Texto Ɣureo: Ex 20:12
Lecturas para adultos en la semana
DĆa 1: Salmo 27
DĆa 2: Proverbios 22-23
DĆa 3: Malaquias 1
DĆa 4: Mateo 15
DĆa 5: Juan 8-9
DĆa 6: Efesios 6:1-9
I- Honrar a los padres asegura calidad de vida.
Interesantemente, Dios pone el respeto a los padres a la altura de reconocerle a Ćl como Dios. Una de las razones para esto se encuentra en el propio texto: Ā«para que tus dĆas sean alargadosĀ», lo que no se refiere a longanimidad, sino a calidad de vida. En el crecimiento de una persona mucho se debe a un roce con los padres, inclusive de manera inconsciente. Si no hay una buena administración de estĆ”s emociones, la vida del ser humano serĆ” muy desequilibrada. Para poder tener un buen bregar de esas emociones se debe comenzar en este punto de honrarles.
II- Los padres no necesitan merecer, honrarles es un juramento.
Honrar es mucho mĆ”s que agradecer por las provisiones o por los beneficios que los padres han hecho por sus hijos. FĆjese que esta palabra vino para una generación que hizo muy poco por sus hijos en el sentido de provisión. Dios fue quien proveyó el alimento, la ropa y cuanto hizo falta en el desierto. Este juramento de honrar a los padres no depende de lo que los padres hacen por los hijos o si fueron buenos padres; mĆ”s bien han de ser respetados porque el regalo de la vida viene a travĆ©s de ellos.
III- Un equilibrio entre honrar y reparar.
Esta palabra o juramento encuentra un paralelo en Lv 19:3, donde aparece la palabra «temer»[1]. De aquà que abarca dos Ôreas: hacer acciones positivas (honrar) y no hacer acciones negativas (respetar). A continuación, se muestran dos listas de algunas sugerencias para meditar y profundizar en cuanto a cómo honrar y respetar a los padres[2]:
Honrar:
- Busca oportunidades de servir y ayudar a tus padres (por ejemplo: deja que se sienten mientras tĆŗ les traes comida o les atiendes).
- Preocúpate de levantarte y saludar a tus padres cuando entren a una habitación donde ya tú te encuentras.
- Escolta a tus padres cuando se vayan (di āhasta luegoā).
- Donde haya sólo una silla, ofrécela a ellos en vez de tomarla para ti.
Respetar:
- No te sientes en la silla de tus padres.
- No llames a tus padres por su primer nombre, sino utiliza un tĆtulo como āMamiā o āPapiā.
- Utilizar siempre un tono de voz agradable cuando le hables a tus padres.
- Evita interrumpir a tus padres cuando estƩn hablando.
- No contradigas de forma directa a tus padres.
- No corrijas o avergüences a tus padres delante de otros.
- No discutas agresivamente con tus padres.
- No desobedezcas a tus padres.
- No empieces a comer antes de que tus padres lo hagan.
- No te retires de una habitación o conversación sin el consentimiento de tus padres.
- No despiertes a tus padres a menos que ellos te lo pidan.
IV- Los padres tambiƩn son hijos.
Este juramento muchas veces es enfocado solamente en los hijos, pero recuerde que los padres tambiĆ©n son hijos. AsĆ que aquĆ se exige no solo el acto de hacer, sino tambiĆ©n el de enseƱar a los hijos a honrar a los padres. Esto implica la enseƱanza en sĆ, la corrección y el ejemplo palpable de la vida de unos padres que honran a sus padres. A veces los padres exigen a sus hijos honra sin haberles enseƱado con su propio ejemplo.
V- Padres problemƔticos.
Por otra parte, es sabido que los padres no son perfectos y algunos son āproblemĆ”ticosā. Sin embargo, no importa cuĆ”n difĆcil sea el carĆ”cter de un padre, un hijo todavĆa estĆ” obligado a mostrar honor y respeto. Esto se aplica incluso si un padre biológico ha abandonado a su hijo o incluso si ha sido grosero, desagradable y lo avergüenza. Al mismo tiempo, mientras esto es un juramento tambiĆ©n se debe ser guardiĆ”n de nuestro propio bienestar. Por tanto, uno no estĆ” obligado a poner en peligro su salud fĆsica o emocional por un padre. Por lo tanto, si un hijo no puede enfrentar la conducta de sus padres, puede guardar la distancia sin la necesidad de deshonrarlo. Por supuesto, todo esto no justifica en modo alguno a un padre abusivo. Alguien decĆa en una ocasión: Ā«los padres abusivos necesitan perdón y sus hijos tambiĆ©n necesitan perdonarĀ», y todo esto a travĆ©s de la honra.
VI- Los abuelos tambiƩn son padres.
De actitudes como la de Jacob con Abraham y MoisƩs con Jetro se puede concluir que en esta lista de honra tambiƩn se encuentran los abuelos y los suegros. Sin embargo, en un caso de conflicto de intereses, el honor a un padre tiene prioridad.
El honor no debe acompaƱar a los padres tan solo en vida, sino que póstumamente deben ser honrados antes las generaciones que siguen. Y principalmente con una vida santa y en sabidurĆa, obligando a todos a que reconozcan cuĆ”n buenos han sido nuestros padres al ver las acciones nuestras.
Preguntas:
1.- Si alguien le pregunta cuĆ”nto han invertido tus padres en ti para que les honres, ĀæcuĆ”l serĆa su repuesta?
