Texto Ɣureo: Deuteronomio 5 y 6
Lecturas para adultos en la semana
DĆa 1 Deuteronomio 5
DĆa 2 Deuteronomio 6
DĆa 3 Daniel 6
DĆa 4Ā Marcos 1:1-15
DĆa 5 Marcos 12:28-44
DĆa 6Ā RomanosĀ 6:15-23āāā
I- Los diez devarim y los cientos de mitzvot.
En otras porciones hemos visto que los conocidos ādiez mandamientosā en realidad se llaman la Ā«Decena de PalabrasĀ» (en hebreo devarim). Ellas son exigidas por Dios para todo aquel que desee relacionarse con Ćl, mientras los verdaderos Ā«MandamientosĀ» (en hebreo mitzvot) son órdenes dadas por Dios a su pueblo para que pueda desarrollar o cultivar la vida con Ćl, entre ellos mismos y con su entorno social.
El apóstol Pablo cuenta cómo los Devarim le permitieron saber que habĆa un Dios Ćŗnico y santo que hace exigencias a todos los seres humanos; mientras los Mitzvot le permitieron darse cuenta de que Ć©l, como ser humano, tenĆa un problema grave en su propia naturaleza (el pecado) que no le permitĆa ser fiel a Dios completamente, sino que le alejaba de Ćl aun cuando Ć©l querĆa acercarse. Por lo tanto, estaba condenado, sin ninguna oportunidad o capacidad propia para solucionar ese problema, e inclusive eso le llevarĆa a fallar en los propios Devarim[1] que le habĆan hecho entender de la existencia del Creador. Por eso, aun cumpliendo y amando la ley, es que llegó a participar del asesinato del inocente Esteban[2].
Y esta es la función de los mitzvot en cuanto a la conversión para aquellos que desean seguir a Dios. Pero tambiĆ©n estos guĆan al pueblo de Dios para enfrentar mejor los retos que la vida presenta, siendo la ayuda perfecta en manos del EspĆritu Santo para enfocar los valores espirituales y de santidad que necesitamos.
[1] Ro 7-8.
[2] Hch 7:58.
II- El hacer con fe.
La palabra āfeā, tanto en el hebreo (emunah) como en el griego (pistis), implica una relación entre el creer y el hacer, por eso vamos a encontrar dos tablas: una que habla del creer en Dios y otra que tiene que ver con el quehacer con los demĆ”s. La primera tabla poseĆa 140 palabras, mientras la segunda 49. Esto nos habla de algo prĆ”ctico en la vida del creyente y es que cuando una persona se convierte a Dios (en esos primeros tiempos) no se debe insistir tanto en lo que tiene que hacer diario, sino en cómo ha de creer en Ćl.
Muchas personas en la actualidad, aun cuando han nacido en una familia creyente, se han construido una imagen de Dios muy distorsionada de su realidad. Por eso enseƱar acerca de quiĆ©n es Dios y cómo se le debe adorar es muy importante para todo aquel que predique el evangelio, en vez de tratar de exigir tanto lo que se debe hacer como cristianos. Pero fĆjese que decimos en los āiniciosā, porque esos son los rudimentos o la base sobre la cual se apoyarĆ” todo lo que luego necesitarĆ” aprender acerca del hacer con fe[1].
Por eso a los apóstoles no les preocupaba tanto quĆ© debĆan hacer los gentiles, pues MoisĆ©s era enseƱado en cada servicio sinagogal de la semana y poco a poco irĆan aprendiendo de las exigencias divinas descritas en los mitzvot. Esta es la razón y no una falta de importancia de estos temas, como algunos maestros de hoy quieren hacer ver, por la que ellos preferĆan concentrarse en predicar a JesĆŗs[2].
[1] Heb 5:11-6:2.
[2] Hch 15:19-21.
III- Arrepentimiento real.
Tristemente la conversión se ha llegado a entender hoy, dentro de la prĆ”ctica actual del evangelismo, como algo que se recibe a partir de una āoración de feā. Aunque esto es algo que realmente viene por la influencia gnóstica sobre el cristianismo desde el primer siglo, que metió a la iglesia en la oscuridad de la era medieval y las diferentes apostasĆas actuales.
El mensaje de Dios siempre ha sido Ā«arrepentĆos porque el reino de los cielos se ha acercadoĀ». Por eso una āoración de feā que no cita nada de la culpabilidad humana y su necesidad de arrepentimiento, sino que seƱala cosas generales sin un sentido especĆfico estĆ” llenando a las iglesias de personas creyentes, pero en realidad sin frutos de una conversión genuina.
