Texto Ôureo: Números 7
Lecturas para adultos en la semana
DĆa 1:Ā NĆŗmeros 7
DĆa 2: 2ĀŖCrónicas 7
DĆa 3: Esdras 5-6
DĆa 4: Salmo 30
DĆa 5: Mateo 5:13-20
DĆa 6: Juan 10:22-42
I- JanucÔ, la fiesta de la dedicación.
La mayorĆa de las personas, cuando oye la palabra JanucĆ”, piensa en la fiesta que celebra la victoria macabea sobre los griegos. Esta palabra hebrea significa ādedicaciónā y en realidad era una fiesta que celebraba el dĆa en que se inauguraba el tabernĆ”culo (y posteriormente el templo) ungiendo el altar.
Duraba 12 dĆas, en donde los prĆncipes de cada tribu traĆan ofrendas al santuario. El hecho de que un dĆa fuera un prĆncipe de una tribu y al otro dĆa fuera otro, hacĆa de cada uno de ellos un complemento con el otro. Es imposible servir a Dios correctamente si no hay una armonĆa entre todos los que lo hacen. Cada miembro es un individuo, pero a la vez precisa y es responsable de vivir en armonĆa con el resto de la congregación y su liderazgo.
En tiempos del rey AntĆoco IV (215-163 a.C.), la nación de Israel vivió uno de los momentos mĆ”s terribles de su historia. A este rey se le ocurrió acabar no con la nación, sino con su cultura. Entre otras cosas convirtió al templo de JerusalĆ©n en un lugar de adoración a dioses griegos. Una familia (los macabeos) se rebeló contra Ć©l venciĆ©ndole y reconquistando JerusalĆ©n. Cuando fueron a celebrar esta fiesta de la dedicación (JanucĆ”) se dieron cuenta de que el aceite para el fuego de la MenorĆ” no era suficiente y no alcanzarĆa para mantener encendido el candelabro (MenorĆ”) hasta que se pudiera producir en ocho dĆas mĆ”s aceite. Sin embargo, debĆan encender la MenorĆ” y consagrar el templo los 12 dĆas de dedicación. AsĆ que decidieron obedecer y ocurrió un milagro, la llama no se apagó durante los ocho dĆas de producción del aceite y pudieron consagrar el templo nuevamente. De esta forma surgió la celebración de ocho dĆas que conocemos hasta hoy como JanucĆ”, en el sentido prĆ”ctico, de encender diariamente la JanuquĆa[1], como en el sentido espiritual, el atraer la luz que viene de arriba y que prende en nosotros la luz de abajo para seguir iluminando. JesĆŗs participó de esta fiesta tal y como se celebra hoy de forma general. Ćl enseñó que aquel milagro, de visitar al ser humano y salvarle del pecado[2], representaba la obra de Dios que para muchos es imposible de creer.
Esta nueva fiesta consiste, principalmente, en un candelabro de nueve luces (JanuquĆa) que se van encendiendo una por dĆa hasta completar ocho dĆas. La novena luz se prende de primera cada dĆa, pues representa la luz divina que prenderĆ” a las demĆ”s. Es tiempo para juegos bĆblicos que simbolizan la permanencia en la palabra de Dios aun cuando sea prohibido por la sociedad; se comparten golosinas que hablan de la dulzura entre los hermanos en medio de un mundo que nos ve como enemigos y amargados. Se encienden las luces de tal manera que la JanuquĆa sea vista desde fuera de la casa, que recuerda cómo el testimonio de la obra de Dios que debe ser compartido con otros.
Preguntas:
1.- ¿Cómo se relaciona la presente fiesta de JanucÔ con Nm. 7?
2.- Investigue cómo se celebra la fiesta de JanucÔ hoy.
3.- ¿Cómo se relaciona Mt. 5.14-16 con esta fiesta de JanucÔ?
4.- ĀæQuĆ© sugerencia darĆa usted a una iglesia que desea desarrollar la armonĆa entre sus lĆderes a partir de esta fiesta de hoy?
[1] Las luces de la fiesta de JanucĆ” que se celebra hoy tienen nueve llamas y puede ser a manera de candelabro o no, mientras la MenorĆ” era un candelabro de siete brazos que donde Ćŗnico existĆa y se encendĆa era en el templo.