2.- Vivimos en una sociedad que trata de romper este vĆnculo de honra, Āæcómo pudiera usted tomar acciones para este fin?
3.- ¿Qué ejemplo pudiera poner usted de situaciones sociales que mal educan con respecto a esta palabra?
4.- Saque unos minutos para honrar con sus palabras a sus padres ante su grupo de clase.
[1] TiraĆŗ (×ŖÖ“Ö¼×רָ××Ö¼) dos textos nos pueden favorecer a entender el dualismo entre temor y respetar u honrar de esta palabra: Gn 3:10; 22:12.
[2] Estas no son como una la ley para cumplir, sino sugerencias sacadas del Talmud, Arba Turim y el Shuljan Aruj, que ilustran detalles que pueden enriquecer la reflexión acerca de este punto.
Ćxodo 20:12
12 Honra a tu padre y a tu madre, para que tus dĆas se alarguen en la tierra (adamah) que YHVH tu Elohim te da.
āŗ20.12 Honra… El verbo (piel) es intensivo: Honra grandemente āDt 5.16; Pr 3.9; a tu padre y a tu madre… āDt 27.16; Mt 15.4; 19.19; Mr 7.10; 10.19; Lc 18.20; Ef 6.2; alarguen… āEf 6.3.
Salmo 27
1 De David.
YHVH es mi luz y mi salvación, ¿de quién temeré?
YHVH es la fortaleza de mi vida, ¿de quién he de atemorizarme?
2 Cuando se juntaron contra mĆ los malignos para devorar mis carnes, mis adversarios y mis enemigos tropezaron y cayeron.
3 Aunque un ejĆ©rcito acampe contra mĆ, no temerĆ” mi corazón, aunque contra mĆ se levante guerra, yo estarĆ© confiado.
4 Una cosa he pedido a YHVH, esta buscarĆ©:Ā Que estĆ© yo en la Casa de YHVH todos los dĆas de mi vida, para contemplar la hermosura de YHVH, e inquirir en su templo.
5 Porque Ćl me esconderĆ” en su cabaƱa (sucĆ”) en el dĆa del mal, me ocultarĆ” en lo reservado de su tienda (ohel). Me pondrĆ” en alto sobre una roca.Ā 6 Y mi cabeza serĆ” levantada sobre mis enemigos en derredor, yĀ en su tienda (ohel) ofrecerĆ© sacrificios con voz de jĆŗbilo.
CantarĆ©, sĆ, cantarĆ© salmos a YHVH.
7 ”Escucha, oh YHVH, cuando clamo con mi voz! ”Ten misericordia de mà y respóndeme!
8 Sobre Ti dijo mi corazón:Ā Ā”Buscad mi rostro!Ā Tu rostro buscarĆ©, oh YHVH.Ā 9 No escondas tu rostro de mĆ, ni rechaces con ira a tu esclavo.
Has sido mi ayuda, no me dejes ni me desampares, oh Elohim de mi salvación.
10 Aunque mi padre y mi madre me abandonen, YHVH me recogerĆ”.
11 EnsƩƱame, oh YHVH, tu camino, yĀ guĆame por senda llana, a causa de los que me acechan.
12 No me entregues a la voluntad de mis adversarios, porque se han levantado contra mĆ testigos falsos, yĀ aquellos que respiran violencia.
13 Creo que verƩ la bondad de YHVH en la tierra de los vivientes.
14 Aguarda a YHVH.
”Esfuérzate y aliéntese tu corazón!
Ā”SĆ, espera a YHVH!
āŗ27.13 Creo que verĆ©… Otras versiones registran: HabrĆa yo desmayado, si noĀ creyese que verĆ© la bondad… Pero la conjunción condicional si y el adverbio no (queĀ en hebreo forman la sola palabra lulóā) forman una falsa elipsis, y por tanto debenĀ omitirse.
Proverbios 22.
1 MÔs vale el buen nombre que las muchas riquezas, y el ser apreciado mÔs que la plata y el oro.
2 El rico y el pobre se encuentran:Ā A todos ellos los hizo YHVH.
3 El prudente ve el mal y se aparta, los simples siguen, y llevan el daƱo.
4 En las huellas de la humildad y del temor de YHVH, andan riqueza, honor y vida.
5 Espinos y lazos hay en el camino de los perversos, el que guarda su alma se aparta de ellos.
[[6]]
7 El rico domina al pobre, yĀ el que pide prestado es siervo del prestamista.
8 Quien siembra maldad cosecha desgracia, yĀ la vara de su arrogancia se consumirĆ”.
9 El que tiene ojo generoso serÔ bendecido, porque repartió su pan con el pobre.
10 Echa fuera al escarnecedor, y se irÔ la discordia, y también saldrÔn la contienda y las afrentas.
11 El que ama la pureza de corazón, el que tiene gracia en sus labios, tendrÔ como amigo al propio rey.
12 Los ojos de YHVH velan por la verdad, yĀ Ćl descubre el engaƱo de los traicioneros.
13 Dice el perezoso: Afuera hay un león, en plena calle me matarÔ.
14 Abismo profundo es la boca de la mujer ajena, el aborrecido de YHVH caerĆ” allĆ.
15 La necedad se pega al corazón del niño, la vara de la corrección se la apartarÔ.
16 Quien oprime al pobre enriquece, quien da al rico se empobrece.
17 Inclina tu oĆdo y escucha las palabras de los sabios, y aplica tu corazón a mis enseƱanzas,Ā 18 porque serĆ” bueno que las guardes dentro de ti, y las establezcas sobre tus labios,Ā 19 para que pongas en YHVH tu confianza, tambiĆ©n a ti te instruirĆ©.