ĀæEn quĆ© debe basarse el arrepentimiento del hombre?, precisamente en que alguien puede arrepentirse, y cambiar sus acciones del corazón y de la vida cotidiana. Hay quienes creen que el hombre debe arrepentirse de su naturaleza pecaminosa, y aunque esta es la base de todo el mal, debemos recordar que antes de AdĆ”n el pecar no tenĆa esa naturaleza y a pesar de eso Ć©l desobedeció. Por otra parte, la regeneración de la naturaleza pecaminosa no dependerĆ” para nada del propio hombre, pues es Dios quien regenera; es un milagro obrado solamente por Ćl a travĆ©s de su plan salvĆfico. Pero lo que sĆ puede hacer el hombre es arrepentirse de aquello que estĆ” mal. ĀæY quĆ© es esto?, pues todo lo que se describe en los Devarim. Lo milagroso de la regeneración, si es antes o despuĆ©s de su conversión, queda exclusivamente siempre en las manos de quien Ćŗnico puede regenerarlo: Dios[1].
[1] Las posiciones calvinistas o arminianas al respecto quedan en las manos de los lĆderes de cada congregación. Este material no tiene ese objetivo.
IV- El principal de todos los mandamientos.
Esta porción incluye el principal de todos los mandamientos, conocido como el ShemĆ”, que significa āoyeā, por ser la primera palabra de la frase: Ā«Oye, Israel: YHVH nuestro Dios, YHVH uno es. Y amarĆ”s a YHVH tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.Ā» (Dt 6:4ā5). ĀæPor quĆ© sabemos que el ShemĆ” es principal entre todos los Mitzvot que Dios manda para hacer por aquellos que ya cumplen con los Devarim? No es porque lo digan todos los rabinos desde el siglo I hasta hoy, sino porque nuestro MesĆas asĆ lo enseñó[1].
Debemos entender para poder tener una correcta interpretación del tema, que a pesar de las conclusiones teológicas de muchos intĆ©rpretes y de las doctrinas que han surgido al respecto, que en el contexto histórico en que se desempeñó el ministerio MesiĆ”nico de JesĆŗs y que tambiĆ©n escribieron los apóstoles el ShemĆ” representaba como tambiĆ©n hoy todo el cuerpo devocional[2]. Esta estructura litĆŗrgica venĆa de la propia enseƱanza del creador, no como si Ćl hubiera dado cada paso de forma detallada en un mandamiento escrito, sino de las conclusiones que surgieron en su pueblo del propio trato con Ćl y del estudio de su Palabra.
No hay nada, de entre aquellas cosas para hacer (los Mitzvot) por los que aman a Dios, mĆ”s importante que entrar en la intimidad con Ć©l cada dĆa. Este orden litĆŗrgico del devocional incluĆa: Acciones de gracias, oraciones, peticiones y suplicas; se hacĆan siguiendo el mismo orden en que se realizaban los servicios en el templo. Y segĆŗn nos describe la propia Escritura, este orden fue inspirado por Dios al Rey David siglos despuĆ©s de dada la ley a MoisĆ©s[3].
[1] Mr 12:28-34.
[2] Mr 12.29-30. Para profundizar en este tema se le sugiere leer el libro: Vida antes de la muerte, del propio autor, KDP (ISBN-13: 979-8663797498); donde se describe y se hace un recorrido histórico de la tergiversación que se ha hecho de las palabras de Jesús.
[3] 2Cr 29:25
V- Dios manda a traer las peticiones ante Ćl.
Dios conoce todas las necesidades y no necesita que se las recordemos. Esta realidad nos trae un par de preguntas: ĀæPor quĆ© debemos tener una vida devocional entonces? ĀæPor quĆ© no nos da Dios lo que necesitamos sin que se lo pidamos? Si Ćl no necesita de nuestras plegarias, se debe entender que es el hombre quien necesita hacer esas peticiones. Dios nos ama tanto que creó el derecho a venir ante Ćl con peticiones, porque no solo su respuesta satisface, sino que tambiĆ©n el solo hecho de traerlas ante Ćl edifica el alma. AsĆ de especial es la sola presencia de Dios. Ā
De ahĆ que la vida devocional es un reflejo del deseo santo de aquellos que le aman y una extensión del libre albedrĆo que Dios ha ido sanando desde el momento en que regeneró al creyente. Este precioso tiempo creado por Dios para nosotros ayuda a definir o refinar lo que realmente se quiere en la vida. Como mismo si un padre rico da a su hijo una cantidad infinita de dinero en una bandeja de plata estarĆa volviendo terriblemente malcriado e irresponsable a su hijo, si Dios diera todo a sus hijos automĆ”ticamente nunca verĆamos la necesidad de esforzarnos en determinar lo que realmente queremos en la vida. La vida serĆa cómoda, pero nosotros seguirĆamos siendo superficiales y carnales.
Preguntas:
1.- Explique al resto del grupo quƩ diferencia ve usted entre Devarim y Mitzvot.
2.- A la luz de esta porción interprete Ro 6:15-23.
3.- Si un creyente que ha nacido de nuevo siente ansiedad o ataque de pĆ”nico, ĀæcuĆ”l serĆa la primera recomendación que usted le harĆa y por quĆ©?
