallado gracia ante tus ojos, te ruego: Dame señal de que Tú mismo eres quien habla conmigo. 18 No te muevas de aquí, te ruego, hasta que vuelva a ti y saque mi ofrenda, y la ponga ante tu presencia.
Y Él dijo: Yo me quedaré hasta que vuelvas.
19 Entonces Gedeón entró y preparó un cabrito y un efa de harina de panes sin levadura; luego puso la carne en una canasta y el caldo en una olla, y lo sacó y se lo ofreció bajo la encina. 20 Y el Ángel de DIOS le dijo: Toma la carne y el pan ázimo y ponlos sobre esta peña, y vierte el caldo sobre ellos. Y él lo hizo así.
21 Entonces el Ángel de YHVH extendió el cayado que tenía en su mano, y la punta tocó la carne y el pan ázimo, y de la peña subió un fuego que consumió la carne y el ázimo. Y el Ángel de YHVH desapareció de su vista. 22 Viendo Gedeón que era el Ángel de YHVH, dijo: ¡Ay, ay, Adonai YHVH! ¡He visto al Ángel de YHVH cara a cara! 23 Pero YHVH le dijo: ¡Paz a ti! No temas, ciertamente no morirás. 24 Y Gedeón construyó allí un altar a YHVH, y lo llamó YHVH-Shalom, el cual permanece hasta el día de hoy en Efrata de los abiezeritas. 25 Y aquella misma noche YHVH le dijo: Toma el novillo cebado de tu padre, y el segundo novillo sin defecto, y derriba con él el altar de Baal que tiene tu padre, y tala la Asera que está a su lado. 26 Y construye debidamente un altar a YHVH tu DIOS en la parte más alta de esta peña. Luego toma el segundo novillo y ofrécelo en holocausto con la madera de la Asera que habrás cortado. 27 Tomó, pues, Gedeón diez hombres de sus siervos, e hizo como le había dicho YHVH. Pero, atemorizado por causa de la casa de su padre y de los hombres de la ciudad, no hizo eso de día, sino que lo hizo de noche.
28 Cuando los hombres de la ciudad se levantaron por la mañana, he aquí el altar de Baal estaba demolido y la Asera que había junto a él estaba cortada, y el novillo rojo había sido ofrecido en holocausto sobre el altar construido. 29 Y se decían unos a otros: ¿Quién ha hecho esto? Y cuando indagaron y preguntaron, se les dijo: Gedeón ben Joás ha hecho esto. Por lo cual los hombres de la ciudad dijeron a Joás: 30 Saca a tu hijo, para que muera; porque ha demolido el altar de Baal y ha talado la Asera que había junto a él.
31 Pero Joás respondió a todos los que estaban ante él: ¿Pretendéis contender por Baal, o queréis ayudarle? Quien pretenda contender por él, será muerto antes de la mañana. Si es Elohim, que contienda por sí mismo con el que demolió su altar. 32 Por esto fue apellidado en aquel día Jerobaal, es decir: Contienda con él Baal, por cuanto su altar fue derribado por él.
33 Entre tanto, todos los madianitas, los amalecitas y los hijos del oriente fueron reunidos a una, y pasando adelante acamparon en el valle de Jezreel. 34 Y el Espíritu de YHVH revistió a Gedeón, el cual resonó el shofar, pero Abiezer iba atemorizado detrás de él. 35 Envió entonces mensajeros por todo Manasés, y por Aser, Zabulón y Neftalí, los cuales subieron a su encuentro. 36 Dijo entonces Gedeón a Ha-Elohim: Si has de librar por mi mano a Israel, conforme has dicho, 37 he aquí pondré este vellón de lana en el granero. Si cae el rocío sobre el vellón mientras todo el suelo queda seco, entonces sabré que librarás por mi mano a Israel, conforme has dicho.