20 ¿No te he escrito cosas excelentes de consejos y enseñanzas, 21 para que conozcas la certeza de los dichos de verdad, y puedas hacerlas llegar a los que te son enviados?
22 No explotes al pobre, porque es pobre, ni atropelles al desgraciado en la puerta,Ā 23 porque YHVH defenderĆ” su causa, yĀ quitarĆ” la vida a los que la quitan a otro.
24 No hagas amistad con el iracundo, ni te hagas acompañar del varón violento, 25 no sea que te acostumbres a sus conductas, y pongas lazo a tu propia alma (nefesh).
26 No seas tĆŗ de los que dan la mano, yĀ salen por fiadores de deudas.
27 Si no tienes con qué pagar, ¿por qué te habrÔn de quitar tu propia cama?
28 No remuevas el lindero antiguo que pusieron tus padres.
29 ĀæHas visto hombre diligente en su obra? EstarĆ” delante de los reyes y no de la gentuza.
āŗ22.2 se encuentran… Es decir, tienen en comĆŗn.
āŗ22.6 TM aƱade v. Se sigue LXX.
āŗ22.22 en la puerta… Esto es, la plaza de la ciudad donde seĀ realizaban los juicios.
Proverbios 23.
1 Cuando te sientes a comer con un seƱor, considera bien al que estƔ ante ti, 2 y pon cuchillo a tu garganta, si eres dado a la gula.
3 No codicies sus manjares delicados, porque es pan engaƱoso.
4 No te afanes por hacer riquezas, sƩ prudente, y desiste, 5 pues le echas una mirada, y ya no estƔn, han echado alas como un Ɣguila que vuela a los cielos.
6 No te sientes a comer con el avaro, ni codicies sus manjares, 7 porque según piensa en su alma, asà es; come y bebe, te dirÔ, pero su corazón no estÔ contigo; 8 vomitarÔs el bocado que comiste, y habrÔs malgastado tus cumplidos.
9 No hables a oĆdos insensatos, porque despreciarĆ”n tus sensatas razones.
10 No remuevas el lindero antiguo, ni te metas en el campo de los huérfanos, 11 porque el que los estÔ redimiendo es fuerte, y pleitearÔ su causa contra ti.
12 Aplica tu corazón a la enseƱanza, yĀ tus oĆdos a las palabras sabias.
13 No escatimes corregir al muchacho, si lo castigas con vara, no morirĆ”.
14 Lo castigarƔs con vara, y librarƔs su alma (nefesh) del Seol.
15 Hijo mĆo, si tu corazón llega a ser sabio, tambiĆ©n a mĆ se me alegrarĆ” el corazón, 16 tambiĆ©n se alegrarĆ”n mis riƱones, cuando tus labios hablen cosas rectas.
17 No tengas envidia de los pecadores, antes, persevera en el temor de YHVH en todo tiempo, 18 porque ciertamente hay un porvenir, yĀ tu esperanza no serĆ” frustrada.
19 Oye tĆŗ, hijo mĆo, y sĆ© sabio, yĀ dirige tu corazón por el buen camino.
20 No te juntes con los bebedores de vino, ni con los comilones de carne, 21 porque el ebrio y el glotón se empobrecen, y el dormitar hace vestir harapos.
22 Escucha al padre que te engendró, y no desprecies a tu madre porque haya envejecido.
[[23]]
24 El padre del justo se alegrarƔ en gran manera, el que engendra un hijo sabio se gozarƔ con Ʃl.
25 Ā”AlĆ©grense tu padre y tu madre, yĀ regocĆjese la que te concibió!
26 Dame, hijo mĆo, tu corazón, y observen tus ojos mis caminos, 27 porque hoyo profundo es la ramera, yĀ abismo profundo la mujer ajena.
28 También ella, como salteador, acecha, y provoca traiciones entre los hombres.
29 ¿De quién son los ayes? ¿De quién las tristezas? ¿De quién las contiendas? ¿De quién el quejido? ¿De quién las heridas sin causa? ¿De quién los ojos enrojecidos? 30 De quien se alarga en el vino, de los que van catando licores mezclados.
31 No mires al vino cuando rojea, y lanza destellos en la copa, porque fluye suavemente, 32 pero al fin, muerde como una serpiente; pica como una vĆbora.
33 Tus ojos desearÔn la mujer ajena, y tu corazón hablarÔ cosas perversas, 34 y serÔs como el que estÔ acostado en alta mar, como el que duerme en el cabo de un mÔstil, 35 y dirÔs: Me han golpeado y no me ha dolido, me han sacudido y no lo he sentido, en cuanto despierte, volveré a pedir mÔs.
āŗ23.23 TM aƱade v. Se sigue LXX.