[2] Jn 10:22-42.
NĆŗmeros 7
Consagraciones y ofrendas
1 Aconteció que el dĆa en que MoisĆ©s terminó de hacer levantar el tabernĆ”culo, de ungirlo y santificarlo con todos sus utensilios, y de ungir y de consagrar el altar con todos sus utensilios, 2 que los jefes de Israel, cabezas de sus casas paternas, presentaron sus ofrendas. Ellos eran los jefes de las tribus que habĆan presidido el censo. 3 Hicieron llevar, pues, sus vĆctimas ante YHVH: seis carretas cubiertas y doce bueyes: una carreta por cada dos jefes y un buey por cada uno, y los hicieron acercar delante del tabernĆ”culo. 4 Y habló YHVH a MoisĆ©s, diciendo: 5 AcĆ©ptaselos, y serĆ”n para la obra de la tienda de reunión, y los darĆ”s a los levitas, a cada uno conforme a su servicio.
6 Entonces Moisés tomó las carretas y los bueyes y los entregó a los levitas. 7 A los hijos de Gersón dio dos carretas y cuatro bueyes, conforme a su servicio. 8 A los hijos de Merari dio cuatro carretas y ocho bueyes, conforme a su servicio, bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.
9 Pero a los hijos de Coat nada les dio, porque tenĆan a su cargo el servicio del santuario que habĆan de transportar a hombros. 10 Los jefes presentaron tambiĆ©n sus ofrendas durante la dedicación del altar, el dĆa en que este fue ungido, cercandoĀ ellos mismos sus vĆctimas ante el altar, 11 pues YHVH habĆa dicho a MoisĆ©s: DĆa por dĆa cada jefe acercarĆ” sus vĆctimas para la dedicación del altar.
12 En el dĆa primero presentó su ofrenda Naasón ben Aminadab, de la tribu de JudĆ”. 13 Su ofrenda consistió en una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, y un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal. 14 Un cucharón de oro de diez siclos, lleno de incienso. 15 Un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 16 y un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado. 17 Para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Naasón ben Aminadab.
18 En el dĆa segundo, presentó su ofrenda Natanael ben Suar, jefe de Isacar. 19 Como ofrenda suya presentó una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 20 y un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso. 21 Un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 22 y un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado. 23 Para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Natanael ben Suar.
24 En el dĆa tercero correspondió a Eliab ben Helón, jefe de los hijos de Zabulón. 25 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso y un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal. 26 Un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso. 27 Un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 28 y un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado. 29 Para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales.Ā Tal fue la ofrenda de Eliab ben Helón.
30 En el dĆa cuarto correspondió a Elisur ben Sedeur, jefe de los hijos de RubĆ©n. 31 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 32 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 33 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 34 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 35 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Elisur ben Sedeur.
36 En el dĆa quinto correspondió al jefe de los hijos de Simeón, Selumiel ben Zurisadai. 37 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 38 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 39 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 40 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 41 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Selumiel ben Zurisadai.
42 En el dĆa sexto correspondió a Eliasaf ben Dehuel, jefe de los hijos de Gad. 43 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 44 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 45 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 46 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 47 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Eliasaf ben Dehuel.
48 En el dĆa sĆ©ptimo correspondió a Elisama ben Amiud, jefe de los hijos de EfraĆn.
49 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 50 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 51 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 52 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 53 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Elisama ben Amiud.
54 En el dĆa octavo correspondió a Gamaliel ben Pedasur, jefe de los hijos de ManasĆ©s. 55 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 56 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 57 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 58 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 59 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Gamaliel ben Pedasur.
60 En el dĆa noveno correspondió a AbidĆ”n ben Gedeoni, jefe de los hijos de BenjamĆn. 61 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 62 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 63 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 64 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 65 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de AbidĆ”n ben Gedeoni.
66 En el dĆa dĆ©cimo correspondió a Ahiezer ben Amisadai, jefe de los hijos de Dan.
67 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 68 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 69 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 70 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 71 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Ahiezer ben Amisadai.