38 Y sucedió así, pues cuando se levantó de madrugada, exprimió el vellón y sacó de él rocío hasta llenar un tazón de agua. 39 Dijo entonces Gedeón a Ha-Elohim: No se encienda tu ira contra mí, y hablaré solo una vez más. ¡Te ruego me permitas probar solo esta vez con el vellón! Te ruego que quede seco el vellón y en todo el suelo haya rocío. 40 Y Elohim lo hizo así aquella noche, y la sequedad estuvo solamente en el vellón, mientras que hubo rocío en toda la tierra.
►6.7-10 Se sigue Q →§188. TM añade estos vv.
►6.11 Gedeón… Esto es, talador o cortador. Del verbo heb. gada’ = cortar, mutilar, talar.
►6.24 construyó allí… Esto es, en donde estaba el altar de Baal; YHVH Shalom… →§4.
►6.25-26 segundo novillo… →§196.
►6.32 Jerobaal… Esto es, Gedeón.
►6.34 Abiezer iba atemorizado… TM registra se reunió en pos de él. Se sigue LXX →8.2.
►6.35 TM registra distintas añadiduras. Se sigue LXX →§194.
Jueces 7
Derrota de los madianitas
1 Madrugó Jerobaal (el cual es Gedeón), y todo el pueblo con él, y acamparon junto a En-Harod. Y el campamento de Madián y de Amalec estaba al norte de ellos, en el valle cercano al collado de Moré. 2 Y dijo YHVH a Gedeón: El pueblo que tienes contigo es muy numeroso para que Yo entregue a Madián en su mano, no sea que Israel se enaltezca contra Mí, y diga: Mi mano me ha salvado. 3 Pregona pues a oídos del pueblo, diciendo: ¡Quien tema y tiemble, vuélvase, y retírese del monte de Gilboa! Y de los del pueblo se volvieron veintidós mil, y fueron dejados diez mil.
4 Entonces dijo YHVH a Gedeón: Aún el pueblo es mucho. Haz que bajen a las aguas, y te los probaré allí, y será que de quien Yo te diga: Vaya este contigo, irá contigo; pero del que te diga: No vaya este contigo, no irá. 5 Hizo pues que el pueblo bajara a las aguas, y dijo YHVH a Gedeón: Todo el que lama las aguas con su lengua, como lame el perro, lo pondrás aparte; asimismo a todo el que se arrodille para beber.
6 Y el número de los que bebieron a lametones fue de trescientos hombres, pero el resto del pueblo se arrodilló para beber el agua. 7 Y dijo YHVH a Gedeón: Con estos trescientos hombres que han lamido os salvaré y entregaré a Madián en tus manos. Que todo el pueblo se vaya, cada uno a su lugar. 8 Tomó aquella gente sus pertrechos en sus manos, así como sus shofar, y a todos los demás hombres de Israel los envió, cada cual a su tienda, pero retuvo a los trescientos hombres. Y el campamento de Madián estaba abajo, en el valle.
9 Y sucedió aquella noche que YHVH le dijo: Levántate, baja al campamento, porque lo he entregado en tu mano. 10 Y si temes descender, baja al campamento con tu criado Fura, 11 y escucha lo que hablan, pues así tus manos serán fortalecidas para bajar contra el campamento. Y él bajó con su criado Fura hasta un extremo de los quintados que había en el campamento.
12 Y Madián y Amalec, con todos los orientales, habían sido esparcidos por el valle como multitud de langostas, y sus camellos eran incontables como la arena que está a la orilla del mar. 13 Y he aquí cuando llegó Gedeón, un hombre estaba relatando a su compañero un sueño, y decía: Mira, acabo de soñar un sueño: Veía un pan de cebada que rodaba hasta el campamento de Madián, y llegó hasta la tienda y la golpeó de tal manera que cayó. La trastornó de arriba abajo de tal modo que la tienda colapsó. 14 Y su compañero respondió, y dijo: Esto no es otra cosa sino la espada de Gedeón ben Joás, varón de Israel. Ha-Elohim ha entregado en su mano a Madián y a todo el campamento.
