SIDUR Al ACOSTARSE
(סִידוּר לִשְׁכִּבַּת הַלַּיְלָה)
Shemá:
:שְׁמַע יִשְׂרָאֵל יְהוָה אֱלֹהֵינוּ יְהוָה אֶחָֽד
Shemá Israel, Adonaí Elohenu, Adonaí ejad.
Oye Israel, el Señor nuestro Dios el Señor uno es.
:וְאָהַבְתָּ אֵת יְהוָה אֱלֹהֶיךָ בְּכָל־לְבָבְךָ וּבְכָל־נַפְשְׁךָ וּבְכָל־מְאֹדֶךָ
:וְאָהַבְתָּ לְרֵעֲךָ כָּמוֹךָ
Veahavta Et Adonaí Eloheija Bekjal Levavekja, Uvekjal Nafshekja, Uvekjal Mehodekja.
Veahavta Lereajá Kamoja.
Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente, y con todas tus fuerzas.
Y amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Meditación por arrepentimiento y perdón:
Se reflexiona en todo lo que ha ocurrido en el día y si hay necesidad de arrepentimiento o de asumir una actitud de perdón este es buen momento para hacerlo.
Mazikim:
«Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor, que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero, ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni dormirá el que guarda a Israel. El Señor es tu guardador; el Señor es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigará de día, ni la luna de noche. El Señor te guardará de todo mal; Él guardará tu nefesh. El Señor guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre.» (Sal 121).
«Mirad, bendecid al Señor, vosotros todos los siervos del Señor, los que en la casa del Señor estáis por las noches. Alzad vuestras manos santas, y bendecid al Señor. Desde Sion te bendiga el Señor, el cual ha hecho los cielos y la tierra.» (Sal 134).
Hamapil:
:הַמַּפִּיל חֲבֵלֵי שֵׁנָה עַל עֵינַי וְתֵיבֵל תַּנְמִימִין עַל עַפְעַפַּי
:יִהְיֶה רָצוֹן מִלְּפָנֶיךָ יְיָ אֱלֹהַי וֵאלֵֹהֵי אֲבוֹתַי, שֶׁתְּקַדֵּם עָלַי וְעַל כָּל עַמִּי בֵּית: יִשְׂרָאֵל לִשְׁמִיעָתָם קוֹל שְׁנוֹת תּוֹרָה וּלְמַסְמְּכָן עַל מִשְׁמַעְתָּם לַעֲבֹדָתֶךָ
בְּיִרְאָה, וְלִירָאָה גְּשֵׁמִים וְרָרָע. וּלְהַעֲבִיר עָלֵיהֶם רוּחוֹת רָעוֹת. וּבְרִכַּת שֵׁם אֲדֹנָי אֱלֹהֵינוּ, כְּפְתִיחַת עֵינַי, וּכְאִסְתַּכְּלוֹת עֵינַי קוֹמְמִיּוֹת בְּכִסְאוֹ עַל קִסְאוֹ,
:כֵּן פְּתַח עֵינַי וּכְאִסְתַּכְּלוֹת עֵינַי קוֹמְמִיּוֹת עֲלֵיהֶם בְּרַחֲמִים יִהְיוּ לְרָצוֹן אִמְרֵי פִי וְהֶגְיוֹנֵי לִבִּי לְפָנֶיךָ ה’ צוּרִי וְגוֹאֲלִי
Hamapil javelei sheiná al einái, v’teibel tanmimín al afápai.
Yihyé ratzón mil’fáneja Adonái Elohai v’Elohei avotái, shet’kadem alái v’al kol amí beit Israel lishmi’atám kol sh’not Torá ul’mas’meján al mish’matám la’avodatójá. B’yerá v’lir’á g’shemím v’rá. Ul’havír aléihem rujót ráot. Uv’rijat shém Adonái Eloheinu, k’ftijat einái, uv’ishtak’lot einái kum’miyyót b’jis’ó al kis’ó, kén ftaj einái, uv’ishtak’lot einái kum’miyyót aléihem b’rajamím.
Yihyú l’ratzón imrê fi v’hagiyonêi libi lifáneja, Adonái tzurí v’goali.
El que pone vendas sobre mis ojos y cubre mis párpados.
Que sea Tu voluntad, Señor mi Dios y Dios de mis padres, ir junto a mí y todo el pueblo de Israel para que escuchemos el sonido antiguo de la Torá y para sostener su significado con temor en el servicio a Tí. También danos la lluvia y el rocío, y que se desvíen los vientos perjudiciales que vienen. Que la bendición del nombre de Adonai nuestro Dios, sea como el abrir de mis ojos y levantarlos hacia Tu trono, bajo Tu misericordia.
Que los dichos de mi boca y las meditaciones de mi corazón sean agradables delante de Ti, Señor, mi Roca y mi Redentor.