Texto áureo: Levítico 13-15
Lecturas para adultos en la semana
Día 1: Levítico 13
Día 2: Levítico 14
Día 3: Levítico 15
Día 4: 2ªReyes 5
Día 5: 2ªReyes 6:24-33
Día 6: 2ªReyes 7-8
I- La impureza y la pureza.
La palabra traducida como ‘lepra’ tzarat (צָרַעַת) en realidad se refiere a una enfermedad en la piel parecida a la lepra, pero que señalaba un problema espiritual que la producía[1]. Esta tzarat señalaba un tipo de impureza.
¿Qué es la impureza espiritual? Ella es la causa y la consecuencia de la separación de Dios. Y esta se puede definir claramente como la permisión de la influencia material desmedida en la persona. La palabra para ‘pureza’ es tohorah y para ‘impureza’ tum´ah, pero se debe entender que su traducción es lo mejor que se puede hacer al español, aunque no es completamente exacta. Para la primera pudiéramos decir que expresa el restablecimiento de la semejanza a la santidad de Dios y lo contrario a tohorah sería entonces la tum´ah. Por eso la única manera de entender ambos conceptos hoy es cuando se ha experimentado la limpieza del corazón hecha por Dios en el creyente; fuera de ahí solo se puede explicar abstractamente a través de los símbolos de estos pasajes áureos de la porción.
La impureza más grande descrita aquí es la muerte, por eso requería de sacrificios más valiosos. Esto representa que el pecado o muerte espiritual es la impureza más grande (Ro 3:23; 6:3; Jn 15:5). De ahí que cuando se habla de salir del campamento está representando que también la impureza aleja al hombre de la santidad de Dios.
Algo importante que se debe entender aquí es que el hecho de que la mujer necesitara más días para su purificación al dar a luz a una niña no tiene que ver con machismo, como algunos pudieran pensar a priori, sino que tiene que ver con un símbolo de respeto a quien procrea directamente, con esfuerzo y peligro para su vida.
II- La mala interpretación de la impureza.
Siglos después, cuando Pedro reconoce que la visión del lienzo con aquellos animales inmundos había sido para enseñarle que «a ningún hombre llamase común o inmundo» (Hch 10), es porque bajo la perspectiva farisea de aquel primer siglo se le estaba llamando a los gentiles como mismo se le llamaba a lo impuros. Esta porción nos muestra lo claro que Dios había dejado acerca de qué era inmundo y qué no, por lo que la tradición oral de ellos que había transferido este concepto de lo que era un animal impuro al gentil, desviaba completamente el sentido original del mandamiento.
En realidad, lo que hacía diferente a un gentil de un israelita era el encargo que Dios les había hecho con respecto a su verdad, pero no en la naturaleza de ambos. En realidad, todos los seres humanos están destituidos de la gloria de Dios por el pecado que mora en ellos (Ro 3:23; 5:12).
Preguntas:
1.- ¿Qué cree usted que representen las dos avecillas que aparecen en esta porción?
2.- Investigue en qué lugares salían las manchas blancas. ¿Qué cree usted que representa esa mancha en esos lugares?
3.- ¿Por qué cree usted que Dios escogió esta “lepra” para señalar al chismoso o al orgulloso?
4.- A la luz de la frase «somos templo del Espíritu Santo», ¿cómo pudiera interpretar usted toda esta porción?
[1] Algunos comentaristas sugieren que la raíz de esta palabra significa ‘hablar mal de otra persona’, pero esto es algo que no se puede definir o confirmar ciento por ciento. Sin embargo, sí se puede decir que es una de las causas (Nm 12), como también lo es el orgullo (2aR 5-7).
Levítico 13-15
Ley sobre la lepra
1 Habló YHVH a Moisés y a Aarón, diciendo: 2 Cuando un hombre tenga en la piel de su carne hinchazón, erupción, mancha blanca, y se convierta en llaga de lepra en la piel de su carne, será llevado al sacerdote Aarón, o a uno de sus hijos los sacerdotes. 3 Y el sacerdote examinará la llaga en la piel de la carne: si el vello que hay en la llaga se ha vuelto blanco, y la llaga aparece más hundida que la piel de su carne, es llaga de lepra. El sacerdote lo reconocerá y lo declarará inmundo. 4 Y si en la piel de su carne hay una mancha blanca, pero no parece más hundida que la piel, ni su vello se ha vuelto blanco, el sacerdote hará que el llagado sea recluido durante siete días. 5 Al séptimo día el sacerdote lo examinará, y he aquí, si ante sus ojos la llaga ha permanecido estacionaria, sin extenderse la llaga en la piel, el sacerdote lo volverá a hacer recluir por otros siete días. 6 Al séptimo día el sacerdote lo examinará de nuevo, y si, he aquí, la llaga se ha oscurecido y no se ha esparcido en la piel, el sacerdote lo declarará limpio: es una erupción. Lavará entonces sus vestidos y quedará limpio. 7 Pero si, variando de pronto, la erupción se esparce sobre la piel, después de haberlo visto el sacerdote para su purificación, comparecerá por segunda vez ante el sacerdote.
8 El sacerdote le hará un examen, y si la erupción se ha esparcido en la piel, el sacerdote lo declarará inmundo: es lepra. 9 Cuando haya llaga de lepra en un hombre, será llevado al sacerdote, 10 y el sacerdote lo examinará, y si, he aquí, una hinchazón blanca en la piel y el vello se ha vuelto blanco y se descubre la carne viva, 11 es lepra crónica en la piel de su carne. El sacerdote lo declarará inmundo y lo hará recluir, porque está inmundo. 12 Pero si la lepra brota mucho y cubre toda la piel del infectado, desde su cabeza hasta sus pies, a vista del sacerdote, 13 el sacerdote observará, y si la lepra ha cubierto toda su carne, declarará limpio al llagado; toda ella se ha vuelto blanca, y él es limpio; 14 pero el día que sea vista en él carne viva, entonces quedará impuro. 15 El sacerdote examinará la carne viva, y lo declarará impuro. La carne viva es impura, es lepra. 16 Pero si la carne viva llegara a cambiar, y se torna blanca, entonces irá al sacerdote, 17 y el sacerdote lo examinará, y si la llaga se ha tornado blanca, entonces el sacerdote declarará puro al llagado: está limpio.
18 Cuando un cuerpo tenga una úlcera en su piel, que haya sido sanada, 19 pero surge en el lugar de la úlcera una hinchazón blanca o una mancha lustrosa blanca rojiza, será observada por el sacerdote. 20 El sacerdote la examinará, y he aquí, si parece más hundida que la piel y el vello se ha vuelto blanco, el sacerdote lo declarará impuro: es lepra que ha brotado en la úlcera. 21 Pero si el sacerdote la examina, y he aquí, no hay en ella vello blanco ni está más hundida que la piel, y ha perdido color, entonces el sacerdote lo hará recluir siete días, 22 y si se esparce mucho en la piel, el sacerdote lo declarará impuro: es infección. 23 Pero si la mancha lustrosa se mantiene fija, sin que haya sido esparcida, es cicatriz de la úlcera, y el sacerdote lo declarará limpio. 24 O si la carne tiene en su piel una quemadura de fuego, y en lo sanado de la quemadura tiene una mancha blanquecina, rojiza, o blanca, 25 el sacerdote la examinará, y si el vello que hay en la mancha lustrosa se ha vuelto blanco, y parece estar más hundida que la piel, es lepra que ha brotado en la quemadura. El sacerdote lo declarará impuro: es llaga de lepra. 26 Pero si el sacerdote la observa, y he aquí no aparece vello blanco en la mancha lustrosa, ni está más hundida que la piel sino que ha palidecido, el sacerdote lo hará recluir siete días. 27 Al séptimo día el sacerdote lo examinará. Si está esparcida considerablemente por la piel, el sacerdote lo declarará impuro: es llaga de lepra. 28 Pero si la mancha lustrosa se queda fija, no está esparcida por la piel, y ha perdido color, es hinchazón de la quemadura. El sacerdote lo declarará limpio porque es la costra de la quemadura.
29 Cuando un hombre o una mujer tenga una llaga en la cabeza o en la barbilla, 30 el sacerdote examinará la llaga, y si parece más hundida que la piel y su vello es cano y delgado, entonces el sacerdote lo declarará impuro. Es tiña: lepra de cabeza o barbilla. 31 Pero si el sacerdote examina la infección de la tiña, y he aquí, no parece más hundida que la piel, y no hay en ella vello cano, el sacerdote hará recluir al infectado de la tiña siete días. 32 Al séptimo día el sacerdote examinará la infección, y si, he aquí, la tiña no está esparcida ni hay en ella pelo cano, ni la tiña parece más profunda que la piel, 33 será afeitado (pero no será afeitada la tiña), y el sacerdote hará recluir al tiñoso siete días más. 34 Al séptimo día el sacerdote examinará la tiña, y he aquí, si después de afeitado, la tiña no está esparcida por la piel ni parece más hundida que la piel, entonces el sacerdote lo declarará limpio. Lavará sus vestidos y será limpio. 35 Pero si, ciertamente, la tiña está extendida en la piel después de ser purificado, 36 entonces el sacerdote lo examinará, y si he aquí, la tiña está extendida en la piel, el sacerdote no tendrá que buscar el pelo cano: es impuro. 37 Pero si a su parecer la tiña está detenida y ha crecido en ella vello negro, la tiña está sanada. Está limpio, y el sacerdote lo declarará limpio. 38 Cuando un hombre o una mujer tenga en la piel de su carne manchas lustrosas, manchas blancas lustrosas, 39 el sacerdote lo examinará; y si en la piel de su carne hay manchas blanquecinas, es un eczema que brotó en la piel: él está limpio.