15 Y sucedió que cuando Gedeón oyó el relato del sueño con su interpretación, se postró ante YHVH, y regresó al campamento de Israel, y dijo: ¡Levantaos, porque YHVH ha entregado en vuestra mano el campamento de Madián! 16 Y repartió los trescientos hombres en tres escuadrones, y puso un shofar en mano de cada uno de ellos, y cántaros vacíos con antorchas dentro de los cántaros. 17 Luego les dijo: Miradme, y haced lo que hago yo. He aquí cuando llegue al extremo del campamento, lo que yo haga, así haréis vosotros. 18 Cuando yo, y todos los que están conmigo, hagamos resonar el shofar, entonces cada uno de vosotros también haréis resonar el shofar alrededor de todo el campamento, y gritaréis: ¡Por YHVH y por Gedeón!
19 Y llegó Gedeón con los cien hombres que estaban con él a las afueras del campamento, al principio de la vigilia intermedia, cuando acababan de relevar a los centinelas. Y haciendo resonar el shofar, quebraron los cántaros que llevaban en sus manos. 20 Entonces, los tres escuadrones hicieron resonar los shofar, quebraron los cántaros, y tomando con su mano izquierda las antorchas y con su diestra el shofar para hacerlo resonar, clamaron: ¡Espada de YHVH y de Gedeón! 21 Y cada hombre se mantuvo firme en su lugar alrededor del campamento, y todo el campamento echó a correr gritando mientras huían. 22 Pues cuando hicieron resonar los trescientos shofar, YHVH hizo que la espada de cada uno se volviera contra su compañero en todo el campamento. Y el campamento huyó hasta Bet-Sita, en dirección de Zerera, hasta el límite de Abel-Mehola, cerca de Tabat.
23 Y fueron convocados los israelitas de Neftalí, de Aser y de todo Manasés, y persiguieron a Madián. 24 Luego Gedeón envió mensajeros por toda la serranía de Efraín, diciendo: ¡Bajad al encuentro de los madianitas y tomad antes que ellos Bet- Bara hasta los vados del Jordán! Y todos los hombres de Efraín se reunieron y tomaron Bet-Bara hasta los vados del Jordán. 25 Y capturaron a los dos jefes de Madián: Oreb y Zeeb. Y a Oreb lo mataron en Tsur-Oreb y a Zeeb lo mataron en Yequeb-Zeeb. Y persiguieron a Madián, pero las cabezas de Oreb y de Zeeb las llevaron a Gedeón, al otro lado del Jordán.
►7.1 y de Amalec… Se sigue LXX.
►7.3 vuélvase… →Dt. 20.8; Gilboa… TM/LXX Galaad. Prob. error por iotacismo. Gedeón había acampado junto a En-Harod, al pie del Gilboa →7.1. ►7.11 los quintados… Es decir, puestos militares.
►7.15 se postró… TM omite ante YHVH. Se sigue LXX.
►7.22 se volviera… Lit. se pusiera.
►7.25 Oreb… Esto es, cuervo; Zeeb… Esto es, lobo; Tsur-Oreb… Esto es, peña del cuervo → Is. 10.26; Yequeb-Zeeb… Esto es, lagar del lobo.
Mateo 12.22-37
Beelzebul
Mr 3.20-30; Lc 11.14-23; 12.10
22 Entonces le fue llevado un endemoniado, ciego y mudo; y lo sanó, de tal manera que el mudo hablaba y veía.
23 Y todas las multitudes se asombraban y decían: ¿No será este el Hijo de David? 24 Pero los fariseos, al oírlo, dijeron: Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebul, príncipe de los demonios.
25 Conociendo sus pensamientos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no se mantendrá en pie.
26 Entonces, si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido, ¿cómo, pues, permanecerá su reino? 27 Y si Yo echo fuera los demonios por Beelzebul, ¿por quién los echan vuestros hijos? Por tanto, ellos serán vuestros jueces.