Malaquias 1
1 Carga del orĆ”culo de YHVH para Israel, por mano de MalaquĆas.
2 Os he amado, dice YHVH. Pero vosotros decĆs: ĀæEn quĆ© nos has amado? Dice YHVH: ĀæNo es EsaĆŗ hermano de Jacob? Pero a Jacob amĆ© 3 y a EsaĆŗ aborrecĆ. Sus montes destinĆ© a la desolación y su herencia a los chacales del desierto. 4 Aunque Edom diga: Hemos sido arruinados, pero volveremos a edificar las ruinas, asĆ dice YHVH Sebaot: Ellos edificarĆ”n, pero Yo destruirĆ©, y serĆ”n llamados Territorio de Maldad, Pueblo de la Ira Perenne de YHVH. 5 Y vuestros mismos ojos lo verĆ”n, y dirĆ©is: Ā”YHVH fue engrandecido mĆ”s allĆ” de los confines de Israel! 6 El hijo honra al padre, y el siervo a su seƱor. Si, pues, Yo soy Padre, Āædónde estĆ” mi honra? Y si soy SeƱor, Āædónde estĆ” el temor que se me debe? dice YHVH Sebaot a vosotros, oh sacerdotes que despreciĆ”is mi Nombre. Y decĆs: ĀæEn quĆ© hemos despreciado tu Nombre? 7 En que ofrecĆ©is sobre mi altar comida mancillada. Y dirĆ©is: ĀæEn quĆ© la hemos mancillado? La mesa de YHVH estĆ” mancillada, y lo puesto sobre ella es desdeƱable; 8 pues cuando ofrecĆ©is lo ciego para el sacrificio, Āæno estĆ” mal? Y cuando ofrecĆ©is lo cojo o lo enfermo, Āæno estĆ” mal? Ā”PresĆ©ntalo a tu prĆncipe! ĀæAcaso se complacerĆ” en ti o le serĆ”s acepto? dice YHVH Sebaot.
9 ”Implorad, pues, el favor de Elohim para que tenga compasión de nosotros! Pues si de vuestra mano procede todo esto, ¿cómo lo habréis de aplacar?, dice YHVH Sebaot. 10 ”Oh si hubiera entre vosotros quien os cerrara las puertas para que no encendierais en vano mi altar! ”No tengo complacencia en vosotros, dice YHVH Sebaot, ni aceptaré ofrenda de vuestras manos!
11 Desde el levante del sol hasta su ocaso, mi Nombre ha sido glorificado entre las naciones, y en todo lugar es ofrecido a mi Nombre sacrificio de incienso y ofrenda limpia, porque mi Nombre es grande entre los gentiles, dice YHVH Sebaot. 12 Pero vosotros lo profanĆ”is cuando decĆs: La mesa de YHVH estĆ” mancillada y lo puesto sobre ella es desdeƱable, 13 y exclamĆ”is: Ā”CuĆ”n tedioso es esto! y me tratĆ”is desdeƱosamente, dice YHVH Sebaot. Me traĆ©is lo robado, lo cojo y lo enfermo para presentar la ofrenda, Āæy la he de aceptar de vuestra mano? dice YHVH. 14 Ā”Maldito el que teniendo un macho robusto en su rebaƱo sacrifica lo daƱado a YHVH con juramento! Porque Yo soy el gran Rey, dice YHVH Sebaot, y mi Nombre es temible entre los gentiles.
āŗ1.1 Carga… TambiĆ©n significa profecĆa; MalaquĆas… Significa mi Ć”ngel, mi mensajero.
āŗ1.4 Sebaot… Esto es, de los ejĆ©rcitos o de las huestes.
āŗ1.8 ciego… Se refiere al animal que ha de ser sacrificado.
āŗ1.9 Implorad… TM aƱade ahora. Se sigue LXX; Elohim… Lit. Ā“El. Contracción de Elohim.
āŗ1.13 esto… Es decir, el servicio del sacerdocio; y me… 14.ĀŖ enmienda de los Soferim.
āŗ1.14 Maldito… TM aƱade el fraudulento. Se sigue LXX.
Mateo 15.
1 Entonces se acercan a JESĆS unos fariseos y escribas de JerusalĆ©n, diciendo: 2 ĀæPor quĆ© tus discĆpulos quebrantan la tradición de los ancianos? Porque no se lavan las manos cuando comen pan. 3 Ćl respondió y les dijo: ĀæPor quĆ© tambiĆ©n vosotros quebrantĆ”is el mandamiento de DIOS por causa de vuestra tradición? 4 Porque DIOS dijo: Honra al padre y a la madre. Y: El que maldice a padre o madre, muera irremisiblemente. 5 Pero vosotros decĆs: Cualquiera que diga al padre o a la madre: Es ofrenda lo que de mĆ podrĆas recibir como ayuda; 6 de ningĆŗn modo tendrĆ” que honrar a su padre. AsĆ invalidĆ”is la Palabra de DIOS por vuestra tradición. 7 Ā”Hipócritas! Bien profetizó de vosotros IsaĆas, cuando dijo: 8 Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón dista lejos de MĆ. 9 Y en vano me reverencian, enseƱando como doctrinas preceptos de hombres.
10 Y llamando a la muchedumbre, les dijo: OĆd y entended: 11 No es lo que entra por la boca lo que contamina al hombre, sino lo que sale de la boca, eso contamina al hombre. 12 Entonces acercĆ”ndose los discĆpulos, le dicen: ĀæSabes que los fariseos se sintieron ofendidos cuando oyeron la Palabra? 13 Ćl respondió y dijo: Toda planta que no plantó mi Padre celestial serĆ” desarraigada. 14 Dejadlos, son ciegos guĆas de ciegos: si un ciego guĆa a otro ciego, ambos caerĆ”n en un hoyo. 15 Tomando la palabra, Pedro le dijo: AclĆ”ranos la parĆ”bola. 16 Y Ćl respondió: ĀæTambiĆ©n vosotros estĆ”is aĆŗn sin entendimiento? 17 ĀæNo entendĆ©is que todo lo que entra en la boca va al vientre y es echado en la letrina? 18 Pero las cosas que salen de la boca provienen del corazón, y esas contaminan al hombre. 19 Porque del corazón provienen malos pensamientos, homicidios, adulterios, inmoralidad sexual, robos, falsos testimonios, difamaciones. 20 Estas cosas son las que contaminan al hombre, pero el comer con manos no lavadas no contamina al hombre.