4.- Investigue y explique al resto del grupo quƩ elementos pueden conformar el tiempo devocional.
5.- ¿Qué diferencia ve usted entre oración y peticiones a Dios?
DeuteronomioĀ 5
1 Convocó, pues, MoisĆ©s a todo Israel, y les dijo: Ā”Oye Israel los estatutos (jukim) y decretos (mishpatim) que yo hablo hoy a vuestros oĆdos para que los aprendĆ”is y los pongĆ”is por obra! 2 YHVH nuestro Elohim estableció un pacto con nosotros en Horeb. 3 No fue conĀ nuestros padres con quienes YHVH estableció el pacto, sino con nosotros, nosotros los que hoy estamos aquĆ, todos vivos. 4 Cara a cara habló YHVH con vosotros en el monte, de en medio del fuego 5 (en aquel momento yo mediaba entre vosotros y YHVH para poneros delante la palabra de YHVH, porque atemorizados por el fuego, no subisteis al monte), y dijo: 6 Yo soy YHVH tu Elohim, que te saquĆ© de tierra de Egipto, de la casa de esclavitud. 7 No tendrĆ”s otros dioses delante de MĆ. 8 No te harĆ”s imagen ni semejanza alguna de lo que estĆ© arriba en los cielos, o abajo en la tierra, o en las aguas debajo de la tierra. 9 No te postrarĆ”s ante ellas ni les servirĆ”s, porque Yo soy YHVH tu Elohim, El-CanĆ” (Dios celoso), que visito la iniquidad de los padres sobre los hijos hasta terceros y cuartos de los que me aborrecen, 10 pero hago misericordia hasta con la milĆ©sima de los que me aman y guardan mis mandamientos. 11 No tomarĆ”s el nombre de YHVH tu Elohim en vano, porque YHVH no darĆ” por inocente al que tome su Nombre en vano. 12 Guarda el dĆa del shabbat para santificarlo, tal como YHVH tu Elohim te ha ordenado. 13 Seis dĆas trabajarĆ”s y harĆ”s toda tu obra, 14 pero el sĆ©ptimo es shabbat consagrado a YHVH tu Elohim. No harĆ”s ninguna labor, ni tĆŗ, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningĆŗn otro animal tuyo, ni el prosĆ©lito que mora dentro de tus ciudades, para que pueda descansar tu siervo y tu sierva asĆ como tĆŗ. 15 Pues te serĆ” recordado que fuiste esclavo en tierra de Egipto, y que YHVH tu Elohim te sacó de allĆ” con mano fuerte y brazo extendido, por lo cual YHVH tu Elohim te manda guardar el dĆa del shabbat. 16 Honra grandemente a tu padre y a tu madre, como YHVH tu Elohim te ordenó, para que se alarguen tus dĆas y para que te vaya bien en la tierra que YHVH tu Elohim te da. 17 No asesinarĆ”s. 18 No adulterarĆ”s. 19 No robarĆ”s. 20 No declararĆ”s falso testimonio contra tu prójimo. 21 No codiciarĆ”s la mujer de tu prójimo, ni desearĆ”s la casa de tu prójimo, ni su campo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna que sea de tu prójimo.
22 Estas palabras (debarim) habló YHVH a toda vuestra asamblea (kehilĆ”) en el monte, en medio del fuego, de oscuridad y tiniebla, en un torbellino y una potente voz, y no aƱadió mĆ”s. Las escribió sobre dos tablas de piedra y me las dio. 23 Y sucedió que cuando oĆsteis la voz de en medio de la oscuridad y el monte ardiendo en aquel fuego, todos los jefes de vuestras tribus y ancianos os acercasteis a mĆ, 24 y dijisteis: He aquĆ, YHVH nuestro Elohim nos ha mostrado su gloria, y hemos oĆdo su voz de en medio del fuego. Hoy hemos visto que Elohim habla al hombre, y este puede sobrevivir. 25 Pero, Āæpor quĆ© hemos de morir? Pues este gran fuego nos devorarĆ”. Si continuamos oyendo la voz de YHVH nuestro Elohim, moriremos. 26 Pues ĀæquĆ© carne oyó la voz del Elohim vivo hablando en medio del fuego, como nosotros, y ha sobrevivido? 27 AcĆ©rcate tĆŗ, y escucha lo que dice YHVH nuestro Elohim, y luego tĆŗ nos dirĆ”s todo lo que YHVH nuestro Elohim te haya hablado, y escucharemos y lo haremos.