72 En el dĆa undĆ©cimo correspondió a Pagiel ben OcrĆ”n, jefe de los hijos de Aser. 73 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 74 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 75 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 76 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 77 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Pagiel ben OcrĆ”n.
78 En el dĆa duodĆ©cimo correspondió a Ahira ben EnĆ”n, jefe de los hijos de NeftalĆ. 79 Su ofrenda fue una fuente de plata de ciento treinta siclos de peso, un tazón de plata de setenta siclos, segĆŗn el siclo del santuario, ambos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal, 80 un recipiente de oro de diez siclos, lleno de incienso, 81 un becerro, un carnero, un cordero aƱal para el holocausto, 82 un macho cabrĆo para la ofrenda por el pecado, 83 y para el sacrificio de las ofrendas de paz, dos bueyes, cinco carneros, cinco machos cabrĆos y cinco corderos aƱales. Tal fue la ofrenda de Ahira ben EnĆ”n.
84 Tal fue la dedicación del altar el dĆa en que fue ungido por los jefes de Israel: Doce fuentes de plata, doce tazones de plata y doce recipientes de oro. 85 Cada fuente era de ciento treinta siclos, cada tazón de setenta. El total de la plata de estos utensilios fue de dos mil cuatrocientos siclos, segĆŗn el siclo del santuario. 86 Los doce recipientes de oro llenos de incienso, de diez siclos cada recipiente. El total del oro de los recipientes fue de ciento veinte siclos.
87 El total de las reses para el holocausto fueron: doce los becerros, doce los carneros, doce los corderos aƱales, con su ofrenda vegetal, y doce los machos cabrĆos, para la ofrenda por el pecado. 88 Y el total de reses para el sacrificio de las paces fueron veinticuatro bueyes, sesenta los carneros, sesenta los machos cabrĆos, y sesenta los corderos aƱales. Tal fue la dedicación del altar despuĆ©s de ser ungido.
89 Y cuando entraba MoisĆ©s en la tienda de reunión para hablar con Elohim, oĆa la voz que le hablaba de encima del propiciatorio que estaba sobre el arca del testimonio, entre los querubines, y le hablaba.
āŗ7.10 Se inserta sus ofrendas para suplir elipsis del original; ellos mismos… Es decir, los jerarcas.
āŗ7.14 diez siclos… Equivalente a 114 gr.
āŗ7.85 siclos… TM aƱade de plata. Se sigue LXX ā§194.
āŗ7.86 recipiente… TM aƱade segĆŗn el siclo del santuario. Se sigue LXX ā§194.
āŗ7.87 doce… ā§170 (n.° 12).
2 Crónicas 7
Solemnidades de la dedicación
1 Cuando Salomón terminó de orar, descendió fuego de los cielos y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria de YHVH llenó la Casa. 2 Y los sacerdotes no pudieron entrar en la Casa de YHVH, porque la gloria de YHVH habĆa llenado la Casa de YHVH. 3 Y todos los hijos de Israel, al ver descender el fuego y la gloria de YHVH sobre la Casa, se inclinaron rostro a tierra sobre el pavimento, y postrĆ”ndose, dieron gracias a YHVH, diciendo: Ā”Porque Ćl es bueno, porque para siempre es su misericordia!
4 Y el rey y todo el pueblo sacrificaron vĆctimas delante de YHVH. 5 Y el rey Salomón ofreció en sacrificio veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. AsĆ el rey y todo el pueblo dedicaron la Casa de Ha-Elohim. 6 Los sacerdotes estaban de pie en sus puestos, y los levitas tenĆan los instrumentos musicales de YHVH, que el rey David habĆa hecho para dar gracias a YHVH, porque su misericordia es para siempre, cuando David alababa por medio de ellos, y los sacerdotes los acompaƱaban tocando las trompetas, y todo Israel permanecĆa de pie.