40 Cuando a un varón se le cae el pelo de su cabeza, calvo es, pero limpio. 41 Asimismo, si se le cae por delante de su cabeza, calvo es de la frente, pero limpio. 42 Pero si en la calva de la coronilla, o en la calva de la frente hay una llaga blanca rojiza, es lepra que está en su coronilla o en su frente calva. 43 El sacerdote lo examinará, y si la hinchazón de la llaga blanca rojiza de su coronilla o de su frente calva es como el aspecto de la lepra en la piel de la carne, 44 él es hombre leproso. El sacerdote lo declarará impuro: tiene la llaga en su cabeza. 45 Y el leproso, en quien está la llaga: que sus vestidos sean desgarrados y su cabeza descubierta y se ponga algo alrededor de su boca, y será llamado impuro. 46 Permanecerá impuro todo el tiempo que tenga la llaga. Siendo impuro, morará solo. Su morada estará fuera del campamento.
47 Cuando haya infección de lepra en la ropa, sea ropa de lana o ropa de lino, 48 en tejido o en punto, sea de lino o de lana, en cuero o en cualquier objeto hecho de cuero, 49 y la mancha se muestra verdosa o rojiza, sea en vestido, o en cuero, o en tejido, o en punto, o en cualquier objeto hecho de cuero, es infección de lepra, y se ha de mostrar al sacerdote. 50 El sacerdote observará la infección y hará aislar lo infectado durante siete días. 51 Al séptimo día observará la infección, y si la infección está esparcida por el vestido, o por el tejido, o por el punto, o por el cuero, cualquiera que sea el uso del cuero, la infección es una lepra maligna. Es impuro. 52 Y quemará el vestido o el tejido, o el punto de lana o de lino, o cualquier objeto de cuero infectado, porque es lepra maligna. Será quemado al fuego. 53 Pero si el sacerdote lo examina y he aquí la infección no está extendida en el vestido, o el tejido, o el punto, o en cualquier objeto de cuero, 54 el sacerdote ordenará que laven lo que tiene la infección, y lo hará aislar siete días más.
55 Después que el objeto infectado haya sido lavado, el sacerdote lo examinará, y si he aquí la mancha no ha cambiado ante sus ojos, aunque no esté extendida, es impuro. Ya sea que esté corroído por el derecho o por el revés, será quemado en el fuego. 56 Pero si el sacerdote lo examina, y he aquí la mancha se ha debilitado después de ser lavada, la cortará del vestido, o del cuero, o del tejido, o del punto. 57 Pero si reaparece en el vestido o en el tejido, o en el punto, o en cualquier objeto de cuero, se está esparciendo. Aquello en lo cual está la infección será quemado al fuego. 58 El vestido, o tejido, o el punto, o cualquier objeto de cuero que hayas lavado y la mancha haya sido removida de ellos, entonces será lavado por segunda vez, y quedará limpio. 59 Esta es la ley acerca de la mancha de la lepra en un vestido de lana, o de lino, bien sea en tejido o trama, o en cualquier objeto de cuero, para declararlo limpio o para declararlo impuro.
►13.2 hinchazón… TM repite o… o. Se sigue LXX →§194.
►13.6 oscurecido… Lit. debilitado.
►13.11 está inmundo… TM: no está inmundo (!). Se sigue LXX.
►13.12 vista… TM añade plena. Se sigue LXX →§194.
►13.18 tenga… TM añade en él. Se sigue LXX →§194.
►13.20 es… TM añade llaga. Se sigue LXX →§194.
►13.23 haya sido esparcida… TM utiliza la voz activa. Se sigue LXX.
►13.31 cano… TM registra negro. Se sigue LXX.
►13.42 está… TM añade brotando. Se sigue LXX →§194.
►13.44 leproso… TM añade es inmundo. Se sigue LXX →§194.
►13.45 su cabeza… TM añade llegará a estar y repite impuro (?). Se sigue LXX →§194.
Levítico 14
El día de la purificación del leproso
1 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 2 Esta es la ley para el leproso el día que sea purificado: Será traído al sacerdote, 3 y el sacerdote saldrá fuera del campamento, y si al examinarlo el sacerdote, he aquí, la llaga de lepra es quitada del leproso, 4 el sacerdote ordenará que se tomen dos avecillas vivas limpias y madera de cedro, púrpura e hisopo para el que está siendo purificado. 5 Luego el sacerdote ordenará que se degüelle la primera avecilla en una vasija de barro sobre aguas vivas. 6 Tomará la avecilla viva, con el palo de cedro, la púrpura y el hisopo, y los sumergirá con la avecilla viva en la sangre de la avecilla degollada sobre las aguas vivas, 7 y rociará siete veces sobre el que fue purificado de la lepra y lo declarará limpio. Luego dejará ir a la avecilla viva sobre la faz del campo. 8 El que fue purificado lavará sus vestidos, todo su cabello será rasurado, se bañará con agua, y quedará limpio. Después entrará en el campamento, pero permanecerá fuera de su tienda siete días.
9 Al séptimo día será rasurado todo su cabello: de su cabeza, de su barba y de sus cejas, es decir, será rasurado todo su cabello, lavará sus vestidos, y bañará su cuerpo con agua, y quedará limpio.
10 Al octavo día tomará dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto, tres décimas de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal y un log de aceite. 11 Y el sacerdote que está purificando hará poner de pie ante la presencia de YHVH al hombre que es purificado, junto con estas cosas, en la entrada de la tienda de reunión. 12 Luego el sacerdote tomará uno de los corderos, y lo presentará como ofrenda por la culpa, con el log de aceite, y los mecerá como ofrenda mecida ante la presencia de YHVH. 13 Enseguida degollará el cordero en el lugar donde se degüella el sacrificio por el pecado y el holocausto, en el lugar del santuario, pues la ofrenda por el pecado, al igual que la ofrenda por la culpa, pertenece al sacerdote. Es cosa santísima. 14 El sacerdote tomará de la sangre de la ofrenda por la culpa, y untará el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, y el pulgar de su mano derecha, y el dedo gordo de su pie derecho.
15 El sacerdote tomará del log de aceite y lo verterá en su palma izquierda, 16 y untando su dedo derecho en el aceite que está en su palma izquierda, rociará siete veces delante de YHVH.
17 Del resto del aceite que está en su palma, el sacerdote untará una parte sobre el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, el pulgar de su mano derecha y el dedo gordo de su pie derecho, por encima de la sangre de la ofrenda por la culpa. 18 El resto del aceite que está en la palma del sacerdote lo pondrá en la cabeza del que es purificado, y el sacerdote hará expiación a favor de él en presencia de YHVH. 19 Luego el sacerdote preparará la ofrenda por el pecado y hará expiación por el que es purificado de su impureza, el cual después degollará el holocausto. 20 Y el sacerdote hará subir el holocausto y la ofrenda vegetal sobre el altar. Así el sacerdote hará expiación por él, y quedará limpio.
21 Pero si es pobre, y su mano no alcanza a tanto, entonces tomará un cordero para ser mecido como ofrenda por la culpa, para hacer expiación a favor de él, y una décima de efa de flor de harina, amasada con aceite, como ofrenda vegetal, y un log de aceite. 22 También dos tórtolas o dos palominos, según alcance su mano. Uno será para expiación por el pecado y otro para holocausto. 23 Al octavo día los hará llevar al sacerdote para su purificación a la entrada de la tienda de reunión, en presencia de YHVH. 24 Y el sacerdote tomará el cordero de la ofrenda por la culpa, y el log de aceite, y los mecerá como ofrenda mecida en presencia de YHVH.
25 Después degollará el cordero del sacrificio por la culpa, y el sacerdote tomará de la sangre de la expiación y untará en el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, y en el pulgar de su mano derecha y en el dedo gordo de su pie derecho. 26 Y el sacerdote echará del aceite sobre su propia palma izquierda, 27 y con su dedo derecho el sacerdote hará aspersión del aceite que tiene en su palma izquierda siete veces ante YHVH. 28 Luego el sacerdote aplicará parte del aceite que tiene en su palma sobre el lóbulo de la oreja derecha del que está siendo purificado, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el dedo gordo de su pie derecho, encima del lugar donde se puso la sangre de la ofrenda por la culpa. 29 Y el resto del aceite que está sobre la palma del sacerdote, lo pondrá sobre la cabeza del que es purificado, para hacer expiación a favor de él en presencia de YHVH.