28 Y YHVH escuchó la voz de vuestras palabras mientras me hablabais, y me dijo YHVH: He oĆdo el son de las palabras de este pueblo, lo que te han indicado; bien han hablado en todo cuanto te han dicho. 29 Ā”QuiĆ©n diera que tuvieran siempre tal corazón, que me temieran y observaran todos los dĆas mis mandamientos (mitzvot), para que les fuera bien a ellos y a sus hijos por siempre! 30 Ve, diles: Regresad a vuestras tiendas. 31 Pero tĆŗ permanece aquĆ conmigo para que te diga todo el mandamiento (mitvot), y los estatutos (jukim), y los decretos (mishpatim), los cuales enseƱarĆ”s para que los cumplan en la tierra que Yo les doy en posesión. 32 Y cuidarĆ©is de hacer tal como YHVH vuestro Elohim os ha ordenado. No os apartarĆ©is ni a derecha ni a izquierda. 33 AndarĆ©is por todo el camino que YHVH vuestro Elohim os ha ordenado, para que vivĆ”is y os vaya bien, y prolonguĆ©is los dĆas en la tierra que vais a poseer.
āŗ5.3 el… TM registra este. Se sigue LXX.
āŗ5.8 imagen… Heb. pesel, en singular. Nombre genĆ©rico para designar Ćdolos, estatuas e imĆ”genes para el culto religioso.
āŗ5.9 ni les servirĆ”s… āEx. 34.17; Lv. 19.4; 26.1; Dt. 4.15-19; 27.15; El-CanĆ”…; terceros y cuartos… Es decir, tercera y cuarta generación.
āŗ5.10 la milĆ©sima… Esto es, milĆ©sima generación; mandamientos… āEx. 34.6-7; Nm. 14.18; Dt. 7.9-10.
āŗ5.11 nombre… MinĆŗscula por acompaƱar al sujeto; en vano… āLv. 19.12.
āŗ5.12 shabbat…; ordenado… āEx. 16.23-30; 31.12-14.
āŗ5.13-14 āEx. 23.12; 31.15; 34.21; 35.2; Lv. 23.3.
āŗ5.15 guardar… Lit. hacer.
āŗ5.16 honra grandemente… La estructura del verbo (piel) es intensiva āEx. 20.12; Pr. 3.9; Mt. 15.4; 19.19; Mr. 7.10; 10.19; Lc. 18.20; Ef. 6.2-3.
āŗ5.17 āGn. 9.6; Lv. 24.17; Mt. 5.21; 19.18; Mr. 10.19; Lc. 18.20; Ro.Ā 13.9; Jac. 2.11; asesinarĆ”s… Heb. ratsaj. Indica causar la muerte premeditada de un ser humano. Existen otros verbos que expresan la acción de matar: mut = dar muerte (Dt. 32.39; Jue. 13.23), harag = matar (Ex. 2.14; Dt. 13.9), shajat = matar degollando (Gn. 37.31; Ex. 12.21), zabaj = matar para un sacrificio (Dt. 12.21; 2Cr. 18.2). Aunque no hay una diferencia estricta entre ratsaj y las otras acepciones hebreas, es obvio que este verbo describe una muerte violenta, hecha con premeditación y alevosĆa (1R. 21.19; Os. 4.2). Prueba de ello es que en heb. moderno la palabra usada para asesino es el participio rotseaj, y el verbo ratsaj = asesinar (tambiĆ©n de uso actual), es el mismoĀ que el heb. bĆblico registra en Ex. 20.13 y Dt. 5.17. No obstante, es posible hallar raras excepciones.
āŗ5.18 no adulterarĆ”s… āLv. 20.10; Mt. 5.27; 19.18; Mr. 10.19;Ā Lc. 18.20; Ro. 13.9; Jac. 2.11.
āŗ5.19 robarĆ”s… Heb. ganav. No es posible traducir no hurtarĆ”s, pues el verbo hurtar significa tomar lo ajeno sin intimidación ni violencia. El tĆ©rmino heb. se refiere a cualquier forma de robo, aun mediante la fuerza. TambiĆ©n āLv. 19.11; Mt. 19.18; Mr.10.19; Lc. 18.20; Ro. 13.9.
āŗ5.20 falso testimonio… āEx. 23.1; Mt. 19.18; Mr. 10.19; Lc. 18.20.
āŗ5.21 no codiciarĆ”s… āRo. 7.7; 13.9.
āŗ5.22-27 āHe. 12.18- 19.
āŗ5.24 su gloria… TM aƱade y su grandeza. Se sigue LXX.
āŗ5.26 quĆ© carne… TM aƱade todo. Se sigue LXX.
āŗ5.27 escucha… TM aƱade todo cuanto. Se sigue LXX.
DeuteronomioĀ 6
1 Estos, pues, son los mandamientos (mitzvot), los estatutos (jukim) y los decretos (mishpatim) que YHVH vuestro Elohim ordenó que os enseƱara, para que los pongĆ”is por obra en la tierra a la cual pasĆ”is para tomarla en posesión, 2 a fin de que temas a YHVH tu Elohim, tĆŗ con tu hijo, y el hijo de tu hijo, guardando todos los dĆas de tu vida todos sus estatutos (jukim) y mandamientos (mitzvot) que yo te ordeno, para que tus dĆas sean prolongados. 3 Oye, pues, Israel, y cuidarĆ”s de hacerlo, como te habló YHVH, Elohim de tus padres, para que te vaya bien y seas multiplicado en gran manera en la tierra que mana leche y miel.