21 Partiendo de allĆ, JESĆS se retiró a las partes de Tiro y Sidón. 22 Y he aquĆ una mujer cananea que habĆa salido de aquellos confines, clamaba diciendo: Ā”Ten compasión de mĆ, SeƱor, hijo de David! Mi hija estĆ” horriblemente endemoniada. 23 Pero Ćl no le respondió palabra. Entonces, acercĆ”ndose sus discĆpulos, le rogaban, diciendo: DespĆdela, porque grita detrĆ”s de nosotros. 24 Ćl respondiendo, dijo: No fui enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. 25 Pero ella, acercĆ”ndose, se postraba ante Ćl, diciendo: Ā”SeƱor, ayĆŗdame! 26 Ćl respondió y dijo: No estĆ” bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos. 27 Pero ella dijo: SĆ, SeƱor, pero aun los perrillos comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. 28 Entonces respondiendo JESĆS, le dijo: Ā”Oh mujer, grande es tu fe! Ā”Que te suceda como quieres! Y su hija quedó sana desde aquella hora.
29 Y JESĆS, pasando de allĆ, vino junto al mar de Galilea, y subiendo al monte, se sentó allĆ. 30 Y se acercaron a Ćl grandes multitudes, que traĆan consigo cojos, lisiados, ciegos, mudos, y muchos otros, y los pusieron a sus pies, y los sanó. 31 Y la muchedumbre se asombró al ver a los mudos hablando, a los lisiados sanos, a los cojos andando, y a los ciegos viendo. Y glorificaron al DIOS de Israel.
32 DespuĆ©s de llamar JESĆS a sus discĆpulos, dijo: Siento compasión por la muchedumbre, porque ya hace tres dĆas que estĆ”n conmigo y no tienen quĆ© comer, y no quiero enviarlos hambrientos, no sea que desfallezcan en el camino. 33 Le dicen los discĆpulos: ĀæDe dónde conseguiremos aquĆ en un despoblado tantos panes como para saciar a una multitud tan grande? 34 JESĆS les dice: ĀæCuĆ”ntos panes tenĆ©is? Y ellos dijeron: Siete, y unos pocos pececillos. 35 Y mandó a la multitud que se recostara sobre la tierra, 36 tomó los siete panes y los peces, dio gracias y los partió, e iba dando a los discĆpulos, y los discĆpulos a las multitudes. 37 Y comieron todos y fueron saciados, y de lo sobrante de los trozos recogieron siete grandes canastas llenas. 38 Y los que habĆan comido eran como cuatro mil hombres, aparte de mujeres y niƱos. 39 Y despedida la multitud, subió a la barca y llegó a las proximidades de MagadĆ”n.Ā
āŗ15.3 mandamiento… tradición… PrimacĆa de la Palabra sobre la tradición.
āŗ15.4 dijo… Mā mandó diciendo āEx. 20.12; 21.17; Lv. 20.9; Dt. 5.16.
āŗ15.5 ofrenda… Esto es, mi ofrenda a Dios. āMr. 7.11.
āŗ15.6 a su padre… Mā aƱaden y a su madre; invalidĆ”is… āIs. 8.16; Lc. 11.52; la Palabra… Mā registran el mandamiento.
āŗ15.8-9 āIs. 29.13.
āŗ15.9 me reverencian… Gr. sĆ©bo. Debe diferenciarse de latreĆŗo = servir ā4.10, y proskunĆ©o = adorar āJn. 4.22.
āŗ15.13 serĆ” desarraigada… El sentido es escatológico ā13.19,38.
āŗ15.14 ciegos… āLc. 6.39.
āŗ15.16-20 Muestra la fuerza de los prejuicios colectivos ā12.34; Hch. 10.14; Jac. 3.6; Ef. 4.29; Jer. 17.9.
āŗ15.19 inmoralidad…; difamaciones… Esto es, calumnias.
āŗ15.21 se retiró… āMr. 7.24. No con la intención de ejercer su servicio allĆ āv. 24.
āŗ15.22 cananea… Evidentemente, habĆa oĆdo acerca de la esperanza mesiĆ”nica de Israel.
āŗ15.29 se sentó… Lit. se sentaba.
āŗ15.33 los… Mā sus.
āŗ15.37 grandes canastas… Gr. spurĆs āHch. 9.25.
āŗ15.39 MagadĆ”n… Mā MagdalĆ” āMr. 8.10.