30 Y ofrecerá la primera de las tórtolas o de los palominos, de lo que alcance su mano. 31 La primera víctima en ofrenda por el pecado y la otra como holocausto, junto con la ofrenda vegetal. Y el sacerdote hará expiación a favor del que es purificado, en presencia de YHVH.
32 Esta es la ley para el que haya tenido llaga de lepra y que su mano no alcance a tanto para su purificación.
La lepra de la casa
33 YHVH habló a Moisés y a Aarón, diciendo: 34 Cuando entréis en la tierra de Canaán, la cual Yo os doy en propiedad, y Yo ponga una llaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra propiedad, 35 aquel de quien es la casa irá a dar aviso al sacerdote, diciendo: Algo como una plaga ha sido vista en mi casa. 36 Entonces el sacerdote ordenará desocupar la casa antes de que entre a mirar la infección, para que no sea contaminado todo lo que esté en la casa; después el sacerdote entrará a examinarla. 37 Observará la mancha, y si en las paredes de la casa hay manchas verdosas o rojizas que parezcan más hundidas que la pared, 38 el sacerdote saldrá a la puerta de la casa y hará cerrar la casa por siete días. 39 Al séptimo día, el sacerdote volverá y observará, y he aquí, si la infección está extendida por las paredes de la casa, 40 el sacerdote ordenará que arranquen las piedras que tengan la infección, y las echarán fuera de la ciudad en un lugar impuro.
41 Después hará raspar la casa por dentro en derredor, y el polvo lo echarán fuera de la ciudad en un lugar impuro. 42 Luego tomarán otras piedras y las pondrán en lugar de las piedras quitadas, y se tomará otra mezcla para revocar la casa. 43 Pero si, después de ser quitadas las piedras, y raspada y revocada la casa, la infección irrumpe otra vez en la casa, 44 el sacerdote observará, y he aquí la mancha extendida por la casa, hay lepra maligna en la casa: está impura. 45 Derribará la casa con sus piedras y sus maderos y todo el polvo, y lo sacará fuera de la ciudad a un lugar impuro. 46 El que entre en la casa durante los días en que estuvo cerrada, quedará impuro hasta la tarde. 47 Y el que se acueste en aquella casa, lavará sus vestidos, y el que coma en la casa, lavará sus vestidos.
48 Pero si el sacerdote entra y observa, y he aquí, en verdad la infección no está extendida por la casa después de ser revocada, el sacerdote declarará limpia la casa, pues la infección ha desaparecido. 49 Para purificar la casa, tomará dos avecillas, y madera de cedro, escarlata e hisopo, 50 y degollará una de las avecillas en una vasija de barro, sobre aguas vivas. 51 Tomará la madera de cedro, el hisopo y la escarlata, junto con la avecilla viva, y los sumergirá en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas vivas, y rociará la casa siete veces.
52 Así purificará la casa con la sangre de la avecilla, y con las aguas vivas y con la avecilla viva, con la madera de cedro, con el hisopo y la escarlata. 53 Luego dejará ir la avecilla viva fuera de la ciudad sobre la faz del campo. Así hará expiación por la casa, y será limpia. 54 Esta es la ley acerca de cualquier infección de lepra y de tiña, 55 de la lepra del vestido y de la casa, 56 acerca de la hinchazón, de la costra y las manchas blancas lustrosas, 57 para declarar en qué día algo es impuro y en qué día será purificado. Esta es la ley sobre la lepra.
►14.2 Y esta… TM añade será. Se sigue LXX →§194.
►14.4 está siendo purificado… TM registra voz media. Se sigue LXX →§32.
►14.5 aguas vivas… Esto es, aguas corrientes.
►14.7-8 fue purificado… LXX usa pasiva →§32.
►14.10 una cordera… TM registra otra cría. Se sigue LXX; log… Medida de capacidad de un poco más de un cuarto de litro.
►14.13 degollará… Esto es, el que es purificado.
►14.16 untado… rociará… TM añade el sacerdote… con aceite… con su dedo. Se sigue LXX →§194.
►14.24 mecerá… TM añade el sacerdote. Se sigue LXX →§194.
►14.25 degollará… Esto es, el oferente.
►14.31 víctima… TM añade lo que alcance su mano. Se sigue LXX →§194.
►14.37 y si… TM añade he aquí infección. Se sigue LXX →§194.
►14.41 el polvo… TM añade que raspen. Se sigue LXX →§194.
►14.45 el polvo… TM añade de la casa. Se sigue LXX →§194.
►14.48 desaparecido… Lit. fue sanada.
►14.49 tomará… Esto es, el dueño de casa.
Levítico 15
Impurezas sexuales
1 Habló YHVH a Moisés y a Aarón, y les dijo: 2 Hablad a los hijos de Israel y decidles: Cualquier varón, cuando emita flujo seminal de su miembro viril, quedará impuro a causa de su flujo, 3 y esta la ley sobre la impureza por su flujo, sea que su miembro emita su flujo o que esté obstruido por su flujo: él tendrá su impureza. 4 Cualquier lecho en que se acueste quien padezca gonorrea, quedará impuro, y todo aquello sobre lo cual se siente, impuro quedará. 5 Cualquiera que toque su lecho, habrá de lavar sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 6 Cualquiera que se siente sobre cualquier objeto en que se haya sentado el que padece gonorrea, deberá lavar sus vestidos, se bañará en agua y permanecerá impuro hasta la tarde.
7 Asimismo, cualquiera que toque el cuerpo del que padece gonorrea, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 8 Y si el que tiene gonorrea escupe sobre el que está limpio, entonces este lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 9 Cualquier montura sobre la que cabalgue el que tiene gonorrea, será impura. 10 Y cualquiera que toque cualquier cosa que haya estado debajo de él, quedará impuro hasta la tarde, y el que la transporte, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 11 Todo aquel a quien toque el que tiene gonorrea, sin haberse lavado las manos en agua, habrá de lavar sus vestidos y bañarse. Y quedará impuro hasta la tarde. 12 La vasija de barro que toque quien padece gonorrea, será quebrada, pero todo utensilio de madera será lavado con agua.
13 Cuando el que padece gonorrea sea limpiado de su flujo, él mismo contará siete días desde su purificación, lavará sus vestidos y bañará su cuerpo en agua, y quedará limpio. 14 Al octavo día tomará dos tórtolas o dos palominos, y comparecerá ante YHVH, a la entrada de la tienda de reunión, y los entregará al sacerdote. 15 El sacerdote los ofrecerá, el uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto. Así el sacerdote hará expiación por él delante de YHVH a causa de su flujo. 16 El varón que tenga espermatorrea, lavará en agua todo su cuerpo y permanecerá impuro hasta la tarde. 17 Cualquier vestido o cuero sobre el cual haya caído semen, será lavado con agua y quedará impuro hasta la tarde. 18 Si un varón se acuesta con una mujer y hay efusión seminal, ambos se lavarán con agua y serán impuros hasta la tarde.
19 Cuando una mujer tenga flujo de sangre, que sea el flujo regular de su cuerpo, permanecerá siete días en su impureza legal, y cualquiera que la toque quedará impuro hasta la tarde. 20 Todo aquello sobre lo cual se acueste durante su impureza, quedará impuro, y todo aquello encima de lo cual se siente, será impuro. 21 Cualquiera que toque el lecho de ella, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 22 Asimismo todo el que toque cualquier objeto sobre el cual ella se haya sentado, deberá lavar sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 23 Y si hubiere alguna cosa encima del lecho o encima del objeto sobre el cual ella se haya sentado, al tocarlo uno quedará impuro hasta la tarde.
24 Si un hombre yace con ella aun así, y su menstruo se vierte sobre él, quedará impuro por siete días, y toda cama sobre la que él se acueste será impura. 25 Y si una mujer padece flujo de sangre por muchos días, sin ser tiempo de su menstruo, o cuando tenga flujo pasado su período, todos los días de ese flujo impuro, será impura como en los días de su menstruación.
26 Todo lecho en que se acueste durante todos los días de su flujo, le será como el lecho de su menstruación, y todo aquello sobre lo cual se siente, quedará impuro como en la impureza de su menstruación. 27 Y cualquiera que toque estas cosas quedará impuro, tendrá que lavar sus vestidos y bañarse en agua, y quedará impuro hasta la tarde. 28 Y si estuviera limpia de su flujo, entonces contará para sí siete días, y después quedará purificada.
29 Al octavo día tomará consigo dos tórtolas o dos palominos, y los llevará al sacerdote, a la entrada de la tienda de reunión. 30 El sacerdote preparará el uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto. Así el sacerdote hará expiación por ella delante de YHVH a causa del flujo de su impureza.
31 Y así, pues, mantendréis separados de sus impurezas a los hijos de Israel, para que no mueran por sus impurezas, al contaminar mi tabernáculo, que está en medio de ellos. 32 Tal es la ley tanto para el que padece gonorrea, como para el que tiene espermatorrea que lo haga impuro; 33 para la impura en su período menstrual, para quien padece flujo, sea varón o hembra, y para el hombre que cohabita con mujer impura.