4 Estas son las ordenanzas y los decretos que mandó Adonai a los hijos de Israel en el desierto, despuĆ©s de salir de la tierra de Egipto: Oye, Israel: YHVH nuestro Elohim, YHVH, uno es. 5 AmarĆ”s a YHVH tu Elohim con todo tu corazón, con toda tu alma, y con toda tu fuerza. 6 Estas palabras que te ordeno hoy, han de permanecer sobre tu corazón, 7 y las inculcarĆ”s a tus hijos, y hablarĆ”s de ellas sentado en tu casa, andando por el camino, al acostarte, y al levantarte. 8 Las atarĆ”s como seƱal sobre tu mano, y estarĆ”n como frontales entre tus ojos, 9 y las escribirĆ”s en las jambas de tu casa y en tus puertas. 10 Y sucederĆ” que cuando YHVH tu Elohim te introduzca en la tierra que juró a tus padres, a Abraham, a Isaac y a Jacob, que te darĆa; una tierra con grandes y esplĆ©ndidas ciudades que no edificaste, 11 con casas llenas de bienes que tĆŗ no llenaste, con pozos cavados que no cavaste, y con viƱas y olivares que no plantaste; y hayas comido, y hayas sido saciado, 12 guĆ”rdate de olvidar a YHVH, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de esclavitud. 13 TemerĆ”s a YHVH tu Elohim, y aferrado a Ćl, solo jurarĆ”s por su Nombre. 14 No irĆ©is en pos de dioses ajenos, de los dioses de los pueblos que os rodean, 15 porque El-CanĆ” (Dios celoso), YHVH tu Elohim, estĆ” en medio de ti. No sea que, enfurecido, YHVH tu Elohim se levante contra ti y te destruya de sobre la faz de la tierra. 16 No tentarĆ©is a YHVH vuestro Elohim, como lo tentasteis en Masah. 17 GuardarĆ©is diligentemente los mandamientos (mitzvot) de YHVH vuestro Elohim, sus testimonios (edot) y sus estatutos (jukim) que te ha ordenado. 18 HarĆ”s lo recto y lo bueno ante los ojos de YHVH, para que te vaya bien, y entres y poseas la buena tierra que YHVH prometió con juramento a tus padres. 19 Arrojó a todos tus enemigos de delante de ti, como anunció. 20 Y el dĆa de maƱana, cuando tu hijo te pregunte, diciendo: ĀæQuĆ© significan los testimonios (edot), los estatutos (jukim) y los decretos (mishpatim) que YHVH nuestro Elohim os ordenó? 21 Entonces dirĆ”s a tu hijo: Nosotros Ć©ramos esclavos de Faraón en Egipto, pero YHVH nos sacó de Egipto con mano fuerte. 22 Y ante nuestros propios ojos, YHVH dio seƱales y portentos grandes y funestos en Egipto contra Faraón y contra toda su casa, 23 y nos sacó de allĆ” para traernos y darnos la tierra que con juramento habĆa prometido a nuestros padres. 24 Y YHVH nos ordenó poner por obra todos estos estatutos (jukim), temiendo a YHVH nuestro Elohim, para que nos fuera siempre bien y nos conservĆ”ramos vivos, como veis en este dĆa. 25 Entonces se nos contarĆ” como justicia (tzedacĆ”), cuando procuremos cumplir todo este mandamiento (mitzvot) ante YHVH nuestro Elohim, tal como Ćl nos ordenó.
āŗ6.4 uno es…; Mr. 12.29.
āŗ6.5 AmarĆ”s… āMt. 22.37; Mr. 12.30; Lc. 10.27.
āŗ6.7 inculcarĆ”s… Heb. shanan, en su forma intensiva: afilar algo, es decir: enseƱar incisivamente.
āŗ6.8 frontales… LXX: y serĆ”n inamovibles de delante de tus ojos. TM totafot = bandas o marcas frontales.
āŗ6.9 tus puertas… āDt. 11.18-20.
āŗ6.10 a Abraham, a Isaac y a Jacob… āGn. 12.7; 26.3; 28.13 respectivamente; se inserta una tierra para suplir elipsis del original.
āŗ6.13 TemerĆ”s… āMt. 4.10; Lc. 4.8; jurarĆ”s… Heb. tishaveaĀ“. Esta palabra proviene de la raĆz del nĆŗmero siete (sheva). Es como si el queĀ jura, se obligara siete veces a un compromiso del cual es imposible librarse. El mandamiento muestra que el juramento, en su tiempo, era lĆcito si se hacia en el nombre del SeƱor y por causas plenamente justificadas. JesĆŗs cambió el mandamiento al tiempo que exhortaba a los judĆos de su tiempo por la costumbre de jurar por cualquier cosa y en cualquier ocasión.