7 Y Salomón consagró el interior del atrio que estaba delante de la Casa de YHVH, pues allĆ ofreció los holocaustos y las grosuras de las ofrendas de paz, porque el altar de bronce que habĆa hecho Salomón no podĆa contener el holocausto, y la ofrenda vegetal, y las grosuras. 8 Y mantuvo Salomón la solemnidad durante siete dĆas, y con Ć©l todo Israel, una asamblea muy grande, desde la entrada de Hamat hasta el torrente de Egipto. 9 Al octavo dĆa hicieron una asamblea solemne, porque habĆan celebrado la dedicación del altar en siete dĆas y guardado la solemnidad. 10 Y en el dĆa veintitrĆ©s del mes sĆ©ptimo mandó al pueblo a sus tiendas, regocijantes y alegres de corazón por la benevolencia que YHVH habĆa mostrado a David y a Salomón, y a su pueblo Israel. 11 AsĆ Salomón terminó la Casa de YHVH y la casa real. Y todo lo que vino al corazón de Salomón hacer en la Casa de YHVH y en su propia casa, fue prosperado.
12 Y por la noche YHVH se apareció a Salomón y le dijo: He escuchado tu oración y he escogido para MĆ este lugar como Casa de sacrificio. 13 Si Yo cierro los cielos para que no haya lluvia, o si mando la langosta para devorar la tierra, o si envĆo pestilencia entre mi pueblo, 14 y se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado mi Nombre, y oran, y buscan mi rostro, y se convierten de sus malos caminos, entonces Yo oirĆ© desde los Cielos, y perdonarĆ© sus pecados, y sanarĆ© su tierra. 15 Y mis ojos estarĆ”n abiertos y mis oĆdos atentos a la oración de este lugar, 16 porque ahora he escogido y santificado esta Casa, para que mi Nombre estĆ© en ella para siempre, y mis ojos y mi corazón estĆ©n allĆ todos los dĆas.
17 En cuanto a ti, si andas delante de MĆ como anduvo David tu padre, y haces conforme a todo lo que te he mandado, y guardas mis estatutos y mis decretos, 18 Yo afirmarĆ© el trono de tu reino, como pactĆ© con David tu padre, diciendo: No te faltarĆ” varón que gobierne sobre Israel. 19 Pero si vosotros os apartĆ”is y abandonĆ”is mis estatutos y mis mandamientos que he puesto ante vosotros, y vais y servĆs a otros dioses, y os postrĆ”is ante ellos, 20 entonces Yo los arrancarĆ© de mi tierra que les he dado, y esta Casa que he santificado para mi Nombre, la echarĆ© de mi presencia, y la pondrĆ© por refrĆ”n y escarnio entre todas las naciones. 21 Y esta Casa que es tan excelsa, vendrĆ” a ser de asombro a todo el que pase, de modo que dirĆ”: ĀæPor quĆ© ha hecho asĆ YHVH a esta tierra y a esta Casa? 22 Y responderĆ”n: Porque abandonaron a YHVH, el Elohim de sus padres, que los habĆa sacado de la tierra de Egipto, y se aferraron a otros dioses, y se postraron ante ellos, y los sirvieron. Por eso ha traĆdo sobre ellos todo este mal.
āŗ7.7 las grosuras… Lit. las grasas.
āŗ7.8 el torrente de Egipto… Esto es, Wadi ElArish. No debe ser confundido con el rĆo Nilo. Aquel marcaba de forma natural la frontera de Israel a 80 km al sur de Gaza.
āŗ7.9 siete dĆas… El acto se celebró durante la semana previa a la fiesta de los tabernĆ”culos (del 8 al 14) ā1R 8.65, y fue seguida por dicha solemnidad (del 15 al 22) āLv 23.33-36. TM repite por siete dĆas. Se sigue LXX ā§194.
āŗ7.20 los arrancarĆ©… les he dado… Nótese el cambio de sujeto (v. 19)
Esdras. 5-6
Reanudación de la obra
1 Entonces los profetas Hageo y ZacarĆas bar Iddo profetizaron a los judĆos que estaban en JudĆ” y en JerusalĆ©n en nombre del DIOS de Israel, quien estaba con ellos.