Juan 8-9
[[8.1-11]]
La Luz del mundo
12 De nuevo, pues, les habló JESĆS diciendo: Yo soy la Luz del mundo. El que me sigue, no andarĆ” en la tiniebla, sino que tendrĆ” la Luz de la vida. 13 Le dijeron los fariseos: TĆŗ das testimonio acerca de ti mismo. Tu testimonio no es veraz. 14 Respondió JESĆS y les dijo: Aunque Yo dĆ© testimonio acerca de MĆ mismo, mi testimonio es veraz, porque sĆ© de dónde vine y a dónde voy, pero vosotros no sabĆ©is de dónde vengo ni a dónde voy. 15 Vosotros juzgĆ”is segĆŗn la carne; Yo no juzgo a nadie. 16 Y si Yo juzgara, mi juicio es verdadero; porque no estoy solo, sino Yo y el Padre que me envió. 17 Y en vuestra misma ley ha sido escrito que el testimonio de dos hombres es veraz. 18 Yo soy el que doy testimonio de MĆ mismo, y el Padre que me envió da testimonio de MĆ. 19 Y le decĆan: ĀæDónde estĆ” tu padre? JESĆS respondió: Ni me conocĆ©is a MĆ ni a mi Padre; si me conocierais a MĆ, tambiĆ©n conocerĆais a mi Padre.
20 Estas palabras habló en la tesorerĆa, mientras enseƱaba en el templo, pero nadie lo prendió porque aĆŗn no habĆa llegado su hora.
El Eterno
21 Entonces les dijo de nuevo: Yo me voy, y me buscarĆ©is, y en vuestro pecado morirĆ©is. Adonde Yo voy, vosotros no podĆ©is ir. 22 DecĆan entonces los judĆos: ĀæAcaso se matarĆ”, pues dice: A donde Yo voy vosotros no podĆ©is ir? 23 Y les decĆa: Vosotros sois de abajo, Yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, Yo no soy de este mundo. 24 Por eso os dije que en vuestros pecados morirĆ©is. Si no creĆ©is que YO SOY, en vuestros pecados morirĆ©is. 25 Pero ellos le decĆan: TĆŗ, ĀæquiĆ©n eres?Ā JESĆS les dijo: ĀæQuĆ© os digo desde el principio? 26 Muchas cosas tengo que decir y juzgar acerca de vosotros, pero el que me envió es veraz; y lo que Yo he oĆdo de Ćl, esto digo al mundo.
27 (No comprendieron que les hablaba del Padre). 28 Entonces JESĆS dijo: Cuando levantĆ©is al Hijo del Hombre, entonces comprenderĆ©is que YO SOY, y que nada hago de MĆ mismo, sino que segĆŗn me enseñó el Padre, esto hablo. 29 Y el que me envió estĆ” conmigo; no me dejó solo, porque Yo hago siempre lo que le agrada. 30 Hablando estas cosas, muchos creyeron en Ćl.
La verdadera libertad
31 DecĆa, pues, JESĆS a los judĆos que le habĆan creĆdo: Si vosotros permanecĆ©is en mi Palabra, sois verdaderamente mis discĆpulos; 32 y conocerĆ©is la Verdad, y la Verdad os harĆ” libres. 33 Le respondieron: Simiente de Abraham somos, y jamĆ”s hemos sido esclavos de nadie. ĀæCómo dices tĆŗ: SerĆ©is libres?
34 JESĆS les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo el que hace el pecado, es esclavo del pecado. 35 Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo queda para siempre. 36 AsĆ que, si el Hijo os liberta, serĆ©is verdaderamente libres. 37 SĆ© que sois descendencia de Abraham, pero procurĆ”is matarme porque mi Palabra no tiene cabida en vosotros.
Los hijos del diablo
38 Yo hablo lo que he visto en la presencia del Padre, y vosotros hacĆ©is tambiĆ©n lo que oĆsteis del padre. 39 Respondieron y le dijeron: Nuestro padre es Abraham.Ā JESĆS les dice: Si realmente sois hijos de Abraham, las obras de Abraham harĆais. 40 Pero ahora procurĆ”is matarme, hombre que os he hablado la verdad que oĆ de parte de DIOS. No hizo esto Abraham. 41 Vosotros hacĆ©is las obras de vuestro padre. Le dijeron: Nosotros no hemos nacido de fornicación. Un solo padre tenemos: DIOS. 42 JESĆS les dijo: Si DIOS fuera vuestro padre me amarĆais, porque Yo salĆ del Padre y vengo de DIOS. No he venido de MĆ mismo, sino del que me envió.
43 ĀæPor quĆ© no entendĆ©is mi lenguaje? Porque no sois capaces de oĆr mi Palabra. 44 Vosotros sois de vuestro padre, del Diablo, y los deseos de vuestro padre querĆ©is hacer; Ć©l era asesino desde un principio y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en Ć©l. Cuando habla mentira, de lo suyo habla, pues es mentiroso y padre de ella. 45 Pero a MĆ, que digo la verdad, no me creĆ©is. 46 ĀæQuiĆ©n de vosotros me inculpa de pecado? Si digo verdad, Āæpor quĆ© vosotros no me creĆ©is? 47 El que es de DIOS, las palabras de DIOS oye, por esto no oĆs vosotros, porque no sois de DIOS.
Preexistencia de Cristo
48 Respondieron los judĆos, y le dijeron: ĀæNo decimos bien nosotros que tĆŗ eres samaritano y tienes demonio? 49 JESĆS respondió: Yo no tengo demonio, sino que honro a mi Padre y vosotros me deshonrĆ”is. 50 Pero Yo no busco mi gloria; hay quien la busca y juzga. 51 De cierto, de cierto os digo: Si alguno guarda mi Palabra, nunca jamĆ”s verĆ” la muerte. 52 Los judĆos entonces le dijeron: Ahora sabemos que tienes demonio. Abraham murió, tambiĆ©n los profetas; y tĆŗ dices: Si alguno guarda miĀ Palabra, nunca jamĆ”s verĆ” muerte eterna. 53 ĀæEres tĆŗ acaso mayor que nuestro padre Abraham, el cual murió? Ā”TambiĆ©n los profetas murieron! ĀæQuiĆ©n te haces a ti mismo?