Ā āŗ6.15 enfurecido… Se sigue LXX.
āŗ6.16 no tentarĆ©is… āMt. 4.7; Lc. 4.12; Masah… āEx.17.1-7.
āŗ6.19 como… TM aƱade YHVH. Se sigue LXX.
āŗ6.20 Se inserta significan para suplir elipsis del original.
DanielĀ 6
1 Pareció bien a DarĆo constituir sobre el reino ciento veinte sĆ”trapas, para gobernar en todo su reino, 2 y al frente de ellos tres gobernadores (uno de ellos era Daniel), a quienes estos sĆ”trapas dieran cuenta, para que el rey no padeciera daƱo alguno. 3 Y Daniel estaba por encima de los sĆ”trapas y gobernadores, porque habĆa en Ć©l un espĆritu superior. Y el rey lo puso sobre todo su reino. 4 Por lo cual los gobernadores y sĆ”trapas buscaban ocasión para acusar a Daniel, pero no podĆan hallar ningĆŗnĀ pretexto o corrupción, porque Ć©l era fiel. 5 Y dijeron los gobernadores: Nada hallaremos contra Daniel excepto en lo relacionado con la ley de su DIOS. 6 Por lo que los gobernadores y sĆ”trapas tumultuados ante el rey, le dijeron: Ā”Rey DarĆo, vive para siempre! 7 Todos cuantos presidimos en tu reino, magistrados, sĆ”trapas, prĆncipes y capitanes han acordado por consejo que promulgues un edicto real y lo confirmes por decreto, que cualquiera que en el espacio de treinta dĆas demande petición de cualquier dios u hombre fuera de ti, oh rey, sea echado al foso de leones.
8 Ahora, oh rey, confirma el edicto y fĆrmalo para que, conforme a la ley de Media y de Persia, sea irrevocable. 9 Y asĆ, el rey DarĆo lo estableció y lo confirmó. 10 Cuando Daniel supo que el edicto habĆa sido firmado, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cĆ”mara alta que daban hacia JerusalĆ©n, se arrodillaba tres veces al dĆa, y oraba y daba gracias delante de su DIOS, como antes acostumbraba hacerlo. 11 Y aquellos hombres, tumultuados, hallaron a Daniel haciendo petición y rogando enĀ presencia de su DIOS.
12 Fueron luego ante el rey y le hablaron acerca del edicto real: ĀæNo has confirmado un edicto que cualquiera que en el espacio de treinta dĆas pida a cualquier dios u hombre fuera de ti, oh rey, sea echado en el foso de los leones? Y el rey dijo: La palabra es verdadera, y el decreto de Media y Persia no puede ser abrogado. 13 Entonces dijeron: he aquĆ, hemos hallado a Daniel, tu amigo, orando y haciendo su petición tres veces al dĆa. 14 Cuando el rey oyó el asunto, se entristeció y resolvió librar a Daniel, y hasta la puesta del sol se esforzó por librarlo. 15 Pero aquellos hombres, tumultuados en torno al rey, le dijeron: Ā”Sabe, oh rey, que es ley de Media y de Persia que ningĆŗn edicto u ordenanza que el rey confirme puede ser abrogado!
Ā 16 Entonces el rey dio orden, y trajeron a Daniel y lo echaron en el foso de los leones. Pero el rey dijo a Daniel: Ā”Tu DIOS, a quien sirves continuamente, Ćl te libre! 17 Y fue traĆda una piedra y puesta sobre la puerta del foso, la cual el rey selló con su propio anillo y con el anillo de sus prĆncipes, para que el acuerdo acerca de Daniel no fuera alterado. 18 Y se retiró el rey a su palacio y pasó la noche en ayuno, sin hacer venirĀ concubinas a su presencia, y el sueƱo huyó de Ć©l. 19 Al amanecer, se levantó el rey y al rayar el alba fue apresuradamente al foso de los leones. 20 Y acercĆ”ndose al foso gritó con voz afligida a Daniel, y le dijo: Ā”Daniel, siervo del DIOS viviente! ĀæHa podido librarte de los leones ese DIOS a quien sirves continuamente? 21 Entonces Daniel respondió al rey: Ā”Oh rey, vive para siempre! 22 Mi DIOS ha enviado a su Ćngel, el cual cerró la boca de los leones para que no me hicieran daƱo, porque ante Ćl fui hallado inocente, como tambiĆ©n lo fui ante ti, oh rey, pues no te he causado perjuicio alguno.
23 Entonces el rey se alegró en gran manera, y ordenó que sacaran a Daniel del foso. Y Daniel fue sacado del foso, y no se halló ninguna lesión en Ć©l, porque habĆa confiado en su DIOS. 24 Luego el rey dio orden, y fueron traĆdos aquellos hombres que habĆan acusado a Daniel, y fueron echados en el foso de los leones ellos, sus hijos y sus mujeres, y aĆŗn no habĆan llegado al fondo del foso, cuando los leones se apoderaron de ellos y los desgarraron.