2 En ese tiempo se levantaron Zorobabel bar Salatiel y JesĆŗa bar Josadac y comenzaron a reedificar la Casa de DIOS que estaba en JerusalĆ©n, y con ellos, los profetas de DIOS que los apoyaban. 3 Pero al mismo tiempo se presentaron ante ellos Tatnai, gobernador de Allende el RĆo, y Setar-Boznai y sus compaƱeros, para decirles: ĀæQuiĆ©n os ha dado orden para edificar esta Casa, y terminar estos muros? 4 TambiĆ©n les preguntaron asĆ: ĀæCuĆ”les son los nombres de los hombres que reedifican este edificio? 5 Pero los ojos de DIOS estaban sobre los ancianos judĆos, y no los obligaron a interrumpir el trabajo hasta que el asunto fuera a DarĆo y este diera instrucciones por carta. 6 Entonces Tatnai, gobernador de Allende el RĆo, y Setar Boznai, y sus compaƱeros, los afarsaquitas de Allende el RĆo, enviaron al rey DarĆo 7
una carta donde fue escrito esto: Ā«A DarĆo el rey sea toda paz. 8 Sea notorio al rey que fuimos a la provincia de Judea, a la Casa del gran DIOS, que es construida con grandes piedras y madera en las paredes. Esta obra se ejecuta diligentemente y prospera en las manos de ellos. 9 Y preguntamos a aquellos ancianos: ĀæQuiĆ©n os dio orden de edificar esta Casa y terminar este muro? 10 Les preguntamos tambiĆ©n sus nombres para hacĆ©rtelo saber, para informarte los nombres de los que estĆ”n a la cabeza de ellos. 11 Y nos respondieron diciendo asĆ: Nosotros somos siervos del DIOS de los cielos y de la tierra, y reedificamos la Casa que fue construida hace muchos aƱos, la cual edificó y terminó un gran rey de Israel. 12 Pero por cuanto nuestros antepasados provocaron al DIOS de los cielos, Ćl los entregó en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, el caldeo, quien destruyó esta Casa, e hizo deportar al pueblo a Babilonia. 13 Pero en el primer aƱo de Ciro rey de Babilonia, el mismo rey Ciro dio orden para que esta Casa de DIOS fuera reconstruida. 14 Y los utensilios de oro y de plata de la Casa de DIOS, que Nabucodonosor habĆa sacado del santuario de JerusalĆ©n y puesto en el templo de Babilonia, el rey Ciro los sacó del templo de Babilonia y fueron entregados a uno llamado Sesbasar, a quien habĆa nombrado gobernador. 15 Y le dijo: Toma estos utensilios, anda y ponlos en el santuario que estĆ” en JerusalĆ©n, y que la Casa de DIOS sea reconstruida en su lugar. 16 Y el mismo Sesbasar vino y echó los fundamentos de la Casa de DIOS que estĆ” en JerusalĆ©n, y desde entonces hasta ahora se ha estado construyendo, aunque no estĆ” terminada. 17 Y ahora, si parece bien al rey, que se indague en la tesorerĆa real que estĆ” allĆ en Babilonia, para verificar si por el rey Ciro fue dada orden para reconstruir esta Casa de DIOS en JerusalĆ©n, y se nos diga la voluntad del rey sobre esto.Ā»
āŗ5.1-2 bar… Aram. hijo de.
āŗ5.3 Allende el RĆo… 4.10 nota.
āŗ5.6 los afarsaquitas… Prob. tĆtulo gubernamental de administradores de la región; Allende el RĆo… 4.10 nota.
Ā
Esdras. 6
Edicto de DarĆo
Dedicación de la Casa
La pascua
1 Entonces el rey DarĆo dio orden, e indagaron en la casa de los archivos, donde guardaban los tesoros allĆ en Babilonia. 2 Y en Acmeta, en el palacio que estĆ” en la provincia de Media, fue hallado un rollo donde estaba escrito: Ā«Memoria: 3 En el aƱo primero del rey Ciro, el mismo rey Ciro dio orden acerca de la Casa de DIOS que esta en JerusalĆ©n: Que la Casa sea reedificada en el lugar donde se ofrecen los holocaustos, y sus cimientos sean echados firmemente. Que su altura sea de sesenta codos y su anchura de sesenta codos, 4 con tres hileras de piedra tallada, y una hilera de madera nueva, y sean los gastos sufragados por la casa real; 5 y sean restituidos a la Casa de DIOS los utensilios de oro y de plata que Nabucodonosor sacó del santuario de JerusalĆ©n y transportó a Babilonia; sean devueltos y llevados otra vez al santuario de JerusalĆ©n, a su lugar, y sean colocados en la Casa de DIOS.