►15.2 flujo seminal… Esto es, secreción mucosa de la uretra producida por enfermedades venéreas, tal como gonorrea →v. 7.
►15.3 y esta… TM añade será. Se sigue LXX →§194.
►15.7 gonorrea… LXX gonoruos, de donde procede la palabra gonorrea. Se trata, pues, de una secreción infecciosa altamente contagiosa.
►15.11 bañarse… TM añade en agua. Se sigue LXX →§194.
►15.13 agua… TM añade viva (corriente). Se sigue LXX →§194.
►15.16 espermatorrea… Esto es, derrame involuntario del semen separado del acto sexual; cuerpo… Lit. carne.
Levítico 13-15
Ley sobre la lepra
1 Habló YHVH a Moisés y a Aarón, diciendo: 2 Cuando un hombre tenga en la piel de su carne hinchazón, erupción, mancha blanca, y se convierta en llaga de lepra en la piel de su carne, será llevado al sacerdote Aarón, o a uno de sus hijos los sacerdotes. 3 Y el sacerdote examinará la llaga en la piel de la carne: si el vello que hay en la llaga se ha vuelto blanco, y la llaga aparece más hundida que la piel de su carne, es llaga de lepra. El sacerdote lo reconocerá y lo declarará inmundo. 4 Y si en la piel de su carne hay una mancha blanca, pero no parece más hundida que la piel, ni su vello se ha vuelto blanco, el sacerdote hará que el llagado sea recluido durante siete días. 5 Al séptimo día el sacerdote lo examinará, y he aquí, si ante sus ojos la llaga ha permanecido estacionaria, sin extenderse la llaga en la piel, el sacerdote lo volverá a hacer recluir por otros siete días. 6 Al séptimo día el sacerdote lo examinará de nuevo, y si, he aquí, la llaga se ha oscurecido y no se ha esparcido en la piel, el sacerdote lo declarará limpio: es una erupción. Lavará entonces sus vestidos y quedará limpio. 7 Pero si, variando de pronto, la erupción se esparce sobre la piel, después de haberlo visto el sacerdote para su purificación, comparecerá por segunda vez ante el sacerdote.
8 El sacerdote le hará un examen, y si la erupción se ha esparcido en la piel, el sacerdote lo declarará inmundo: es lepra. 9 Cuando haya llaga de lepra en un hombre, será llevado al sacerdote, 10 y el sacerdote lo examinará, y si, he aquí, una hinchazón blanca en la piel y el vello se ha vuelto blanco y se descubre la carne viva, 11 es lepra crónica en la piel de su carne. El sacerdote lo declarará inmundo y lo hará recluir, porque está inmundo. 12 Pero si la lepra brota mucho y cubre toda la piel del infectado, desde su cabeza hasta sus pies, a vista del sacerdote, 13 el sacerdote observará, y si la lepra ha cubierto toda su carne, declarará limpio al llagado; toda ella se ha vuelto blanca, y él es limpio; 14 pero el día que sea vista en él carne viva, entonces quedará impuro. 15 El sacerdote examinará la carne viva, y lo declarará impuro. La carne viva es impura, es lepra. 16 Pero si la carne viva llegara a cambiar, y se torna blanca, entonces irá al sacerdote, 17 y el sacerdote lo examinará, y si la llaga se ha tornado blanca, entonces el sacerdote declarará puro al llagado: está limpio.
18 Cuando un cuerpo tenga una úlcera en su piel, que haya sido sanada, 19 pero surge en el lugar de la úlcera una hinchazón blanca o una mancha lustrosa blanca rojiza, será observada por el sacerdote. 20 El sacerdote la examinará, y he aquí, si parece más hundida que la piel y el vello se ha vuelto blanco, el sacerdote lo declarará impuro: es lepra que ha brotado en la úlcera. 21 Pero si el sacerdote la examina, y he aquí, no hay en ella vello blanco ni está más hundida que la piel, y ha perdido color, entonces el sacerdote lo hará recluir siete días, 22 y si se esparce mucho en la piel, el sacerdote lo declarará impuro: es infección. 23 Pero si la mancha lustrosa se mantiene fija, sin que haya sido esparcida, es cicatriz de la úlcera, y el sacerdote lo declarará limpio. 24 O si la carne tiene en su piel una quemadura de fuego, y en lo sanado de la quemadura tiene una mancha blanquecina, rojiza, o blanca, 25 el sacerdote la examinará, y si el vello que hay en la mancha lustrosa se ha vuelto blanco, y parece estar más hundida que la piel, es lepra que ha brotado en la quemadura. El sacerdote lo declarará impuro: es llaga de lepra. 26 Pero si el sacerdote la observa, y he aquí no aparece vello blanco en la mancha lustrosa, ni está más hundida que la piel sino que ha palidecido, el sacerdote lo hará recluir siete días. 27 Al séptimo día el sacerdote lo examinará. Si está esparcida considerablemente por la piel, el sacerdote lo declarará impuro: es llaga de lepra. 28 Pero si la mancha lustrosa se queda fija, no está esparcida por la piel, y ha perdido color, es hinchazón de la quemadura. El sacerdote lo declarará limpio porque es la costra de la quemadura.
29 Cuando un hombre o una mujer tenga una llaga en la cabeza o en la barbilla, 30 el sacerdote examinará la llaga, y si parece más hundida que la piel y su vello es cano y delgado, entonces el sacerdote lo declarará impuro. Es tiña: lepra de cabeza o barbilla. 31 Pero si el sacerdote examina la infección de la tiña, y he aquí, no parece más hundida que la piel, y no hay en ella vello cano, el sacerdote hará recluir al infectado de la tiña siete días. 32 Al séptimo día el sacerdote examinará la infección, y si, he aquí, la tiña no está esparcida ni hay en ella pelo cano, ni la tiña parece más profunda que la piel, 33 será afeitado (pero no será afeitada la tiña), y el sacerdote hará recluir al tiñoso siete días más. 34 Al séptimo día el sacerdote examinará la tiña, y he aquí, si después de afeitado, la tiña no está esparcida por la piel ni parece más hundida que la piel, entonces el sacerdote lo declarará limpio. Lavará sus vestidos y será limpio. 35 Pero si, ciertamente, la tiña está extendida en la piel después de ser purificado, 36 entonces el sacerdote lo examinará, y si he aquí, la tiña está extendida en la piel, el sacerdote no tendrá que buscar el pelo cano: es impuro. 37 Pero si a su parecer la tiña está detenida y ha crecido en ella vello negro, la tiña está sanada. Está limpio, y el sacerdote lo declarará limpio. 38 Cuando un hombre o una mujer tenga en la piel de su carne manchas lustrosas, manchas blancas lustrosas, 39 el sacerdote lo examinará; y si en la piel de su carne hay manchas blanquecinas, es un eczema que brotó en la piel: él está limpio.
40 Cuando a un varón se le cae el pelo de su cabeza, calvo es, pero limpio. 41 Asimismo, si se le cae por delante de su cabeza, calvo es de la frente, pero limpio. 42 Pero si en la calva de la coronilla, o en la calva de la frente hay una llaga blanca rojiza, es lepra que está en su coronilla o en su frente calva. 43 El sacerdote lo examinará, y si la hinchazón de la llaga blanca rojiza de su coronilla o de su frente calva es como el aspecto de la lepra en la piel de la carne, 44 él es hombre leproso. El sacerdote lo declarará impuro: tiene la llaga en su cabeza. 45 Y el leproso, en quien está la llaga: que sus vestidos sean desgarrados y su cabeza descubierta y se ponga algo alrededor de su boca, y será llamado impuro. 46 Permanecerá impuro todo el tiempo que tenga la llaga. Siendo impuro, morará solo. Su morada estará fuera del campamento.
47 Cuando haya infección de lepra en la ropa, sea ropa de lana o ropa de lino, 48 en tejido o en punto, sea de lino o de lana, en cuero o en cualquier objeto hecho de cuero, 49 y la mancha se muestra verdosa o rojiza, sea en vestido, o en cuero, o en tejido, o en punto, o en cualquier objeto hecho de cuero, es infección de lepra, y se ha de mostrar al sacerdote. 50 El sacerdote observará la infección y hará aislar lo infectado durante siete días. 51 Al séptimo día observará la infección, y si la infección está esparcida por el vestido, o por el tejido, o por el punto, o por el cuero, cualquiera que sea el uso del cuero, la infección es una lepra maligna. Es impuro. 52 Y quemará el vestido o el tejido, o el punto de lana o de lino, o cualquier objeto de cuero infectado, porque es lepra maligna. Será quemado al fuego. 53 Pero si el sacerdote lo examina y he aquí la infección no está extendida en el vestido, o el tejido, o el punto, o en cualquier objeto de cuero, 54 el sacerdote ordenará que laven lo que tiene la infección, y lo hará aislar siete días más.