54 JESĆS respondió: Si Yo me glorifico a MĆ mismo, mi gloria nada es. Es mi Padre el que me glorifica, el mismo que vosotros decĆs: Es nuestro DIOS. 55 Y no lo habĆ©is conocido, pero Yo lo conozco. Y si dijera que no lo conozco, serĆa semejante a vosotros, un mentiroso; pero Yo lo conozco, y guardo su Palabra. 56 Abraham, vuestro padre, se regocijó de que verĆa mi dĆa, y lo vio, y fue lleno de alegrĆa. 57Ā Entonces le dijeron los judĆos: ĀæAĆŗn no tienes cincuenta aƱos y has visto a Abraham?Ā 58 JESĆS les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham llegara a ser, YO SOY.
59 Tomaron entonces piedras para arrojĆ”rselas, pero JESĆS fue ocultado y salió del templo.
āŗ8.1-11 Los mejores y mĆ”s antiguos mss. omiten este pasaje ā§80.
āŗ8.12 la Luz… āMt 5.14; Jn 9.5.
āŗ8.13 testimonio… āJn 5.31.
āŗ8.16 verdadero… TR registra veraz.
āŗ8.19 le decĆan… El imperfecto indica insistencia.
āŗ8.20 tesorerĆa… O lugar de las ofrendas.
āŗ8.24 YO SOY… āEx 3.14; Dt 32.39; Is 43.10.
āŗ8.25 ĀæQuĆ© os digo… ā§81.
āŗ8.29 No me dejó… Mā aƱaden el Padre.
āŗ8.31 creĆdo… Nótese la construcción del dativo le, distinta del v. 30: en Ćl. Aquellos creyeron en Ćl (lo recibieron); estos solo dieron crĆ©dito a lo que decĆa.
āŗ8.33 Simiente de Abraham… āMt 3.9; Lc 3.8.
āŗ8.34-36 āHe 9.22.
āŗ8.38 del padre… TR registra de vuestro padre.
āŗ8.40 he… ā§78.
āŗ8.43 mi lenguaje… Modo de hablar que exhibe el origen del hablante. Es decir, mediante el cual JesĆŗs puede ser reconocido como venido del cielo ā§220.
āŗ8.44 del diablo… Sustantivo de aposición; de ella… Mā aƱaden mentira.
āŗ8.49 me… ā§78; Jn 7.34.
āŗ8.54 nuestro… TR vuestro. Convierte la frase en discurso indirecto.
āŗ8.56 lo vio… āGn 14.17-20; He 7.1-4.
āŗ8.59 templo… Mā aƱaden y atravesando por en medio de ellos, se fue.
Ā Juan 9
Ā Lodo portentoso
1 Y pasando, vio a un hombre ciego de nacimiento. 2 Y le preguntaron sus discĆpulos, diciendo: RabbĆ, ĀæquiĆ©n pecó, este o sus padres, para que haya nacido ciego? 3 JESĆS respondió: No pecó este ni sus padres, sino para que las obras de DIOS fueran manifestadas en Ć©l. 4 Debemos hacer las obras del que me envió mientras es de dĆa, porque viene la noche cuando nadie puede trabajar; 5 mientras Yo estĆ© en el mundo, soy Luz del mundo.
6 Habiendo dicho esto, escupió en tierra, y con la saliva hizo lodo, y le untó el lodo sobre los ojos, 7 y le dijo: Ve, lĆ”vate en el estanque del SiloĆ© (que traducido es Enviado). AsĆ que fue y se lavó, y regresó viendo. 8 Entonces los vecinos y los que antes lo veĆan (pues era mendigo), decĆan: ĀæNo es este el que se sienta y mendiga? 9 Otros decĆan: Es este. Otros decĆan: No, sino que se parece a Ć©l. Ćl decĆa: Soy yo. 10 Entonces le decĆan: ĀæCómo te fueron restaurados los ojos? 11 Respondió Ć©l: El hombre llamado JESĆS hizo lodo, me untó los ojos y me dijo: Ve al SiloĆ© y lĆ”vate. Fui, pues, me lavĆ©, y recibĆ la vista. 12 Y le dijeron: ĀæDónde estĆ” Ć©l? Dice: No sĆ©.
13 Entonces llevan al que antes era ciego delante de los fariseos, 14 porque el dĆa en que JESĆS hizo el lodo y le restauró los ojos era sĆ”bado. 15 De nuevo pues, le preguntaban tambiĆ©n los fariseos cómo recibió la vista. Y les dijo: Me puso lodo sobre los ojos, me lavĆ©, y veo. 16 Entonces algunos de los fariseos decĆan: Este hombre no procede de DIOS porque no guarda el sĆ”bado. Otros decĆan: ĀæCómo puede un hombre pecador hacer tales seƱales? Y habĆa división entre ellos. 17 Por lo que otra vez dijeron al ciego: ĀæY tĆŗ quĆ© dices de Ć©l, puesto que te restauró los ojos? Ćl dijo: Que es profeta.