25 Y el rey DarĆo proclamó a todos los pueblos, naciones y lenguas de la tierra: Paz os sea multiplicada. 26 De parte mĆa es puesta esta ordenanza: Que en todo el dominio de mi reino todos teman y tiemblen ante la presencia del DIOS de Daniel; porque Ćl es el DIOS viviente, y permanece por todos los siglos, y su reino no serĆ” jamĆ”s destruido, y su dominio perdurarĆ” eternamente. 27 Ćl salva y Ćl libra, y hace tambiĆ©n seƱales y maravillas en los cielos y en la tierra, y Ćl ha librado a Daniel delĀ poder de los leones. 28 Y este Daniel prosperó durante el reinado de DarĆo y durante el reinado de Ciro, el persa.
āŗ6.1-13 Se sigue LXX.
āŗ6.6, 11, 15 tumultuados… Es decir, amotinados
MarcosĀ 1:1-15
1 Principio del evangelio de JESUCRISTO.
2 Como estĆ” escrito en el profeta IsaĆas: He aquĆ envĆo mi mensajero delante de tu rostro, El cual prepararĆ” tu camino.Ā 3 Voz que clama en el desierto: Preparad el camino del SeƱor,Ā Allanad sus sendas.
4 Apareció Juan bautizando en el desierto, y proclamando un bautismo de arrepentimiento para liberación de pecados. 5 Y salĆa a Ć©l toda la provincia de Judea, y todos los de JerusalĆ©n, y confesando sus pecados, eran bautizados por Ć©l en el rĆo JordĆ”n. 6 Y estaba vestido Juan de crines de camello y un cinto de cuero alrededorĀ de su cintura, y comĆa langostas y miel silvestre. 7 Y proclamaba, diciendo: DespuĆ©s de mĆ viene el que es mĆ”s poderoso que yo, de quien no soy digno de inclinarme para desatar la correa de sus sandalias. 8 Yo os bauticĆ© con agua, pero Ćl os bautizarĆ” en EspĆritu Santo.
9 En aquellos dĆas sucedió que vino JESĆS desde Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el JordĆ”n.Ā 10 E inmediatamente, al subir del agua, vio que se rasgaban los cielos y al EspĆritu descendiendo sobre Ćl, como una paloma. 11 Y de los Cielos vino una voz: TĆŗ eres mi Hijo amado; en Ti me complacĆ.
12 Enseguida el EspĆritu lo impulsa al desierto. 13 Y estaba en el desierto cuarenta dĆas, siendo tentado por SatanĆ”s, y estaba con las fieras, y los Ć”ngeles lo servĆan.
14 DespuĆ©s que Juan fue entregado, JESĆS fue a Galilea proclamando el evangelio de DIOS, 15 y diciendo: Ā”El tiempo ha sido cumplido y el reino de DIOS al alcance de la mano! Ā”ArrepentĆos, y creed en el evangelio!
āŗ1.1 evangelio… gr. euaggĆ©lion = buena noticia. Mā aƱaden Hijo de DIOS.
āŗ1.2 profeta IsaĆas…; mensajero… gr. Ć”ggelos. Define tanto a seres sobrenaturales como a mensajeros humanos; āMal 3.1. TR aƱade delante de ti.
āŗ1.3 āIs 40.3.
āŗ1.4 Juan… Mā el bautista; liberación de pecados...
āŗ1.5 los de JerusalĆ©n… Lit. jerosolimitanos.
āŗ1.6 vestido… ā2R 1.8 nota; y comĆa… Lit. comiendo; langostas… Es
decir, saltamontes.
āŗ1.9 se inserta que para suplir elipsis del original.
āŗ1.10 inmediatamente… VĆ©ase comentario en 1.18; se rasgaban… Otra traducción posible: estaban siendo rasgados (voz pasiva).
āŗ1.11 me complacĆ… El aoristo es muy importante. Expresa una acción puntual, en este caso, acontecida antes de la fundación del mundo āSal 40.6-7, Is 42.1; Mt 12.18; 17.5; Mr 9.7; Lc 9.35; Jn 3.16.
āŗ1.13 servĆan… Gr. diakonĆ©o.
āŗ1.14 fue entregado… Lit. ser entregado; evangelio de DIOS… Las palabras del reino fueron aƱadidas para conformar esta inusitada frase a
la mĆ”s frecuente expresión el reino de DIOS āv. 15. La lectura adoptada estĆ” respaldada por āµ y B.
āŗ1.15 al alcance de la mano… ā14.42; Dn 2.44; Mt 3.2.