55 Después que el objeto infectado haya sido lavado, el sacerdote lo examinará, y si he aquí la mancha no ha cambiado ante sus ojos, aunque no esté extendida, es impuro. Ya sea que esté corroído por el derecho o por el revés, será quemado en el fuego. 56 Pero si el sacerdote lo examina, y he aquí la mancha se ha debilitado después de ser lavada, la cortará del vestido, o del cuero, o del tejido, o del punto. 57 Pero si reaparece en el vestido o en el tejido, o en el punto, o en cualquier objeto de cuero, se está esparciendo. Aquello en lo cual está la infección será quemado al fuego. 58 El vestido, o tejido, o el punto, o cualquier objeto de cuero que hayas lavado y la mancha haya sido removida de ellos, entonces será lavado por segunda vez, y quedará limpio. 59 Esta es la ley acerca de la mancha de la lepra en un vestido de lana, o de lino, bien sea en tejido o trama, o en cualquier objeto de cuero, para declararlo limpio o para declararlo impuro.
►13.2 hinchazón… TM repite o… o. Se sigue LXX →§194.
►13.6 oscurecido… Lit. debilitado.
►13.11 está inmundo… TM: no está inmundo (!). Se sigue LXX.
►13.12 vista… TM añade plena. Se sigue LXX →§194.
►13.18 tenga… TM añade en él. Se sigue LXX →§194.
►13.20 es… TM añade llaga. Se sigue LXX →§194.
►13.23 haya sido esparcida… TM utiliza la voz activa. Se sigue LXX.
►13.31 cano… TM registra negro. Se sigue LXX.
►13.42 está… TM añade brotando. Se sigue LXX →§194.
►13.44 leproso… TM añade es inmundo. Se sigue LXX →§194.
►13.45 su cabeza… TM añade llegará a estar y repite impuro (?). Se sigue LXX →§194.
Levítico 14
El día de la purificación del leproso
1 Habló YHVH a Moisés, diciendo: 2 Esta es la ley para el leproso el día que sea purificado: Será traído al sacerdote, 3 y el sacerdote saldrá fuera del campamento, y si al examinarlo el sacerdote, he aquí, la llaga de lepra es quitada del leproso, 4 el sacerdote ordenará que se tomen dos avecillas vivas limpias y madera de cedro, púrpura e hisopo para el que está siendo purificado. 5 Luego el sacerdote ordenará que se degüelle la primera avecilla en una vasija de barro sobre aguas vivas. 6 Tomará la avecilla viva, con el palo de cedro, la púrpura y el hisopo, y los sumergirá con la avecilla viva en la sangre de la avecilla degollada sobre las aguas vivas, 7 y rociará siete veces sobre el que fue purificado de la lepra y lo declarará limpio. Luego dejará ir a la avecilla viva sobre la faz del campo. 8 El que fue purificado lavará sus vestidos, todo su cabello será rasurado, se bañará con agua, y quedará limpio. Después entrará en el campamento, pero permanecerá fuera de su tienda siete días.
9 Al séptimo día será rasurado todo su cabello: de su cabeza, de su barba y de sus cejas, es decir, será rasurado todo su cabello, lavará sus vestidos, y bañará su cuerpo con agua, y quedará limpio.
10 Al octavo día tomará dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto, tres décimas de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal y un log de aceite. 11 Y el sacerdote que está purificando hará poner de pie ante la presencia de YHVH al hombre que es purificado, junto con estas cosas, en la entrada de la tienda de reunión. 12 Luego el sacerdote tomará uno de los corderos, y lo presentará como ofrenda por la culpa, con el log de aceite, y los mecerá como ofrenda mecida ante la presencia de YHVH. 13 Enseguida degollará el cordero en el lugar donde se degüella el sacrificio por el pecado y el holocausto, en el lugar del santuario, pues la ofrenda por el pecado, al igual que la ofrenda por la culpa, pertenece al sacerdote. Es cosa santísima. 14 El sacerdote tomará de la sangre de la ofrenda por la culpa, y untará el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, y el pulgar de su mano derecha, y el dedo gordo de su pie derecho.
15 El sacerdote tomará del log de aceite y lo verterá en su palma izquierda, 16 y untando su dedo derecho en el aceite que está en su palma izquierda, rociará siete veces delante de YHVH.
17 Del resto del aceite que está en su palma, el sacerdote untará una parte sobre el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, el pulgar de su mano derecha y el dedo gordo de su pie derecho, por encima de la sangre de la ofrenda por la culpa. 18 El resto del aceite que está en la palma del sacerdote lo pondrá en la cabeza del que es purificado, y el sacerdote hará expiación a favor de él en presencia de YHVH. 19 Luego el sacerdote preparará la ofrenda por el pecado y hará expiación por el que es purificado de su impureza, el cual después degollará el holocausto. 20 Y el sacerdote hará subir el holocausto y la ofrenda vegetal sobre el altar. Así el sacerdote hará expiación por él, y quedará limpio.
21 Pero si es pobre, y su mano no alcanza a tanto, entonces tomará un cordero para ser mecido como ofrenda por la culpa, para hacer expiación a favor de él, y una décima de efa de flor de harina, amasada con aceite, como ofrenda vegetal, y un log de aceite. 22 También dos tórtolas o dos palominos, según alcance su mano. Uno será para expiación por el pecado y otro para holocausto. 23 Al octavo día los hará llevar al sacerdote para su purificación a la entrada de la tienda de reunión, en presencia de YHVH. 24 Y el sacerdote tomará el cordero de la ofrenda por la culpa, y el log de aceite, y los mecerá como ofrenda mecida en presencia de YHVH.
25 Después degollará el cordero del sacrificio por la culpa, y el sacerdote tomará de la sangre de la expiación y untará en el lóbulo de la oreja derecha del que es purificado, y en el pulgar de su mano derecha y en el dedo gordo de su pie derecho. 26 Y el sacerdote echará del aceite sobre su propia palma izquierda, 27 y con su dedo derecho el sacerdote hará aspersión del aceite que tiene en su palma izquierda siete veces ante YHVH. 28 Luego el sacerdote aplicará parte del aceite que tiene en su palma sobre el lóbulo de la oreja derecha del que está siendo purificado, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el dedo gordo de su pie derecho, encima del lugar donde se puso la sangre de la ofrenda por la culpa. 29 Y el resto del aceite que está sobre la palma del sacerdote, lo pondrá sobre la cabeza del que es purificado, para hacer expiación a favor de él en presencia de YHVH.
30 Y ofrecerá la primera de las tórtolas o de los palominos, de lo que alcance su mano. 31 La primera víctima en ofrenda por el pecado y la otra como holocausto, junto con la ofrenda vegetal. Y el sacerdote hará expiación a favor del que es purificado, en presencia de YHVH.
32 Esta es la ley para el que haya tenido llaga de lepra y que su mano no alcance a tanto para su purificación.
La lepra de la casa
33 YHVH habló a Moisés y a Aarón, diciendo: 34 Cuando entréis en la tierra de Canaán, la cual Yo os doy en propiedad, y Yo ponga una llaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra propiedad, 35 aquel de quien es la casa irá a dar aviso al sacerdote, diciendo: Algo como una plaga ha sido vista en mi casa. 36 Entonces el sacerdote ordenará desocupar la casa antes de que entre a mirar la infección, para que no sea contaminado todo lo que esté en la casa; después el sacerdote entrará a examinarla. 37 Observará la mancha, y si en las paredes de la casa hay manchas verdosas o rojizas que parezcan más hundidas que la pared, 38 el sacerdote saldrá a la puerta de la casa y hará cerrar la casa por siete días. 39 Al séptimo día, el sacerdote volverá y observará, y he aquí, si la infección está extendida por las paredes de la casa, 40 el sacerdote ordenará que arranquen las piedras que tengan la infección, y las echarán fuera de la ciudad en un lugar impuro.
41 Después hará raspar la casa por dentro en derredor, y el polvo lo echarán fuera de la ciudad en un lugar impuro. 42 Luego tomarán otras piedras y las pondrán en lugar de las piedras quitadas, y se tomará otra mezcla para revocar la casa. 43 Pero si, después de ser quitadas las piedras, y raspada y revocada la casa, la infección irrumpe otra vez en la casa, 44 el sacerdote observará, y he aquí la mancha extendida por la casa, hay lepra maligna en la casa: está impura. 45 Derribará la casa con sus piedras y sus maderos y todo el polvo, y lo sacará fuera de la ciudad a un lugar impuro. 46 El que entre en la casa durante los días en que estuvo cerrada, quedará impuro hasta la tarde. 47 Y el que se acueste en aquella casa, lavará sus vestidos, y el que coma en la casa, lavará sus vestidos.
48 Pero si el sacerdote entra y observa, y he aquí, en verdad la infección no está extendida por la casa después de ser revocada, el sacerdote declarará limpia la casa, pues la infección ha desaparecido. 49 Para purificar la casa, tomará dos avecillas, y madera de cedro, escarlata e hisopo, 50 y degollará una de las avecillas en una vasija de barro, sobre aguas vivas. 51 Tomará la madera de cedro, el hisopo y la escarlata, junto con la avecilla viva, y los sumergirá en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas vivas, y rociará la casa siete veces.