6 Por lo tanto: Tatnai, gobernador de Allende el RĆo, Setar-Boznai y sus compaƱeros, los afarsaquitas de Allende el RĆo, apartaos de allĆ, 7 y dejad llevar a cabo la obra de esa Casa de DIOS, y que el gobernador de los judĆos y los ancianos de los judĆos reconstruyan esa Casa de DIOS en su lugar. 8 Y por mĆ es dada orden de lo que habĆ©is de hacer con esos ancianos judĆos para la construcción de esa Casa de DIOS: Que del erario del rey, aun de los tributos de Allende el RĆo, sean pagados puntualmente los gastos a esos hombres, para que no se detengan. 9 Y lo que sea necesario: tanto becerros como carneros y corderos para holocaustos al DIOS de los cielos, como asimismo trigo, sal, vino y aceite, conforme a lo que digan los sacerdotes que estĆ”n en JerusalĆ©n, les sea dado cada dĆa sin falta, 10 para que puedan ofrecer sacrificios de olor que apacigua al DIOS de los cielos, y oren por la vida del rey y la de sus hijos. 11 Asimismo decreto que cualquiera que infrinja este edicto, se arranque un madero de su casa, y sea clavado y empalado en Ć©l, y que por ello, su casa sea convertida en estercolero. 12 Y Elaj, que hizo que su Nombre habite allĆ, destruya a todos los reyes y pueblos que alcen la mano para modificar o destruir esa Casa de DIOS que estĆ” en JerusalĆ©n. Yo, DarĆo, promulgo el edicto. Sea ejecutado con toda diligencia.Ā»
13 Entonces Tatnai, gobernador de Allende el RĆo, Setar-Boznai y sus compaƱeros, hicieron puntualmente segĆŗn el rey DarĆo habĆa ordenado. 14 Y los ancianos judĆos construyeron y prosperaron, conforme a la profecĆa del profeta Hageo y de ZacarĆas bar Iddo. Y terminaron la edificación conforme al mandato del DIOS de Israel, y al edicto de Ciro, al de DarĆo, y al de Artajerjes rey de Persia. 15 Y la Casa fue terminada al tercer dĆa del mes de Adar, que era el aƱo sexto del reinado del rey DarĆo. 16 Y los hijos de Israel, los sacerdotes y los levitas, y el resto de los hijos del cautiverio, consagraron esa Casa de DIOS con regocijo. 17 Y en la dedicación de esta Casa de DIOS, hicieron acercar cien becerros, doscientos carneros y cuatrocientos corderos; y doce machos cabrĆos como vĆctimas expiatorias por todo Israel, segĆŗn el nĆŗmero de las tribus de Israel. 18 Y establecieron a los sacerdotes segĆŗn sus clases y a los levitas segĆŗn sus órdenes para el servicio de DIOS en JerusalĆ©n, conforme a lo escrito en el rollo de MoisĆ©s. 19 Y los hijos de la cautividad hicieron la pascua el catorce del mes primero. 20 Los sacerdotes y los levitas se habĆan purificado como un solo hombre pero los demĆ”s repatriados no estaban purificados. Los levitas pues, una vez purificados, sacrificaron el cordero pascual por todos los hijos del cautiverio, y por sus hermanos los sacerdotes, y por ellos mismos.
21 Y comieron los hijos de Israel que habĆan vuelto del cautiverio, y todos los que junto a ellos se habĆan apartado de las inmundicias paganas de la tierra, para buscar a YHVH, el Elohim de Israel. 22 Y celebraron la fiesta solemne de los Ćzimos durante siete dĆas con regocijo, por cuanto YHVH los habĆa alegrado y habĆa dispuesto en su favor el corazón del rey de Asiria para fortalecer sus manos en la obra de la Casa de Ha-Elohim, el Elohim de Israel.
āŗ6.2 Acmeta… Capital del imperio Medo, llamada tambiĆ©n Ecbatana, lugar donde se encontraba la residencia veraniega del rey.