28 Pero, si por el Espíritu de DIOS echo Yo fuera los demonios, entonces llegó a vosotros el reino de DIOS. 29 ¿O cómo puede alguno entrar en la casa del fuerte y saquear sus bienes, si primero no ata al fuerte? Y entonces saqueará su casa.
30 El que no está conmigo, está contra Mí, y el que conmigo no recoge, desparrama.
Lo imperdonable
31 Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia les será liberado a los hombres, pero la blasfemia contra el Espíritu no les será liberada. 32 Cualquiera que diga una palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonada; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.
La abundancia del corazón
Lc 6.43-45
33 O tened por bueno el árbol por su buen fruto, o tened por malo el árbol por su fruto malo, porque por el fruto se conoce el árbol. 34 ¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar cosas buenas siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. 35 El hombre bueno, del tesoro bueno saca cosas buenas; y el hombre malo, del tesoro malo saca cosas malas.
36 Y Yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio; 37 porque por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado.
Marcos 8.27-9.1
La confesión de Pedro
Mt 16.13-20; Lc 9.18-21
27 Salió JESÚS con sus discípulos hacia las aldeas de Cesarea de Filipo, y en el camino preguntaba a sus discípulos, diciéndoles: ¿Quién dicen los hombres que soy Yo? 28 Ellos le respondieron diciendo: Juan el Bautista, otros Elías, y otros, uno de los profetas. 29 Y Él les preguntaba: Y vosotros, ¿quién decís que soy Yo? Respondiendo Pedro, le dice: ¡Tú eres el CRISTO! 30 Y les ordenó severamente que a nadie hablaran acerca de Él.
Su muerte y resurrección (primera predicción)
Mt 16.21-28; Lc 9.22-27
31 Y comenzó a enseñarles: El Hijo del Hombre debe padecer muchas cosas y ser desechado por los ancianos, los principales sacerdotes y los escribas, y ser matado, y ser resucitado después de tres días. 32 Y les declaraba con franqueza el asunto, pero Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirlo. 33 Entonces Él, volviéndose y mirando a sus discípulos, reprendió a Pedro, diciendo: ¡Apártate de mí, Satanás! pues no pones la mira en las cosas de DIOS, sino en las de los hombres. 34 Y llamando a la gente junto con sus discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame, 35 porque el que quiera salvar su vida, la perderá,
pero cualquiera que pierda su vida por causa de Mí y del evangelio, la salvará. 36 Porque, ¿qué aprovecha al hombre ganar todo el mundo y perder su alma? 37 Pues, ¿qué dará el hombre por su alma? 38 Porque el que se avergüence de Mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del Hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles.
►8.27 soy… Lit. ser.
►8.28 →6.14-15; Lc 9.7-8.
►8.29 soy… Lit. ser →Jn 6.68-69.
►8.31 desechado… Esto es, tenido como indigno; tres días… →§319.
►8.32 con franqueza… Es decir, se expresaba claramente.
►8.34 niéguese… Es decir, renuncie a las exigencias de su propio yo; →Mt 10.38; Lc 14.27.
►8.35 →Mt 10.39; Lc 17.33; Jn 12.25. ►8.36 su alma… O su vida. ►8.37 su alma… O por su vida.
9
La transfiguración
Mt 16.28-17.8; Lc 9.27-36
1 También les decía: De cierto os digo: Hay algunos de los que están aquí, que de ningún modo probarán la muerte hasta que vean el reino de DIOS cuando haya venido con poder.
Hechos 24.