52 Así purificará la casa con la sangre de la avecilla, y con las aguas vivas y con la avecilla viva, con la madera de cedro, con el hisopo y la escarlata. 53 Luego dejará ir la avecilla viva fuera de la ciudad sobre la faz del campo. Así hará expiación por la casa, y será limpia. 54 Esta es la ley acerca de cualquier infección de lepra y de tiña, 55 de la lepra del vestido y de la casa, 56 acerca de la hinchazón, de la costra y las manchas blancas lustrosas, 57 para declarar en qué día algo es impuro y en qué día será purificado. Esta es la ley sobre la lepra.
►14.2 Y esta… TM añade será. Se sigue LXX →§194.
►14.4 está siendo purificado… TM registra voz media. Se sigue LXX →§32.
►14.5 aguas vivas… Esto es, aguas corrientes.
►14.7-8 fue purificado… LXX usa pasiva →§32.
►14.10 una cordera… TM registra otra cría. Se sigue LXX; log… Medida de capacidad de un poco más de un cuarto de litro.
►14.13 degollará… Esto es, el que es purificado.
►14.16 untado… rociará… TM añade el sacerdote… con aceite… con su dedo. Se sigue LXX →§194.
►14.24 mecerá… TM añade el sacerdote. Se sigue LXX →§194.
►14.25 degollará… Esto es, el oferente.
►14.31 víctima… TM añade lo que alcance su mano. Se sigue LXX →§194.
►14.37 y si… TM añade he aquí infección. Se sigue LXX →§194.
►14.41 el polvo… TM añade que raspen. Se sigue LXX →§194.
►14.45 el polvo… TM añade de la casa. Se sigue LXX →§194.
►14.48 desaparecido… Lit. fue sanada.
►14.49 tomará… Esto es, el dueño de casa.
Levítico 15
Impurezas sexuales
1 Habló YHVH a Moisés y a Aarón, y les dijo: 2 Hablad a los hijos de Israel y decidles: Cualquier varón, cuando emita flujo seminal de su miembro viril, quedará impuro a causa de su flujo, 3 y esta la ley sobre la impureza por su flujo, sea que su miembro emita su flujo o que esté obstruido por su flujo: él tendrá su impureza. 4 Cualquier lecho en que se acueste quien padezca gonorrea, quedará impuro, y todo aquello sobre lo cual se siente, impuro quedará. 5 Cualquiera que toque su lecho, habrá de lavar sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 6 Cualquiera que se siente sobre cualquier objeto en que se haya sentado el que padece gonorrea, deberá lavar sus vestidos, se bañará en agua y permanecerá impuro hasta la tarde.
7 Asimismo, cualquiera que toque el cuerpo del que padece gonorrea, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 8 Y si el que tiene gonorrea escupe sobre el que está limpio, entonces este lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 9 Cualquier montura sobre la que cabalgue el que tiene gonorrea, será impura. 10 Y cualquiera que toque cualquier cosa que haya estado debajo de él, quedará impuro hasta la tarde, y el que la transporte, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 11 Todo aquel a quien toque el que tiene gonorrea, sin haberse lavado las manos en agua, habrá de lavar sus vestidos y bañarse. Y quedará impuro hasta la tarde. 12 La vasija de barro que toque quien padece gonorrea, será quebrada, pero todo utensilio de madera será lavado con agua.
13 Cuando el que padece gonorrea sea limpiado de su flujo, él mismo contará siete días desde su purificación, lavará sus vestidos y bañará su cuerpo en agua, y quedará limpio. 14 Al octavo día tomará dos tórtolas o dos palominos, y comparecerá ante YHVH, a la entrada de la tienda de reunión, y los entregará al sacerdote. 15 El sacerdote los ofrecerá, el uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto. Así el sacerdote hará expiación por él delante de YHVH a causa de su flujo. 16 El varón que tenga espermatorrea, lavará en agua todo su cuerpo y permanecerá impuro hasta la tarde. 17 Cualquier vestido o cuero sobre el cual haya caído semen, será lavado con agua y quedará impuro hasta la tarde. 18 Si un varón se acuesta con una mujer y hay efusión seminal, ambos se lavarán con agua y serán impuros hasta la tarde.
19 Cuando una mujer tenga flujo de sangre, que sea el flujo regular de su cuerpo, permanecerá siete días en su impureza legal, y cualquiera que la toque quedará impuro hasta la tarde. 20 Todo aquello sobre lo cual se acueste durante su impureza, quedará impuro, y todo aquello encima de lo cual se siente, será impuro. 21 Cualquiera que toque el lecho de ella, lavará sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 22 Asimismo todo el que toque cualquier objeto sobre el cual ella se haya sentado, deberá lavar sus vestidos, se bañará en agua y quedará impuro hasta la tarde. 23 Y si hubiere alguna cosa encima del lecho o encima del objeto sobre el cual ella se haya sentado, al tocarlo uno quedará impuro hasta la tarde.
24 Si un hombre yace con ella aun así, y su menstruo se vierte sobre él, quedará impuro por siete días, y toda cama sobre la que él se acueste será impura. 25 Y si una mujer padece flujo de sangre por muchos días, sin ser tiempo de su menstruo, o cuando tenga flujo pasado su período, todos los días de ese flujo impuro, será impura como en los días de su menstruación.
26 Todo lecho en que se acueste durante todos los días de su flujo, le será como el lecho de su menstruación, y todo aquello sobre lo cual se siente, quedará impuro como en la impureza de su menstruación. 27 Y cualquiera que toque estas cosas quedará impuro, tendrá que lavar sus vestidos y bañarse en agua, y quedará impuro hasta la tarde. 28 Y si estuviera limpia de su flujo, entonces contará para sí siete días, y después quedará purificada.
29 Al octavo día tomará consigo dos tórtolas o dos palominos, y los llevará al sacerdote, a la entrada de la tienda de reunión. 30 El sacerdote preparará el uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto. Así el sacerdote hará expiación por ella delante de YHVH a causa del flujo de su impureza.
31 Y así, pues, mantendréis separados de sus impurezas a los hijos de Israel, para que no mueran por sus impurezas, al contaminar mi tabernáculo, que está en medio de ellos. 32 Tal es la ley tanto para el que padece gonorrea, como para el que tiene espermatorrea que lo haga impuro; 33 para la impura en su período menstrual, para quien padece flujo, sea varón o hembra, y para el hombre que cohabita con mujer impura.
►15.2 flujo seminal… Esto es, secreción mucosa de la uretra producida por enfermedades venéreas, tal como gonorrea →v. 7.
►15.3 y esta… TM añade será. Se sigue LXX →§194.
►15.7 gonorrea… LXX gonoruos, de donde procede la palabra gonorrea. Se trata, pues, de una secreción infecciosa altamente contagiosa.
►15.11 bañarse… TM añade en agua. Se sigue LXX →§194.
►15.13 agua… TM añade viva (corriente). Se sigue LXX →§194.
►15.16 espermatorrea… Esto es, derrame involuntario del semen separado del acto sexual; cuerpo… Lit. carne.
2 Reyes 5
Naamán
1 Naamán, capitán del ejército de Siria, era un hombre muy estimado por su señor, porque por su intermedio YHVH había dado victoria a Siria. Era además valeroso en extremo, pero leproso. 2 Y los sirios habían salido en escuadrones, y habían llevado cautiva de la tierra de Israel a una jovencita, la cual estaba al servicio de la mujer de Naamán. 3 Y ella dijo a su señora: ¡Ojalá estuviera mi señor con el profeta que está en Samaria! Entonces lo libraría de su lepra. 4 Y uno fue e informó a su señor diciendo: Esto y esto ha dicho la jovencita de la tierra de Israel. 5 Y el rey de Siria dijo: Ve allí con una carta para el rey de Israel. Y partió llevando en su mano diez talentos de plata, seis mil piezas de oro y diez mudas de vestidos. 6 Y llevó la carta al rey de Israel, que decía: Ahora pues, cuando esta carta llegue a ti, he aquí te envío a mi esclavo Naamán, para que lo cures de su lepra. 7 Y sucedió que al leer la carta, el rey de Israel rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Acaso soy Ha-Elohim para matar o para hacer vivir, para que este me envíe a un hombre a curarlo de su lepra? Considerad ahora, y ved cómo busca ocasión contra mí.
8 Pero aconteció que, oyendo Eliseo que el rey de Israel había rasgado sus vestidos, envió a decir al rey: ¿Por qué has rasgado tus vestidos? Que venga a mí, y sabrá que hay profeta en Israel. 9 Naamán, pues, fue con sus caballos y sus carros, y se detuvo a la puerta de la casa de Eliseo. 10 Y Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate en el Jordán siete veces, y tu carne se te restaurará, y serás limpio. 11 Pero Naamán se retiró airado, diciendo: He aquí yo pensaba: Seguramente saldrá a mi encuentro, se detendrá, e invocará el nombre de su Elohim, y agitará su mano sobre el sitio y curará la lepra. 12 ¿Abana y Farfar, ríos de Damasco, no son mejores que todas las aguas de Israel? ¿Acaso no me lavaré en ellos y seré limpio? Y volviéndose, se fue airado. 13 Pero sus siervos se acercaron y le hablaron: Si el profeta te hubiera dicho que hicieras alguna cosa difícil ¿no la cumplirías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y serás limpio? 14 Entonces bajó y se sumergió siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Ha-Elohim, y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.