18 Pero los judĆos no le creyeron que habĆa sido ciego y habĆa recibido la vista, hasta que, llamando a los padres del que habĆa recibido la vista, 19 les preguntaron, diciendo: ĀæEs este vuestro hijo, el que vosotros decĆs que nació ciego? ĀæCómo pues, ve ahora? 20 Sus padres entonces respondieron y dijeron: Sabemos que este es nuestro hijo, y que nació ciego; 21 pero cómo ve ahora, no lo sabemos; o quiĆ©n le restauró los ojos, no lo sabemos. Preguntadle, edad tiene, Ć©l hablarĆ” por sĆ mismo. 22 Esto dijeron sus padres porque temĆan a los judĆos, por cuanto los judĆos ya habĆan acordado que si alguno lo confesaba como CRISTO, fuera expulsado de la sinagoga. 23 Por esto sus padres dijeron: Edad tiene, preguntadle.
24 Llamaron, pues, por segunda vez al hombre que antes era ciego, y le dijeron: Ā”Da gloria a DIOS! Nosotros sabemos que este hombre es pecador. 25 Entonces Ć©l respondió: Si es pecador, no lo sĆ©; solo una cosa sĆ©: que yo, siendo ciego, ahora veo. 26 Le preguntaron otra vez: ĀæQuĆ© te hizo? ĀæCómo te restauró los ojos? 27 Les respondió: Ya os lo dije y no escuchasteis. ĀæPor quĆ© querĆ©is oĆrlo otra vez? ĀæAcaso tambiĆ©n vosotros querĆ©is llegar a ser sus discĆpulos? 28 Y lo insultaron, y dijeron: Ā”TĆŗ eres discĆpulo suyo, pero nosotros somos discĆpulos de MoisĆ©s! 29 Nosotros sabemos que DIOS ha hablado a MoisĆ©s, pero este, no sabemos de dónde es. 30 Respondió el hombre, y les dijo: Pues en esto hay algo asombroso: que vosotros no sabĆ©is de dónde es, y a mĆ me restauró los ojos.31 Sabemos que DIOS no oye a los pecadores, pero si alguien es temeroso de DIOS y hace su voluntad, a este oye. 32Ā JamĆ”s se oyó que alguien restaurara ojos a uno nacido ciego. 33 Si este no fuera de DIOS, no podrĆa hacer nada. 34 Respondieron y le dijeron: TĆŗ naciste por completo en pecados, Āæy tĆŗ nos enseƱas? Y lo echaron fuera.
Solo a Dios adorarƔs
35 Oyó JESĆS que lo habĆan echado fuera, y hallĆ”ndolo, le dijo: ĀæCrees tĆŗ en el Hijo del Hombre? 36 Respondió Ć©l y dijo: ĀæY quiĆ©n es, seƱor, para que crea en Ćl? 37 JESĆS le dijo: Lo has visto. El que habla contigo, Ćl es. 38 Y Ć©l dijo: Creo, SeƱor. Y lo adoró. 39 JESĆS dijo: Para juicio vine a este mundo, para que los que no ven, vean; y los que ven, lleguen a estar ciegos. 40 Oyeron esto algunos de los fariseos que estaban con Ćl, y le dijeron: ĀæAcaso tambiĆ©n nosotros somos ciegos? 41 Les dijo JESĆS: Si fuerais ciegos, no tendrĆais pecado; pero ahora, porque decĆs: Vemos, vuestro pecado permanece.
āŗ9.4 Debemos… TR registra debo; la noche… Es decir, la potestad de la tiniebla, de SatanĆ”s āEc 9.10.
āŗ9.5 Luz āMt 5.14; Jn 8.12.
āŗ9.6 hizo lodo… ā§82.
āŗ9.8 mendigo… TR registra ciego.
āŗ9.32 JamĆ”s… Lit. desde el siglo; restaurara ojos… ā§82.
āŗ9.35 Hijo del Hombre… TR registra Hijo de Dios.
Efesios 6:1-9.
1 Hijos, obedeced en el SeƱor a vuestros padres, porque esto es justo. 2āHonra a tuĀ padre y a la madre, que es el primer mandamiento con promesa, 3āpara que te vayaĀ bien, y serĆ”s de larga vida sobre la tierra. 4āPadres, no provoquĆ©is a ira a vuestrosĀ hijos, sino criadlos con disciplina y amonestación del SeƱor.
5āEsclavos, obedeced a los amos segĆŗn la carne, con temor y temblor, con sinceridad de corazón, como a CRISTO, 6āno sirviendo al ojo, como los que tratan de agradar a los hombres, sino como esclavos de CRISTO, haciendo la voluntad de DIOS de corazón, 7āsirviendo con buena voluntad, como al SeƱor, y no a los hombres, 8 sabiendo que lo bueno que cada uno haga, eso obtendrĆ” del SeƱor, sea esclavo o sea libre.
9āAmos, haced lo mismo con ellos, abandonando la amenaza, sabiendo que el SeƱor,Ā tanto de ellos como vuestro, estĆ” en los Cielos, y que no hay acepción de personasĀ en su presencia.Ā
āŗ6.1 Hijos… āCol 3.20.
āŗ6.3 āEx 20.12; Dt 5.16.
āŗ6.4 Padres… āCol 3.21.
āŗ6.6 de corazón… LaĀ expresión ek psujĆs es idiomĆ”tica. Residencia de los actos volitivos āCol 3.23-25.
āŗ6.7 sirviendo… Gr. douleĆŗo = servir como o hacer oficio de esclavo.
āŗ6.9Ā Amos… āCol 3.25; 4.1; Dt 10.17.Ā