āŗ6.6, 8, 13 Allende el RĆo… 4.10 nota; sus compaƱeros… Otra traducción posible: y sus compaƱeros que habĆ©is de administrar el territorio de allende el EĆŗfrates.
āŗ6.12 Elaj… Variante de Elohim ā§1.
āŗ6.13 sus compaƱeros… Otra traducción posible: y sus compaƱeros que habĆ©is de
administrar el territorio de allende el Ćufrates.
āŗ6.15 Adar… Esto es, febrero/marzo.
āŗ6.19 mes primero… Esto es, NisĆ”n (marzo/abril).
āŗ6.20 purificados… TM omite pero los demĆ”s repatriados no estaban purificados. Los levitas, pues
Salmo 30
CÔntico para la dedicación de la Casa. Salmo de David.
Te glorifico oh YHVH, porque me has levantado,
Y no has dejado que mis enemigos se alegren de mĆ.
2 Ā”Oh YHVH, Elohim mĆo!
ClamƩ a Ti, y me sanaste.
3 ”Oh YHVH, arrebataste mi alma del Seol,
Cuando bajaba al sepulcro, hiciste que volviera a vivir!
4 Cantad salmos a YHVH, vosotros sus santos,
Y celebrad la memoria de su santidad.
5 Porque por un momento es su ira,
Pero su favor dura toda la vida.
Por la noche dura el llanto,
Pero al amanecer viene la alegrĆa.
6 En medio de mi seguridad, me decĆa:
No serƩ conmovido jamƔs,
7 Porque con tu favor, oh YHVH,
Me habĆas afirmado como un monte fuerte.
Escondiste tu rostro, fui turbado;
8 A Ti clamƩ, oh YHVH,
A Adonai dirigĆ mi sĆŗplica:
9 ¿Qué provecho hay en mi sangre cuando baje a la sepultura?
ĀæTe alabarĆ” el polvo?
ĀæAnunciarĆ” tu verdad?
10 Escucha, oh YHVH, y ten misericordia de mĆ,
”Oh YHVH, sé Tú mi ayudador!
11 Cambiaste mi lamento en baile,
Desataste mi cilicio y me vestiste de alegrĆa,
12 Para que te alabe con gloria y no calle.
Ā”Oh YHVH, Elohim mĆo, te alabarĆ© para siempre!
āŗ30.1 dedicación de la Casa… La Escritura no menciona que este salmo haya sido cantado en la dedicación de la primera Casa. Su connotación profĆ©tica es notable, pues es probable que este salmo sea entonado por su compositor resucitado, en ocasión de la dedicación de la futura Casa ā17.15; Os 3.5; Ez 37.25; 44.3; 45.17.
āŗ30.9 en mi sangre… Es decir, en mi muerte.
Mateo 5:13-20
Sal y luz
Mr 9.50; Lc 14.34-35
13 Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve insĆpida, Āæcon quĆ© serĆ” salada? Para nada es buena ya, sino para ser echada fuera y pisoteada por los hombres. 14 Vosotros sois la luz del mundo. Una ciudad asentada sobre un monte no puede ser escondida.
15 Tampoco encienden una lÔmpara y la ponen debajo del almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que estÔn en la casa. 16 Asà alumbre vuestra luz delante de los hombres, de forma que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que estÔ en los Cielos.
Acerca de la ley
17 No penséis que vine a abrogar la ley o los profetas. No vine para abrogar sino para cumplir, 18 porque de cierto os digo: ”Hasta que pase el cielo y la tierra, de ningún modo pasarÔ una yod ni un trazo de letra de la ley hasta que todo se cumpla! 19 Por tanto, cualquiera que suprima uno solo de estos mandamientos mÔs pequeños, y asà enseñe a los hombres, muy pequeño serÔ llamado en el reino de los Cielos, pero cualquiera que los practique y enseñe, este serÔ llamado grande en el reino de los Cielos. 20 Porque os digo que si vuestra justicia no fuera mayor que la de los escribas y fariseos, de ningún modo entraréis en el reino de los Cielos.
Ā āŗ5.13 sal… āMr 9.50; Lc 14.34-35.
āŗ5.14 luz… āJn 8.12; 9.5.
āŗ5.15 lĆ”mpara… āMr 4.21; Lc 8.16; 11.33.