15 Enseguida volvió a Eliseo con toda su compañía, y fue, se presentó y dijo: He aquí ahora comprendo que no hay Elohim en toda la tierra, sino en Israel. ¡Recibe ahora, te ruego, algún presente de tu esclavo! 16 Pero él respondió: ¡Vive YHVH, delante de quien estoy, que no lo tomaré! E insistió que lo recibiera, pero él no quiso. 17 Y Naamán dijo: Pues entonces, te ruego que sea dada a tu esclavo la carga de tierra de un par de mulos, pues tu esclavo ya no ofrecerá holocausto ni sacrificio a otros dioses, sino a YHVH. 18 En esto perdone YHVH a tu esclavo: cuando mi señor entre al templo de Rimón para postrarse allí, y se apoye en mi mano, y yo me incline en el templo de Rimón; cuando yo tenga que inclinarme en el templo de Rimón, perdone YHVH a tu esclavo en esto. 19 Y él le dijo: Ve en paz.
Y se había alejado de él una cierta distancia, 20 cuando Giezi, siervo de Eliseo, pensó: He aquí mi señor eximió a este sirio Naamán al no recibir de su mano lo que traía. Pero, ¡vive YHVH, que de seguro correré tras él para tomar algo suyo! 21 Así Giezi siguió a Naamán, y cuando Naamán vio que corría tras él, se bajó del carro para recibirlo. 22 Y dijo: ¡Salud! Mi señor me ha enviado diciendo: He aquí que en este mismo momento han venido a mí desde la serranía de Efraín dos jóvenes de los hijos de los profetas: Dales, te ruego, un talento de plata y dos mudas de vestidos. 23 Y Naamán dijo: ¡Toma dos talentos! Y los ató en dos talegas con dos mudas de ropa, y los entregó a dos de sus siervos, que los llevaron delante de él.
24 Y cuando llegó a Ófel, los tomó de sus manos y los puso en la casa y despachó a los hombres. 25 Y él entró y se detuvo ante su señor. Entonces Eliseo le preguntó: ¿De dónde vienes, Giezi? Y este respondió: Tu esclavo no ha ido a ninguna parte. 26 Pero él le dijo: ¿No iba mi corazón contigo cuando el hombre se volvió de su carro a encontrarte? ¿Es tiempo este de recibir plata, y de tomar vestidos y olivares y viñas y ovejas y bueyes y siervos y siervas? 27 Pero la lepra de Naamán se pegará en ti y en tu descendencia para siempre. Y salió de su presencia leproso, blanco como la nieve.
►5.1 del ejército… TM añade del rey. Se sigue LXX →§194.
►5.5 carta… Heb. sefer. Cuando alude a una carta, aparece relacionada con la realeza o la administración gubernamental, y tiene una connotación oficial; piezas… Prob. siclo = 11.4 gr.
►5.8 Eliseo… TM añade el varón de Dios. Se sigue LXX →§194.
►5.11 TM añade Tetragrama. Se sigue LXX →§194.
►5.13 hablaron… TM añade y dijeron: Padre mío. Se sigue LXX →§194.
►5.15 se presentó… TM añade ante él. Se sigue LXX →§194.
►5.17 tierra… La petición de Naamán tiene como propósito erigir en su país un altar para el Dios de Israel, el cual, en ese momento, estaba ligado a un territorio específico.
►5.20 Eliseo… TM añade el varón de Dios. Se sigue LXX →§194.
►5.21 recibirlo… TM añade y dijo: ¿todo bien? Se sigue LXX →§194.
►5.23 TM registra varias añadiduras. Se sigue LXX →§194.
►5.24 Ófel… Esto es, colina fortificada. Acrópolis de Samaria; los hombres… TM añade y se fueron. Se sigue LXX →§194.
►5.26 Se inserta contigo para suplir elipsis del original.
2 Reyes 6.24.33
24 Después de esto, sucedió que Ben-Adad rey de Siria reunió todo su ejército, y subió y puso sitio a Samaria. 25 Y hubo una gran hambruna en Samaria (pues la habían sitiado), hasta el punto que la cabeza de un asno llegó a venderse por ochenta piezas de plata, y un cuarto de cab de estiércol de paloma por cinco piezas de plata.
26 Y sucedió que el rey de Israel pasaba por el muro, cuando una mujer clamó a él diciendo: ¡Ayúdame, mi señor, oh rey! 27 Pero él dijo: Si YHVH no te salva, ¿de dónde te salvaré yo? ¿Con algo del granero o del lagar? 28 Y agregó el rey: ¿Qué tienes? Y ella respondió: Esta mujer me dijo: Entrega tu hijo para que podamos comerlo hoy, y mañana comeremos el mío. 29 Cocimos, pues, a mi hijo, y lo comimos; y al día siguiente le dije: Entrega tu hijo para que podamos comerlo, pero ella ha escondido a su hijo. 30 Y oyó el rey las palabras de la mujer cuando pasaba por el muro, y rasgó sus vestidos; y el pueblo observó que vestía de saco sobre su cuerpo.
31 Y dijo: ¡Así me haga Elohim, y aun me añada, si la cabeza de Eliseo permanece hoy sobre él! 32 Y Eliseo estaba sentado en su casa, y los ancianos estaban sentados con él, cuando envió un hombre de su parte. Pero antes que el mensajero llegara a él, dijo a los ancianos: ¿Habéis visto como este hijo de homicida ha enviado a cortarme la cabeza? Observad cuando llegue el emisario, cerrad la puerta y rechazadlo con esta. ¿No se escucha tras él el ruido de los pasos de su amo? 33 Aún hablaba con ellos, cuando he aquí el mensajero bajaba a él, y dijo: Reconozco que esta desgracia es de parte de YHVH. ¿Qué más podría esperar de parte de YHVH?
►6.25 piezas… Quizá sean siclos de plata. La palabra hebrea aquí es distinta a 7.1; cab… Medida de capacidad de áridos; equivale a 1/6 de seah, o a aproximadamente, 2.2 dm; estiércol de paloma… La dificultad de esta expresión ha llevado a los traductores a proponer correcciones al TM, ninguna de las cuales resulta del todo satisfactoria.
►6.27 te salvaré… Es decir, ¿de dónde te daré comida?
►6.30 saco… Tela áspera que antiguamente se usaba como muestra de contrición o dolor.
►6.31 Eliseo… TM añade hijo de Safat. Se sigue LXX →§194.
►6.32 envió… Esto es, el rey de Israel; de su parte… Lit. de delante de él, o de su presencia; con esta… Lit. sujetadle con la puerta.
►6.33 mensajero… Prob. se refiere al rey y no al mensajero →7.2. Esto no es tan difícil considerando que la diferencia entre ambas palabras hebreas es de una letra; de parte de YHVH… Lit. He aquí esto. La desgracia es de parte de YHVH.
2 Reyes 7-8
Fin del sitio de Samaria
1 Y Eliseo dijo: Oíd palabra de YHVH: Así dice YHVH: ¡Mañana a esta hora: una medida de flor de harina por un siclo, y dos medidas de cebada por un siclo, en la puerta de Samaria! 2 Entonces, el oficial sobre cuya mano se apoyaba el rey, respondió a Eliseo diciendo: Aun haciendo YHVH cataratas en los cielos, ¿sucederá tal cosa? Y Eliseo dijo: He aquí lo verás con tus propios ojos, pero no comerás de ello.
3 Y había cuatro leprosos a la entrada de la puerta que se habían dicho: ¿Por qué nos quedamos aquí hasta morir?
4 Si decidiéramos entrar en la ciudad, la hambruna está en la ciudad y moriremos allí; y si nos quedamos aquí, también moriremos. Ahora, pues, vayamos y pasémonos al ejército de los sirios; si nos dejan con vida, viviremos, y si nos matan, no haremos más que morir. 5 Y se levantaron al alba para ir al campamento de los sirios, y cuando llegaron a la parte exterior del campamento de los sirios, he aquí, no había nadie.
6 Porque Adonai había hecho oír en el campamento de los sirios estruendo de carros, y ruido de caballos, y estrépito de un gran ejército; y cada uno había dicho a su compañero: ¡He aquí el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los hititas y a los reyes de Egipto para que vengan contra nosotros! 7 Por lo que se levantaron y huyeron al anochecer, abandonando sus tiendas, y sus caballos, y sus asnos; dejando el campamento tal como estaba, y habían huido por sus vidas.