Acusación contra Pablo
1 Después de cinco días, el sumo sacerdote Ananías bajó con algunos ancianos y un cierto abogado, Tértulo, quienes se presentaron al gobernador contra Pablo. 2 Cuando él compareció, Tértulo comenzó su acusación, diciendo: Como estamos disfrutando de mucha paz gracias a ti, y debido a tu providencia se están haciendo reformas para esta nación, 3 siempre y en todas partes lo recibimos con toda gratitud, oh excelentísimo Félix. 4 Ahora, a fin de no importunarte más, te suplico que nos oigas brevemente con tu bondad. 5 Porque hemos hallado que este hombre es una peste que promueve altercados entre los judíos en toda la tierra habitada, y un
cabecilla de la secta de los nazarenos, 6 e incluso intentó profanar el templo, y lo tuvimos que arrestar. [[7]] 8 Tú mismo, después de interrogarlo acerca de todas estas cosas, podrás darte cuenta de por qué lo acusamos nosotros.
9 Y los judíos también tomaron parte en la acusación, afirmando que estas cosas eran así.
Defensa de Pablo
10 Cuando el gobernador le hizo señal para que tomara la palabra, Pablo respondió: Sabiendo que desde hace muchos años eres juez para esta nación, con buen ánimo presentaré mi defensa, 11 pudiendo tú cerciorarte de que no hace más de doce días subí a adorar en Jerusalén; 12 y no me hallaron en el templo discutiendo con nadie, ni provocando un motín, ni en las sinagogas, ni en la ciudad; 13 ni pueden ellos probarte aquellas cosas de las que me acusan ahora. 14 Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman secta, así sirvo al DIOS de mis antepasados, creyendo todo lo que es conforme a la ley y lo que está escrito en los profetas, 15 teniendo esperanza en DIOS, la cual ellos mismos también aceptan, de que va a
haber una resurrección tanto de justos como de injustos. 16 Por esto, también yo mismo procuro tener siempre una conciencia irreprensible con respecto a DIOS y los hombres. 17 Ahora bien, después de algunos años llegué a mi nación para dar limosnas y presentar ofrendas. 18 Y estando en eso, no en tumulto ni con alboroto, después de haberme purificado, me encontraron 19 algunos judíos de Asia, que tenían que estar presentes delante de ti y acusarme si algo tenían contra mí, 20 o si no, que estos mismos digan qué delito hallaron cuando yo comparecí ante el Sanedrín, 21 a menos que sea por esta única palabra que dije estando ante ellos: En cuanto a resurrección de muertos soy yo juzgado hoy por vosotros.
Prisionero en Cesarea
22 Félix entonces, enterado más exactamente acerca del Camino, les aplazó el asunto, diciendo: Cuando baje el tribuno Lisias, examinaré vuestro caso.
23 Acto seguido, ordenó al centurión que lo custodiara, pero que tuviera libertad y a ninguno de los suyos impidiera atenderlo. 24 Después de algunos días, llegó Félix con Drusila su mujer (que era judía), y llamando a Pablo, lo oyó acerca de la fe en CRISTO JESÚS.
25 Pero al disertar él sobre la justicia, el dominio propio y el juicio venidero,
Félix se llenó de temor y le dijo: ¡Vete por ahora! Cuando tenga un tiempo
conveniente, te enviaré a llamar. 26 Porque al mismo tiempo esperaba que Pablo le diera dinero; por lo cual, lo hacía llamar con frecuencia para conversar con él.
27 Cuando se cumplieron dos años, Félix recibió como sucesor a Porcio Festo, y queriendo congraciarse con los judíos, Félix dejó encadenado a Pablo.
►24.2 compareció… Lit. habiendo sido llamado.
►24.7 Tanto el v. 7 como parte del 6 y del 8, faltan en los mss. más antiguos y fidedignos del NTG.
►24.8 acusamos…
→24.6.
►24.11 hace… Lit. hay para mí no más de días doce.
►24.12 nadie… Lit. alguno.
►24.14 sirvo… Gr. latreúo;
►24.15 resurrección… M↓ añaden de los muertos.
►24.17 para dar… Lit. dando.
►24.18-19 →21.17-28.
►24.21 resurrección… →23.6.
►24.23 custodiara… Lit. custodiar; impidiera… Lit. impedir.
►24.26 diera… Lit. será dado.