āŗ5.16 glorifiquen… ā1P 2.12.
āŗ5.18 yod… La letra mĆ”s pequeƱa del alfabeto hebreo (×); trazo de letra… Es decir, los distintos trazos que conforman las letras hebreas.
āŗ5.19 practique y enseƱe… Nótese el orden: primero practicar, despuĆ©s enseƱar.
Juan 10:22-42
La seguridad de la salvación
22 Llegó entonces la fiesta de la dedicación en JerusalĆ©n. Era invierno, 23 y JESĆS se paseaba en el templo, en el pórtico de Salomón. 24 Entonces lo rodearon los judĆos, y le decĆan: ĀæHasta cuĆ”ndo tienes en suspenso nuestra alma? Dinos claramente si tĆŗ eres el CRISTO. 25 JESĆS les respondió: Os lo dije, y no creĆ©is. Las obras que Yo hago en el Nombre de mi Padre, estas dan testimonio de MĆ; 26 pero vosotros no creĆ©is, porque no sois de mis ovejas. 27 Mis ovejas oyen mi voz, y Yo las conozco, y me siguen, 28 y Yo les doy vida eterna, y no perecerĆ”n jamĆ”s, y nadie las arrebatarĆ” de mi mano. 29 Lo que mi Padre me ha dado es mayor que todas las cosas y nadie puede arrebatarlo de la mano del Padre. 30 Yo y el Padre somos uno.
31 Los judĆos recogieron otra vez piedras para apedrearlo. 32 JESĆS les dijo: Muchas obras buenas del Padre os he mostrado, Āæpor cuĆ”l de ellas me apedreĆ”is? 33 Le respondieron los judĆos: Por buena obra no te apedreamos, sino por blasfemia, y porque tĆŗ, siendo hombre, te haces DIOS. 34 JESĆS les respondió: ĀæNo estĆ” escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? 35 Si llamó dioses a aquellos a quienes llegó la Palabra de DIOS (y la Escritura no puede ser quebrantada), 36 Āæa quien el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decĆs: Blasfemas, porque dije: Soy Hijo de DIOS? 37 Si no hago las obras de mi Padre, no me creĆ”is; 38 pero si las hago, aunque no me creĆ”is a MĆ, creed a las obras, para que conozcĆ”is, y sigĆ”is conociendo, que el Padre estĆ” en MĆ y Yo en el Padre. 39 Procuraron otra vez prenderlo, pero escapó de sus manos.
40 Y fue nuevamente al otro lado del JordĆ”n, al lugar donde Juan bautizaba al principio, y permaneció allĆ. 41 Y muchos acudieron a Ćl, y decĆan: Juan, a la verdad, ninguna seƱal hizo; pero todas las cosas que dijo Juan acerca de este eran verdaderas. 42 Y muchos creyeron en Ćl allĆ.
āŗ10.3 el portero… ā§315.
āŗ10.8 ladrones y salteadores… Prob. lĆderes religiosos āMt 7.22.
āŗ10.9 y entrarĆ” y saldrĆ”… āEf 2.1-3.
āŗ10.11 el buen Pastor… Lit. el Pastor, el bueno. Enfatiza diferencia (vv. 12-13) entre ser pastoreado por la Vida o la Muerte āSal 49.14; pone su vida… TR dar su vida de Mt 20.28 y Mr 10.45.
āŗ10.13 porque es asalariado… Mā aƱaden huye.
āŗ10.14 y conozco las mĆas… āEz 34.11-12; Mā aƱaden mis ovejas.
āŗ10.15 Yo conozco al Padre… āMt 11.27; Lc 10.22.
āŗ10.18 Yo la pongo de MĆ mismo… ā19.30; §89.
āŗ10.22 la fiesta de la Dedicación… ā§83.
āŗ10.26 pero… Mā aƱaden como os he dicho.
āŗ10.30 somos uno… ā§84.
āŗ10.32 de ellas… Lit. de las obras de ellas.
āŗ10.33 por blasfemia… āLv 24.16.
āŗ10.34 dioses… āSal 82.6.
āŗ10.38 sigĆ”is conociendo… TR omite frase.
āŗ10.40 al lugar… āJn 1.28