8 Cuando estos leprosos llegaron a la parte exterior del campamento, entraron en una tienda, y comieron y bebieron, y sacaron de allí plata, y oro, y vestidos, y se fueron y lo escondieron; luego regresaron y entraron en otra tienda, y también se llevaron cosas de allí, y se fueron y las escondieron. 9 Después se dijeron el uno al otro: No es bueno lo que hacemos; este día es día de albricias, pero nosotros callamos, y si nos quedamos hasta la mañana, nuestra iniquidad nos alcanzará. Vayamos pues, entremos, e informemos en la casa del rey.
10 Y fueron y vocearon a la puerta de la ciudad, y les informaron, diciendo: Entramos al campamento de los sirios, y he aquí, no hay allí hombre, ni voz alguna de hombre, sino caballos atados y asnos, y las tiendas intactas. 11 Entonces los centinelas gritaron, y lo anunciaron dentro de la casa real. 12 Y el rey se levantó de noche, y dijo a sus siervos: Ahora os diré lo que han planeado los sirios: Saben que estamos hambrientos, y han salido del campamento para esconderse en el campo, diciendo: Cuando salgan de la ciudad, los prenderemos vivos y entraremos en la ciudad. 13 Y uno de sus siervos contestó diciendo: Tomemos cinco de los caballos que quedan, de los abandonados en todo Israel por los que se han ido, y los enviaremos y veremos.
14 Tomaron entonces dos carros con caballos, y el rey los envió tras el ejército de los sirios, diciendo: Id, y ved. 15 Y fueron tras ellos hasta el Jordán, y he aquí, todo el camino estaba lleno de vestidos y utensilios que los sirios habían arrojado en su apuro. Y volvieron los mensajeros e informaron al rey. 16 Entonces el pueblo salió y tomó el despojo del campamento de los sirios.
Así, una medida de flor de harina fue vendida por un siclo, y dos medidas de cebada por un siclo, conforme a la palabra de YHVH. 17 Y el rey había puesto junto a la puerta al oficial en cuya mano se apoyaba, y el pueblo lo pisoteó en la puerta, y murió, tal como había dicho el varón de Ha-Elohim, que había hablado cuando el rey bajó a él.
18 Sucedió pues como Eliseo había hablado al rey, diciendo: ¡Dos medidas de cebada por un siclo, y una medida de flor de harina por un siclo, mañana a estas horas, en la puerta de Samaria!
19 Y el oficial había contestado a Eliseo, diciendo: He aquí, aun haciendo YHVH ventanas en los cielos, ¿sucederá tal cosa? Y él había respondido: He aquí lo verás con tus propios ojos, pero no comerás de ello. 20 Y le sucedió así, pues el pueblo lo pisoteó en la puerta, y murió.
►7.2 oficial… Denota un alto cargo. ¿Escudero del rey? TM omite Eliseo. Se sigue LXX.
►7.6 Muchos mss. registran YHVH.
►7.10 Se sigue LXX.
►7.12 planeado… Lit. nos han hecho.
►7.13 Se sigue LXX.
►7.17 pisoteó… Heb. verbo ramás = pisar, o pisotear. No indica ni ausencia ni presencia de intención. Hebraísmo: pisar el barro →Is 41.25; pisar la uva →Is 63.3.
►7.18 Eliseo… Se sigue LXX.
►7.19 Eliseo… Se sigue LXX.
2 Reyes 8
Recompensa de la sunamita
1 Y Eliseo había hablado a aquella mujer a cuyo hijo había resucitado, diciendo: Levántate y vete, tú y tu casa, y vive donde puedas, porque YHVH ha llamado a la hambruna, la cual vendrá también sobre esta tierra por siete años. 2 Y la mujer se levantó e hizo conforme a la palabra de Eliseo, y se fue con los de su casa, y habitó como extranjera en tierra de los filisteos durante siete años.
3 Y sucedió al cabo de siete años que la mujer volvió de la tierra de los filisteos, y salió para implorar al rey por su casa, y por su terreno. 4 Y el rey habló a Giezi, siervo de Eliseo, varón de Ha-Elohim, diciendo: Cuéntame ahora todos los prodigios que ha hecho Eliseo. 5 Y sucedió, mientras él contaba al rey cómo había resucitado al muerto, he aquí la mujer a cuyo hijo había resucitado, llegó implorando al rey por su casa y por su terreno. Entonces dijo Giezi: Mi señor el rey, esta es la mujer, y este su hijo, a quien Eliseo resucitó. 6 Entonces el rey preguntó a la mujer, y ella le contó. Después el rey le asignó un oficial de la corte, diciendo: Restituye todo lo que tenía, y todos los frutos cosechados del campo desde el día que dejó el país hasta ahora.
Eliseo en Damasco
Joram y Ocozías
7 Y Eliseo fue a Damasco, y Ben-Adad, rey de Siria, estaba enfermo, y le dijeron: El varón de Ha-Elohim ha venido aquí. 8 Y el rey dijo a Hazael: Toma en tu mano un presente, y ve al encuentro del varón de Ha-Elohim, y consulta a YHVH por medio de él, y pregunta: ¿Sanaré de esta enfermedad? 9 Hazael fue pues a su encuentro llevándose consigo un presente de lo mejor de Damasco, una carga de cuarenta camellos, y se detuvo ante él, y le dijo: Tu hijo Ben-Adad, rey de Siria, me envía a ti, preguntando: ¿Sanaré de esta enfermedad? 10 Y Eliseo le respondió: Ve, dile: De seguro sanarás. Aunque YHVH me ha mostrado que ciertamente morirá. 11 Y lo miró fijamente hasta que se avergonzó. Entonces el varón de Ha-Elohim rompió a llorar. 12 Y Hazael dijo: ¿Por qué llora mi señor? Y él dijo: Porque sé el mal que harás a los hijos de Israel: a sus fortalezas prenderás fuego, a sus jóvenes matarás a espada, y estrellarás a sus niños, y abrirás el vientre a sus mujeres embarazadas. 13 Hazael dijo: ¿Qué es tu esclavo, este perro, para que haga estas cosas? Y Eliseo dijo: YHVH me ha mostrado que tú serás rey de Siria. 14 Y se alejó de Eliseo y fue a su señor, quien le dijo: ¿Qué te ha dicho Eliseo? Y él dijo: Me ha dicho que de seguro sanarás. 15 Y sucedió que al día siguiente, tomó un cobertor, lo empapó en agua y lo tendió sobre su rostro, y murió. Y reinó Hazael en su lugar.
16 En el año quinto de Joram ben Acab, rey de Israel, comenzó a reinar Joram ben Josafat, rey de Judá. 17 Cuando comenzó a reinar era de treinta y dos años, y reinó ocho años en Jerusalén. 18 Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, como la casa de Acab, pues una hija de Acab fue su mujer, e hizo lo malo a ojos de YHVH.
19 Pero YHVH no quiso destruir a Judá a causa de su esclavo David, pues le había prometido darle a él y a sus hijos una lámpara para siempre. 20 En sus días se rebeló Edom contra el dominio de Judá, e hicieron que un rey reinase sobre ellos. 21 Y Joram avanzó a Zair con todos los carros; y se levantó de noche y él mismo venció a Edom, que lo había rodeado junto con los capitanes de los carros; entonces el pueblo huyó a sus tiendas. 22 Pero Edom siguió en rebelión contra el dominio de Judá hasta hoy. En aquel tiempo también se rebeló Libna. 23 El resto de los hechos de Joram, y todo lo que hizo, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? 24 Y durmió Joram con sus padres, y fue sepultado con sus padres en la ciudad de David, y su hijo Ocozías reinó en su lugar.
25 En el año undécimo de Joram ben Acab, rey de Israel, comenzó a reinar Ocozías ben Joram. 26 Ocozías era de veintidós años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. El nombre de su madre era Atalía, hija de Omri, rey de Israel. 27 Y anduvo en el camino de la casa de Acab, y como la casa de Acab, hizo lo malo a ojos de YHVH. 28 Y fue con Joram ben Acab a la guerra contra Hazael rey de Siria en Ramot de Galaad, pero los sirios vencieron a Joram. 29 Y el rey Joram regresó para ser curado en Jezreel de las heridas que los sirios le habían hecho en Ramá, cuando combatía contra Hazael, rey de Siria. Y Ocozías ben Joram bajó a Jezreel para ver a Joram ben Acab, porque estaba enfermo.
►8.1 vive… Lit. ve… y vive donde vivas.
►8.2 Eliseo… Se sigue LXX.
►8.6 restituye… Se entiende, a la mujer.
►8.11 avergonzó… Esto es, Hazael.
►8.13 dijo… TM añade pero… tan grandes (cosas). Se sigue LXX →§194.
►8.16 TM añade siendo Josafat rey de Judá. Se sigue LXX →§194.
►8.19 lámpara para siempre… Hebraísmo que expresa la perdurabilidad de una dinastía.
►8.20 dominio… Lit. la mano.
►8.25 Joram… TM añade rey de Judá. Se sigue LXX →§194. Cronología →9.29; §167.
►8.27 Acab… TM añade porque era yerno de la casa de Acab. Se sigue LXX →§194.
►8.28 vencieron… Lit. golpear fuertemente, herir y, por extensión, matar.
►8.29 Joram… TM añade rey de Judá. Se sigue LXX →§194.