LOS ASQUENAZÍES.

Aunque me quiero concentrar más en la historia contemporánea, es bueno partir diciendo que entre los siglos XI y XV, se desarrollaron grandes escuelas rabínicas (yeshivot) en la zona de España (conocida hoy como Sefarad) y la zona de Europa del Este (conocida como AsquenazÍ). Aunque la primera es la más antiguas de las dos, cosa que trataré también en un escrito aparte, la Asquenazí llegó a identificarse y definirse muy claramente, con su idioma propio (el yidish: judeo-alemán), sus tradiciones y rituales religiosos (minjaguim), e inclusive con un arte culinario bien peculiar.

Aprovecho aquí para aclarar que estudios recientes de ADN conectan a este grupo con diferentes comunidades del oriente mesopotámico, cosa que descarta aquella teoría de que este grupo es descendiente exclusivamente del pueblo indoeuropeo conocido como los jázaros (cuya historia de conversión al judaísmo a fascinado a varios escritores y sobre todo a teóricos de conspiraciones antisemitas, aunque realmente esto dista mucho de la histórica demostrable).

Estas escuelas asquenazíes se fueron expandiendo con el tiempo a zonas como: Polonia, Rusia, Lituania, Austria, Hungría y otras de esa misma área. Como consecuencia del impacto mundial del renacimiento y en alguna medida también de la reforma luterana sobre el mundo Asquenazí, también se dio entre ellos un movimiento reformista que se proponía actualizar muchas de las costumbres que hasta ese momento habían marcado a esta diáspora, concentrándose o dándole una importancia única más bien sólo a la ética social. Para ellos la autoridad de la Escritura no era tanto divina como del propio pueblo de Israel, así que si esta era más la palabra del pueblo que la de Dios se podía separar entre costumbres culturales de Israel y sus valores éticos sociales.

Como reacción a este movimiento reformista surgió através de la definición otro movimiento que trataba de conservar todo como se había recibido hasta ese momento, incluyendo esa nueva cultura asquenazí que venía desarrollándose de la dinámica entre el judaísmo y la cultura europea, y este se llamó ortodoxo. Ambos movimientos crecieron y fueron decidiendo la vida cotidiana de los judíos en todo ese mundo Asquenazí.

Una vez que comenzó la emigración a USA como consecuencia de las persecuciones (cosa que narra la famosa película El violinista en el tejado), surge otro grupo en la nueva diaspora que no quería vivir tan separados de las costumbres judeo-europeas, pero a la vez tampoco quería vivir el extremismo ortodoxo ya que estaban en otras tierras, y ellos se llamaron los Conservadores (masortí).

Ahora, en el movimiento ortodoxo específicamente se dio otro fenómeno interesante, y es que dentro de él surgieron muchos grupos diferentes sin dejar la ortodoxia rabínica: Los Modernos Ortodoxos, que por ejemplo usan una kipá (cobertor de la cabeza) tejida y que puede ser de varios colores, con una cotidianidad social es simplemente moderna (trabajos, estudios, vida política, etc.). Sin embargo también estaban los Haredi o ultraortodoxos que son más exclusivistas y tratan de alejarse completamente de todo lo que pueda tener una influencia «gentil», aunque no son capacez de distinguir que la mayoría de sus costumbres son de los gentiles y de la ápoca medieval de su Europa del este. Estos se distinguen de los Modernos Ortodoxos por sus ropas que combinan solo en blanco y negro, con kipá negra y gorros de pelo de zorra.

Estos Haredi a su vez se dividen en dos grupos generales los que vienen de la escuela de Lituania y los Hasídicos, estos dos son muy parecidos y sus diferencias son muy de detalles sutiles (por ejemplo, los lituanos se ponen las patillas (peyot) detrás de las orejas y se pueden afeitar la barba, mientras los Hasídicos se dejan las patillas más largas delante de las orejas y no pueden afeitarse). Si tomamos una lupa y miramos dentro de estos dos grupos Haredi vamos a ver dentro de cada uno que también hay otros, como por ejemplo dentro del Hasidismo que vamos a encontrar a: JaBaD Lubavitch, Satmar, Bovod, Pupa, Breslov, Karliner, etc.

Así que, cuando hoy en día escuchamos hablar de todos estos nombres: reformistas, conservadores, ortodoxos, Hasídicos, reconstruccionistas, y cuanto nombre no imaginamos, todo eso ocurre solo dentro de la comunidad que viene de la diáspora Asquenazí. Las demás diásporas son considerados por ellos como ortodoxos, pero esos grupos nunca se llamarían ni clasificarían a sí mismos así, simplemente se llaman Sefarditas, Mizrajitas, Romaniotas y Griegos, entre los cuales nunca ha existido esa fragmentación.

Continuará…

Autor: Dr. Liber Aguiar