MarcosĀ 12:28-44
28 Y uno de los escribas que los oyó discutir (viendo que les respondió bien), se acercó y le preguntó: ĀæCuĆ”l es el primer mandamiento de todos? 29 Respondió JESĆS: El primero es: Oye, Israel, el SeƱor nuestro DIOS un SeƱor es, 30 y amarĆ”s al SeƱor tu DIOS con todo tu corazón y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. 31 El segundo es este: AmarĆ”s a tu prójimo como a ti mismo. Mayor que estos, no hay otro mandamiento. 32 Y el escriba le dijo: Maestro, bien dijiste en verdad que Uno es, y no hay otro fuera de Ćl, 33 y amarlo con todo el corazón y conĀ todo el entendimiento y con toda la fuerza, y amar al prójimo como a sĆ mismo, vale mĆ”s que todos los holocaustos y sacrificios. 34 Y JESĆS, viendo que respondió sensatamente, le dijo: No estĆ”s lejos del reino de DIOS. Y ya ninguno se atrevĆa a preguntarle.
35 Y tomando la palabra, JESĆS les preguntaba en el templo: ĀæCómo dicen los escribas que el CRISTO es hijo de David? 36 David mismo dijo movido por el EspĆritu Santo: Dijo el SeƱor a mi SeƱor: SiĆ©ntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies. 37 David mismo lo llama SeƱor, pero, Āæde dónde es su hijo? Y una gran multitud lo escuchaba con gusto.
38 Y enseƱƔndoles, les decĆa: Guardaos de los escribas, que anhelan andar con largas ropas y recibir saludos en las plazas, 39 y ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los puestos de honor en las cenas, 40 pero devoran las casas de las viudas y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirĆ”n un juicio mĆ”s severo.
41 Y sentado enfrente del arca de las ofrendas, observaba cómo la gente echa cobre en el arca. Y muchos ricos echaban mucho; 42 pero llegando una viuda pobre, echó dos leptones, lo que es un cuadrante. 43 Y llamando a sus discĆpulos, les dijo: De cierto os digo que esta pobre viuda echó mĆ”s que todos los que estĆ”n echando en el arca de las ofrendas. 44 Porque todos echaron de lo que les sobra, pero esta, de su pobreza, echó todo lo que tenĆa, todo su sustento.
āŗ12.28 preguntó… āLc 10.25-28.
āŗ12.29 primero… Mā aƱaden mandamiento de todos.
āŗ12.30 āDt 6.4-5. fuerzas… Mā aƱaden Este es el principal mandamiento.
āŗ12.31 āLv 19.18; es… Mā aƱaden semejante.
āŗ12.32 āDt 4.35.
āŗ12.33 āOs 6.6.
āŗ12.36 āSal 110.1; §302.
āŗ12.38 saludos… Esto es, demostración afectada de admiración.
āŗ12.40 juicio mĆ”s severo….
āŗ12.41 sentado… Los copistas tendĆan a insertar el nombre JesĆŗs, a fin de identificar el sujeto; arca… Gr. gazofulĆ”kion. LugarĀ donde se recogĆan las ofrendas del templo.
āŗ12.42 leptones… Leptón. Moneda de cobre con valor de medio cuadrante.
āŗ12.44 de su pobreza… Lit. de la necesidad
RomanosĀ 6:15-23
15 ¿Entonces, qué? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la ley sino bajo la gracia? ”De ninguna manera! 16 ¿Acaso no sabéis que a quien os ofrecéis como esclavos para obedecer, esclavos sois de aquel a quien obedecéis, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia?
17 Pero gracias a DIOS que, aunque erais esclavos del pecado, bedecisteis de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; 18 y habiendo sido libertados del pecado, fuisteis hechos esclavos de la justicia. 19 Hablo humanamente a causa de la debilidad de vuestra carne. Porque asĆ como ofrecisteis vuestros miembros como esclavos a la impureza y a la iniquidad para la iniquidad, asĆ ahora ofreced vuestros miembros como esclavos a la justicia para santificación. 20 PorqueĀ cuando erais esclavos del pecado, estabais libres en cuanto a la justicia. 21 Pero, ĀæquĆ© fruto tenĆais entonces de aquellas cosas de las cuales ahora os avergonzĆ”is? Porque el fin de ellas es muerte. 22 Pero ahora, habiendo sido libertados del pecado y hechos esclavos de DIOS, tenĆ©is vuestro fruto para santificación, y al fin, vida eterna. 23 Porque la paga del pecado es muerte, pero la dĆ”diva de DIOS es vida eterna en CRISTO JESĆS, el SeƱor nuestro.
Ā āŗ6.15 Pecaremos… Lit. pecĆ”ramos.
āŗ6.16 obedecer… Lit. obediencia.
āŗ6.17 doctrina...
āŗ6.18 hechos esclavos… Gr. doulóo = esclavizar, hacer esclavo, someter a esclavitud.
āŗ6.23 la paga… Lit. el sueldo en vĆveres.

